Esto es lo que ven los bebés recién nacidos y los síntomas que indican que debes llevarlo al pediatra

Gran parte de la miríada de preocupaciones que surgen con los bebés recién nacidos suelen resolverse rápidamente. “Mi bebé tiene mucho hipo”: es normal. “Al niño se le cae el pelo”: ningún problema. Y entre las dudas más habituales, siempre está la de: ¿qué ven los recién nacidos?

En Infosalus, con explicaciones del Área Oftalmológica Avanzada del Doctor Vergés, aseguran que los bebés recién nacidos no ven prácticamente nada. 

De hecho, ni siquiera saben cómo usar los ojos, por lo que es habitual que los muevan de un lado a otro o que los crucen. Ergo, también es normal que el bebé se ponga bizco. 

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• Entre el primer y el segundo mes comenzarán a enfocar y a ser capaces de seguir objetos en movimiento. 
• De la segunda a la tercera mensualidad de vida empiezan a distinguir el volumen y algunos colores, como el rojo (siempre según la información de la publicación antedicha). 
• Es a partir de los 3 meses cuando se produce un avance notable, ya que es capaz de percibir detalles más pequeños, por ejemplo, descubre sus manos. 
• De los 4 a los 6 meses, desarrolla mucho más la visión del color y puede reconocer objetos y buscarlos a más distancia. 
• Desde los 6 meses hasta su primer año de vida, la vista de los recién nacidos se termina de desarrollar: ve todos los colores, sigue objetos a mayor velocidad y percibe la profundidad. 

La visión de los bebés: ¿cuándo se debe acudir al pediatra?

En las distintas citas con el pediatra y en el mismo centro hospitalario donde se produzca el nacimiento se le irán realizando al bebé pruebas en la vista que descartarán patologías graves. 

Si el resultado de todas estas revisiones es el correcto, desde el Instituto Oftalmológico Fernández Vera recomiendan llevar al bebé al oftalmólogo a partir de los 3 años. 

Es una edad, explican, en la que resulta fácil conseguir que el bebé colabore para desarrollar todas las pruebas correctamente: “Agudeza visual, graduaciones, estudios de la motilidad ocular...” Este tipo de pruebas, señalan, son importantes para prevenir las causas que provocan la ambiopía, lo que se conoce como ojo vago. 

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En la misma web apuntan a algunos de los síntomas que deben dar la alerta para llevar al bebé al oftalmólogo: 

• Si se sienta muy cerca de la televisión. 
• Si se queja frecuentemente de dolor de cabeza y se frota los ojos con habitualidad. 
• Si se pone muy cerca del papel cuando pinta o escribe. 
• Si entorna los ojos (en el típico gesto de enfocar). 
• Si le cuesta leer o estudiar. 

Además, desde el Área Oftalmológica Avanzada aconsejan consultar con el especialista si el bebé tiene 3 o 4 meses “y no sigue con ambos ojos un objeto, tiene dificultad para mover uno o los 2 ojos en todas las direcciones, los ojos del bebé no se quedan fijos o si los tiene cruzados demasiado tiempo.