Starlink podría llegar en septiembre: el servicio de internet por satélite de Elon Musk deberá enfrentarse antes a las regulaciones de diferentes países

Starlink, la unidad de internet por satélite de SpaceX, la compañía del espacio de Elon Musk, quiere ofrecer cobertura global para septiembre, aunque deberán hacer frente a la regulación propia de cada país, según explicó Gwynne Shotwel, en una conferencia de tecnología de Macquarie Group, citada por Reuters. 

"Hemos desplegado con éxito unos 1.800 satélites y, una vez que todos esos satélites alcancen su órbita operativa, tendremos una cobertura global continua, por lo que debería ser el plazo de septiembre", concretó Shotwel. "Pero luego tenemos trabajo regulatorio para ir a todos los países y obtener la aprobación para brindar servicios de telecomunicaciones".

El objetivo de Starlink es desplegar 12.000 satélites que le costarían a la compañía unos 10.000 millones de dólares (alrededor de 8.400 millones de euros), aunque ya se ofrece servicio en fase beta a 11 países. Sin embargo, según aseguró Musk este mismo año, se pretende lanzar al espacio 42.000 satélites en los años venideros. 

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Con este servicio y la conquista del espacio junto a la NASA, Musk pretende convertirse en el dueño del mundo exterior, al menos en cantidad de aeronaves desplegadas, ya que consiguió ganar un contrato con la agencia estadounidense valorado en 2.500 millones de euros para llevar en 2024 astronautas, de nuevo, a la Luna.

Aunque no todo será fácil ya que, como aseguró Shotwel, antes Starlink tendrá que hacer frente a diferentes regulaciones de los países donde preste servicio, una tarea complicada que tendrá que complementarse con la abultada financiación que ha recibido hasta el momento.

Las ayudas a Starlink

Starlink, además, ha recibido el apoyo de las subvenciones federales de Estados Unidos, captando en diciembre ayudas por 885 millones de dólares (alrededor de 730 millones de euros), algo que provocó las quejas de diferentes proveedores de servicios de internet.

En España, es posible contratar este servicio en fase beta, con el abono de una cuota de 99 euros para reservar plaza, totalmente reembolsables, con ese mismo coste fijo al mes. A esta cuota habría que sumar el kit que incluye la antena, que deberá montar el propio usuario en su hogar, y cuyo coste asciende a  499 euros más 60 euros de gastos de envío. Probablemente, el servicio se amplíe, ya que las plazas actuales son limitadas. 

Para  hacer frente a las regulaciones de España, Starlink registró ante la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), 2 sociedades que están en diferentes países: la primera, con sede en Dublín (Irlanda) se conoce como Starlink Internet Services Limited; la segunda, en Madrid, se denomina Starlink Spain, encargada de las frecuencias y el suministro de conmutación de datos. 

En conclusión, puede que este mismo año, a finales del verano, ya se pueda utilizar el servicio de manera más normalizada, lo que implicaría que Starlink podría empezar a generar beneficios, después de la elevada inversión que han realizado en este servicio de internet por satélite.