10 tipos de insectos que puedes comer y que además de crujientes son tremendamente nutritivos

¿Estás planificando una dieta más nutritiva para cuidarte mejor o para perder peso? ¿Has añadido insectos a la lista? No, no frunzas tanto el ceño. Si bien es cierto que en España todavía cuesta entender que los insectos se pueden comer, en otras partes del mundo forman parte de platos diarios. ¿El motivo principal de ello? Son más saludables de lo que crees. He aquí una muestra.

1. Grillos

Vistos de cierta forma, son un poco como gambas terrestres. Este tipo de insectos contiene tanta proteína como un filete de cerdo y tienen un alto nivel de nutrientes como el potasio; una bolsa de 100 gramos de grillos fritos equivale a 347 miligramos de potasio (según Eat This). Es solo 11 miligramos menos que 100 gramos de banana, a modo de comparación.

El potasio ayuda a bajar la presión arterial, y eso ayuda a evitar problemas cardiacos. El potasio también es bueno para bajar la hinchazón producida por el sodio de otros alimentos salados. Así que ya sabes, si tienes un apretón de hambre, unos grillos son más saludables que una bolsa de patatas fritas.

2. Hormigas

Las hormigas son un manjar avinagrado debido al ácido que segregan cuando se sienten amenazadas. Un plato consistente en 100 gramos de hormigas equivale a 14 gramos de proteínas y 6 miligramos de hierro; representan el 71% de la dosis diaria de hierro que necesita un hombre para permanecer sano. Además, estos insectos son una genial fuente de calcio.

Las larvas suelen ser las más codiciadas por los sibaritas. No es de extrañar descubrir que es una delicatessen en Asia o en Sudamérica. Las reinas son también muy codiciadas debido a su tamaño en grosos. En Colombia, según apunta Mother Earth News, las hormigas reinas son consideradas un afrodisiaco.

3. Larvas de mosca

Una persona adulta necesita consumir 1000 miligramos de calcio al día. Una buena forma de tomar calcio es comer unos 100 granos de larvas de la mosca soldado; contiene 934 miligramos de calcio. Además, te llevarás una buena dosis de zinc y de hierro mayor que si tomarás salmón o pollo según informaEat This. 

Si te da cosita comer larvas de mosca, siempre puedes probar algunas recetas curiosas como el risotto de larva. Como su nombre indicas, haces un risotto de toda la vida, con su tomatito, su queso parmesano… solo que acompañas el arroz con un poco de larva frita. 

4. Ninfa de cucaracha

¡No! No cierres la ventana del navegador y salgas huyendo todavía. Las cucarachas son un gran enemigo de la humanidad, pero mira el lado bueno: ¡al fin sirven para algo saludable! 100 gramos de ninfa de cucaracha (una ninfa es la fase previa al estado adulto de un insecto) contiene 24 microgramos de vitamina B12. Esta vitamina ayuda a mantener el sistema nervioso y las células sanguíneas a un nivel saludable.

Si no te convenza, piensa en las consecuencias negativas de no tomar suficiente vitamina B12: puedes desarrollar anemia, enfermedades cardiovasculares o su sistema nervioso puede quedar dañado. Así que dales una oportunidad a estas ninfas. Puedes probar a hacer un plato de curri con ellas.

5. Abejas

Antes de nada, ni se te ocurra meter la mano en una flor, coger una abeja y metértela en la boca. Lo que sí que se suele comer de este insecto es su larva, que sabe como a nueces. Es un alimento rico en proteínas que se suele acompañar con arroz o bien se las embadurna de miel, lo cual es muy temático e irónico a la vez.

Además, las larvas de abeja son una buena opción si estás a dieta: 100 gramos de bebé abeja son solo 250 kilocalorías, y además incluyen 16 gramos de proteínas y múltiples vitaminas y minerales, según informa Quora. Se dice que las avispas son igual de nutritivas, pero cualquier se acerca a estos seres malévolos.

6. Larvas del Tenebrio molitor

No, Tenebrio no es el nombre de un villano (pero molaría): es el comúnmente conocido como escarabajo de la harina. Sus larvas son especialmente proteicas: 24 gramos por cada 100 gramos de larva, solo 2 gramos de proteínas menos que un filete de vaca, y 4 gramos más que un plato de salmón.

Si este artículo te convence y apuestas por una consistente dieta de larvas de escarabajo, notarás que tu metabolismo se acelera en pocos días. Tu cuerpo quemará más carbohidratos o grasas. Además, la gente aficionada a este manjar asegura que llena bastante el estómago aunque comas un poco. Más que un villano, Tenebrio es todo un héroe de la nutrición.

7. Chinches hediondas

Quien quiera que puso este mote a la pobre chinche parda no le hizo ningún favor para convertirla en manjar. Si bien es cierto que este tipo de insectos produce un olor un poco "peste" a modo de defensa, esconden demasiados beneficios como para pasarlos por alto.

Según informa el blog de salud On Health, sus ácidos grasos, flavonoides y aminoácidos ayudan a combatir la inflamación. También son ricos en minerales como el hierro, el potasio y el fósforo. Además, pese a su olor saben a canela.

8. Gusanos

Es 99,99% seguro de que si no te comiste un gusano de pequeño, al menos algún amigo tuyo lo hizo. Algo tienen que atrae; puede que porque se parecen a los fideos. 

Aunque no es buena idea comerse un gusano así, a lo loco (básicamente porque están sucios), son un festival de nutrientes. Tienen un nivel alto en proteínas, en hierro y en aminoácidos, una combinación que ayuda a digerir y reparar el tejido del cuerpo. Además, contienen cobre, magnesio y zinc (vía NPR).

9. Termitas

Si la vida te da limones, hazte una limonada; si las paredes de casa te dan termitas, hazte una "termitada". Fríe unas cuantas termitas y por cada 100 gramos que consumas obtendrás el 38% de las proteínas diarias necesarias. A no ser que encuentres ejemplares de la especie venezolana Syntermes aculeosus. Entonces habrías consumido un 64% de las proteínas diarias (segúnLive Science).

Además, según un estudio publicado en ScienceDirect, las termitas aladas que se suelen encontrar en Kenia son una fuente rica en proteínas, zinc y hierro, además de ser una fuente moderada de ácidos grasos n-3. El estudio concluyó que pueden formar parte de dietas proteicas sin ningún problema.

10. Orugas

Al igual que otros insectos de esta lista, la clave alimenticia de una oruga es su larva. En concreto se considera una delicia la larva de las mopane, que acaban evolucionando en mariposas emperador. 

Si te haces unas larvas de orugas fritas y te zampas 100 gramos, habrás consumido 31 miligramos de hierro. En comparación la misma cantidad de carne solo contiene 6 miligramos según informa Live Science. También son una fuente excelente de potasio, sodio, calcio, fósforo, magnesio, manganeso… y pueden durar meses en la nevera.