La Unión Europea supera en 2021 los niveles de PIB y empleo anteriores al COVID-19, pero España se queda atrás

La Unión Europea ha logrado salir a flote tras el hundimiento de la crisis del COVID-19, pero España se queda atrás.

Las economías de la zona euro y del conjunto de la UE ya han recuperado la riqueza y el empleo perdidos por la crisis. En el último trimestre de 2021 el PIB medio aumentó un 5,3% y la ocupación superó los niveles registrados en 2019, según los últimos datos de Eurostat.

Este aumento dejaría la riqueza de la eurozona y de la UE un 0,2% y un 0,6%, respectivamente, por encima del volumen que tenían a finales de 2019.

En cuanto al número de ocupados, en el cuarto trimestre de 2021 había 210,9 millones de personas trabajando en la UE, de las cuales 161,9 millones correspondían a la zona del euro. Eso significa que, en 2021, hay 0,6 millones de trabajadores más que en 2019 en la eurozona, y 1,2 millones más en la UE.

Entre los Veintisiete, el mayor aumento trimestral del PIB se observó en Eslovenia (5,4%), por delante de Malta (2,3%), España y Hungría (ambos con un 2%), mientras que se observaron caídas en Irlanda (-5,4%), Austria (-1,5%), Alemania (-0,3%), Croacia, Letonia y Rumanía (-0,1% en los tres casos).

A pesar del aumento del 2%, España todavía es más pobre hoy que cuando comenzó la crisis del COVID-19, y de hecho diferentes organismos, como la OCDE o el FMI, pronostican que será de las últimas economías avanzadas en recuperar el terreno perdido.

Esto se debe a que España fue la economía europea más castigada por la crisis del COVID-19 (el PIB se desplomó un 10,8% en 2020), por lo que tiene más camino por recorrer que otras economías. En empleo, sin embargo, el mercado laboral sí ha rebasado los niveles precrisis.

¿Por qué España crea más empleo que nunca si la economía se está enfriando?

Pero es que, además, a la hora de recuperar el terreno perdido, a España le está costando más avanzar: la crisis de suministros y el descontrol de la inflación, ahora agravado por la crisis de Ucrania, son palos en la rueda que no permiten que la economía española logre levantar cabeza.