"Estudia conmigo" en Twitch: mujeres jóvenes, que cursan medicina u opositan, con miles de seguidores e ingresos de hasta 1.500 euros al mes

Ana Blanca es una creadora de contenido con 40.000 seguidores en Twitch.
Ana Blanca es una creadora de contenido con 40.000 seguidores en Twitch.
  • El fenómeno Study with me, estudia conmigo en español, ha crecido mucho en los últimos meses en Twitch, la plataforma de vídeos en directo de moda. 
  • Las streamers estudian en directo en Twitch para miles de espectadores. Cada hora hacen pausas de 15 minutos para charlar con sus seguidores. 
  • La mayoría son mujeres jóvenes, estudiantes de Medicina, pero también hay una gran comunidad de opositores que se apoyan unos a otros. 
  • “Al principio cuando lo pensaba, sí que decía: es un poco turbio ¿no?, pensar que hay alguien ahí desconocido mirándote mientras estudias. Pero, en realidad, la gente te tiene de fondo”, explica una de ellas.
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Son las 5 de la tarde de un día cualquiera entre semana. Una chica con auriculares y sonido de lluvia de fondo estudia en silencio mientras miles de personas la observan en riguroso directo a través de la plataforma de streaming Twitch. 

En la esquina derecha de la pantalla, un cronómetro con una cuenta atrás. En cuanto llega a 0, suena una alarma. La joven estudiante deja lo que está haciendo, conecta el micrófono, mira a la cámara y se dirige a la audiencia: "¿Cómo estáis? Muchas gracias por esa nueva sub, ¿cómo va el estudio?".  

Este es el día a día de Belén, más conocida como @Thewintergallery en Twitch, donde tiene casi 5.000 seguidores. 

Belén, de 21 años, estudia Medicina, actualmente está en quinto curso y lleva un año retransmitiendo sus sesiones de estudio en directo.

Gracias a la plataforma, ha llegado a ganar 250 euros. Con esos ingresos ha comprado un ordenador para mejorar sus streams y un seguidor le hizo una donación para comprarse un micrófono nuevo. 

Sin embargo, la streamer no está en Twitch por el dinero. 

"Lo mejor es la gente, la comunidad que se ha creado. He sumado muchos amigos, incluso de México, de Argentina, de Costa Rica. Estudiamos juntos y compartimos los momentos de descanso para hablar de nuestras cosas", explica. 

Lo que empezó en la pandemia, con las bibliotecas cerradas y todo el mundo metido en casa, como una manera para muchos jóvenes de mantener el contacto y estudiar juntos, se ha convertido en una tendencia en la plataforma de contenidos en directo de moda bajo el nombre Study with me (estudia conmigo en castellano).

Este es el perfil del estudiante en Twitch

Muchas creadoras de contenido —la inmensa mayoría de streamers haciendo Study with me son mujeres— estudian en directo ante miles de personas y siguen el método Pomodoro, que consiste en intercalar sesiones de estudio de una hora con pequeños descansos de 15 minutos. 

Ana Blanca (@anablanchu) es otra streamer. Cursa quinto de Medicina y cuenta con 40.000 seguidores en Twitch, 80.700 en YouTube y 85.000 en TikTok. En alguno de sus mejores meses puede ganar entre 1.000 y 1.500 euros por el contenido en la plataforma.

“A mí nunca me ha gustado ir a la biblioteca, siempre he preferido estudiar en casa. Esto es una manera de hacerlo y, además, de estar acompañada. Y aunque esté estudiando, esto es un trabajo que lleva mucho, mucho tiempo”, comenta. 

Los directos estudiando en Twitch de Ana Blanca, que tras ver a una youtuber estadounidense haciendo este formato decidió replicarlo en España en 2019, son seguidos por miles de personas. La mayoría son estudiantes de bachillerato, universitarios u opositores; todos desconocidos.

"No me siento rara con desconocidos mirándome. Como estoy en casa, estoy muy cómoda. De hecho, hemos llegado a ser hasta 4.000 personas conectadas estudiando en un directo a la vez", comenta.

"Al principio, cuando lo pensaba, sí que decía: es un poco turbio ¿no? Pensar que hay alguien ahí desconocido mirándote mientras estudias. Pero, en realidad, la gente está más a lo suyo y te tiene de fondo", apunta Belén. 

