Estos jóvenes rescatan la fruta imperfecta de la huerta para llevarla a tu mesa: así lucha Talkual contra el desperdicio alimentario de las grandes superficies

Talkual es una frutería pero decir que solo es una frutería sería caer en un error: la empresa hace llegar a sus clientes fruta y verdura 'imperfecta': productos que no cumplen los criterios estéticos que los supermercados imponen para su venta y con ello, encabezar una lucha contra el desperdicio alimentario. 

Bajo esta premisa, la empresa, que ya hace llegar sus productos a más de 1.000 clientes recurrentes, tiene hasta el momento unos ingresos anualizados que se elevan casi al millón de euros.

Con todo ello, la compañía teje una red empresarial, pero especialmente una social: encarna una cruzada contra el desperdicio de alimentos, aspira a convertirse en una alternativa real para productores locales mientras brinda una oportunidad laboral a personas en riesgo de exclusión social.

La cruzada de Talkual contra el desperdicio alimentario

El pasado año cada español arrojó a la basura 30,93 kilos, lo que supone 1,6 kilos más frente a la tasa de 2019, según se desprende del informe anual de desperdicio alimentario que elabora el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.

Pese a que los hogares redujeron en 4 décimas la tasa de desperdicio alimentario, hasta situarla en el 4,3% el año pasado, los españoles tiramos a la basura 1.363,75 millones de kilos. Frutas, verduras y hortalizas se llevan la peor parte: en 2020 supusieron el 45 % del desperdicio de productos sin elaborar. 

A nivel europeo, los alimentos desperdiciados generan 170 millones de toneladas equivalentes de CO₂ al año, lo que supone el 17% de las emisiones directas de gases de efecto invernadero de la UE.

Se trata de un problema alimentario pero también medioambiental. Y Talkual quiere ser el empuje de una nueva realidad. "Calculamos que hemos rescatado 300 toneladas de frutas y verduras", explica Aldomà, CEO y encargado, junto a su equipo, de que estas cifras sean una realidad tangible. El empresario subraya también la reducción de 619.000 kg de emisiones de CO₂, así como la merma de la huella hídrica valorada en 87 millones, que supone su trabajo. 

Hasta el momento tienen anualizados casi el millón de euros, lo que supone 4 veces más que lo anotado en todo 2020, cuando el proyecto echó a andar, según detallan a Business Insider España.

La importancia del productor local frente la presión de las grandes superficies 

La empresa comenzó un mes antes de que la pandemia irrumpiera y desde entonces, confiesan, no han dejado de crecer. 

Entre clientes finales y empresas, la compañía tiene ya 1.000 usuarios recurrentes a los que hacen llegar sus productos, sin plásticos y con envases 100% biodegradables.

Pero la empresa catalana va más allá. Talkual presume de representar una enorme cadena de valor: "Vendemos un producto saludable y en buen estado y lo hacemos a un precio reducido, en beneficio del consumidor y por supuesto, del productor". 

Poner en el centro de la ecuación a los productores locales es uno de los ejes principales de la empresa, si no el que más. Estos productores, explican, sufren las consecuencias de las exigencias de las grandes superficies por buscar un producto perfecto y acaban teniendo un excedente al que no pueden dar salida. 

De hecho, según un estudio elaborado por la consultora Nielsen, los supermercados españoles desperdician en torno a 128 millones de kilos de alimentos frescos al año, de los cuales el 49% de ellos acaban en la basura. 

"Creemos que estamos cambiando el modelo de consumo de fruta y verdura y nos gustaría seguir haciéndolo con otros productos creando un marketplace de productores", explica Aldomà en este sentido.

Bajo esta hoja de ruta, la compañía ya planea adentrarse en otros mercados como europeos como Italia y Francia, con la premisa de brindar a los productores de estos países vecinos otra forma de consumo.

Brindar un proyecto de vida a quien no lo tiene: el otro eje de Talkual

En apenas dos años de actividad, Talkual ha generado 13 puestos de trabajo, 9 de ellos personas en situación de vulnerabilidad social. La misión pasa ahora por formar una plantilla de 35 personas para 2022.

Para ello, la empresa trabaja conjuntamente con la asociación ASPID, la cual brinda prácticas laborales a jóvenes en riesgo de exclusión social. "Acabamos incorporando al equipo a aquellos que creen y se sienten parte de nuestra misión", aporta el CEO. 

Como parte del avance en este terreno, la empresa ahora está inmersa en la contratación de menores extranjeros no acompañados. Lo hacen con la intención de desligar a estos jóvenes del poso negativo que una parte la sociedad les ha impuesto. 

Así, y desde la sociedad cooperativa de trabajo Eduvic, les ponen en contacto con la empresa y arranca la relación laboral. Actualmente ya tienen a 2 en plantilla, uno de Malí y otro de Marruecos. 

"Saber que estamos cambiando la vida de esta gente con dificultades y poder darle una vida justa y digna nos llena de ilusión", confiesa Aldomà. 

En sus palabras se trasluce todo lo que está por llegar y, especialmente, por cambiar.