Daisuke Kajiyama y su difunta esposa, Hila, pasaron 2 años restaurando una casa tradicional japonesa abandonada de 96 años que ahora funciona como Airbnb.
Mylène Garot, anfitriona de Boatsetter, ingresa 19.800 dólares al año, pero no siempre fue así. En este artículo cuenta cómo montó su negocio desde el principio.
Michelle Burson es propietaria de un Airbnb y, a pesar de hacer pagar a sus huéspedes una tasa de limpieza, también les pide que hagan algunas tareas domésticas.
El consejero delegado de Airbnb, Brian Chesky, intentó trabajar a distancia desde Airbnbs, como hicieron muchos otros, para entender el fenómeno del teletrabajo.
Alexi McKinley gana hasta 9.500 dólares al mes porque alquila su vivienda y vive en una caravana en la entrada de su casa durante unas semanas cada mes.
Como medida de seguridad, Airbnb a veces bloquea a usuarios porque ha descubierto que hay probabilidades de que viajen con otra persona que ya ha sido vetada.
'Business Insider' ha elaborado una lista de las 10 propiedades estadounidenses más extravagantes y buscadas de Airbnb el año pasado que seguro te sorprenderán.
Will Sutherland tiene un Airbnb 'skoolie': un autobús escolar que compró por 1.000 dólares (945 euros) y convirtió en dormitorio por el que ahora cobra mucho dinero.
Airbnb publica sus 14 nuevas propiedades más deseadas para 2023, una lista que incluye propiedades en todo el mundo con opciones para grupos, familias y parejas.
'Business Insider' ha preguntado a varios anfitriones de Airbnb qué les gustaría que sus huéspedes dejaran de hacer durante las estancias en sus propiedades.
Compré en 2014 una propiedad por 14.000 euros en Joshua Tree para alquilarla como Airbnb, pero ha tenido tanto éxito que he podido dejar mi trabajo gracias a ello.
En Navidad, Molly Flaherty llegó a casa y se encontró a una familia en su puerta. La habían reservado en Airbnb, pero la propietaria nunca había puesto un anuncio.
Will Sutherland tardó 6 meses en construir una casa en un árbol que anuncia en Airbnb: le ha permitido dejar su trabajo porque gana con ella 30.000 dólares al año.
Sebastian Rumberg solía vivir en pleno centro de Berlín, luego compró una granja en el campo por 210.000 euros y paga el préstamo con anuncios en Airbnb.