Belén, en su zona de estudio con el micrófono que utiliza para retransmitir por Twitch.
Belén, en su zona de estudio con el micrófono que utiliza para retransmitir por Twitch.

"En los directos hablamos de todo, pero sobre todo de temas de estudio. Cómo van los exámenes, compartimos trucos para organizarnos o dudas que tenga la gente sobre el bachillerato o la carrera", señala Ángela (@AngelaWS), otra creadora de 23 años, que también estudia Medicina. 

Ángela tiene en la plataforma de streaming cerca de 5.600 seguidores y en YouTube, aunque dice haberlo dejado más aparcado, 37.700. Prefiere no hablar de cuánto dinero genera gracias a las plataformas audiovisuales, aunque asegura que "no gano para lujos, pero está bien". 

Todas coinciden en que lo mejor de esta experiencia es la comunidad que se crea. En sus retransmisiones en directo se respira un ambiente sano, comparten consejos, experiencias, se motivan y se ayudan unos a otros, se apoyan con los estudios.

"Recibo muchísimos mensajes diciéndome: 'Angela muchísimas gracias, me has ayudado mucho a motivarme, o he mejorado mis notas últimamente, o he sacado un 9 en el examen que estudié contigo'. Es una forma de influir en la gente pero de manera positiva", comenta. 

Twitch antes que YouTube

Las 3 jóvenes llevan varios meses en Twitch. Aunque tanto Ángela como Ana Blanca comenzaron subiendo vídeos a YouTube, también de temas relacionados con el estudio y la gestión del tiempo, el boom de Twitch hizo que dieran el salto a la plataforma propiedad de Amazon.

“Ahora mismo le veo más posibilidades a Twitch que a YouTube, además al estar en directo te ahorras toda la parte de edición, grabación y producción que llevaba muchísimo tiempo”, asegura Ángela. 

“YouTube y Twitch son cosas diferentes. Twitch es más como algo de andar por casa. Me ahorra mucho tiempo y estudio en compañía. Me quita trabajo y la verdad es que me lo paso muy bien”, comenta Ana Blanca. “El algoritmo de Twitch te da mucha más visibilidad”, añade Belén.

En los últimos meses, han sido muchos los creadores de contenido que han decidido abandonar YouTube y aterrizar en Twitch atraídos por su popularidad y las mejores condiciones económicas que ofrece. 

No solo estudiantes universitarios, también opositores

Además de jóvenes universitarios o estudiantes de instituto, hay toda una comunidad de opositores que también han decidido dar el salto a la plataforma de vídeos en directo y compartir sus sesiones de estudio. 

Lorena (@piradita_study), una joven de 24 años de Barcelona, es psicóloga y actualmente está preparando las oposiciones para Psicólogo Interno Residente (PIR). Empezó en enero en Twitch porque no estaba motivada con la oposición y ahora tiene 5.600 seguidores en la plataforma.

 “La oposición es un camino muy solitario”, asegura. “En Twitch la gente estudia contigo, no con un vídeo tuyo como puede pasar en YouTube. Lo guay es que estamos todos haciendo algo juntos, a la vez, y luego hablamos y compartimos nuestras cosas". 

Lorena comenta que, poco a poco, el perfil de la gente que se une a su comunidad está cambiando. No son solo adolescentes jugando a videojuegos, "cada vez entra gente más mayor; en mi chat hay gente de 30 o 40 años y son uno más". 

Y, como en cualquier trabajo, a veces también siente la presión por cumplir unas expectativas o días en los que se tiene que forzar a ponerse delante de la cámara: "Quien diga que no siente cierta presión, miente. Todos tenemos días malos y claro que existe esa presión. Más cuando hay gente que está pagando por ver tu contenido". 

Todas las creadoras cuestionan por qué, si existen secciones concretas en Twitch como Just chatting o las específicas para videojuegos, no existe una etiqueta para Study with me

Lorena agrega que la plataforma debería empezar a filtrar mejor a ciertos usuarios: "Todavía hay gente que, por el simple hecho de ser chica, entra en mis directos a atacarme o a decirme autenticas burradas". 

"Para la gente que no esté muy acostumbrada a estos de los creadores de contenido, que sepa que no todos somos chicos que nos sentamos 12 horas delante del ordenador a jugar a videojuegos, que también es totalmente válido, o que vivimos en Andorra. Hay otros que nos dedicamos, en cierta manera, a ayudar a los demás", concluye Ana Blanca. 

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