Volkswagen, General Motors, Volvo, Jaguar Land Rover: qué empresas han decidido dejar de vender vehículos en Rusia por la guerra en Ucrania, cuáles se lo están pensando

La invasión de Ucrania por parte de Rusia ha provocado una gran cantidad de reacciones. Desde las sanciones que la Unión Europea y Estados Unidos han impuesto al país ruso y a sus grandes fortunas a la decisión del fondo soberano de Noruega, el mayor del mundo con 1,3 billones de dólares bajo gestión, de deshacerse de sus inversiones en Rusia.

Varias empresas del sector automovilístico —que podría verse muy afectado por el conflicto debido a su impacto en el suministro de semiconductores o materias primas clave como el paladio— están comenzando a anunciar medidas contra Rusia, como dejar de distribuir sus vehículos en el país o replantearse su negocio en él debido a las dificultades comerciales y las sanciones.

Una de las primeras ha sido la suecaVolvo Cars, que ha decidido congelar sus ventas en el país. “Volvo Cars no entregará ningún automóvil al mercado ruso hasta nuevo aviso", anunció la compañía, aduciendo "riesgos potenciales asociados con el comercio con Rusia", incluyendo las sanciones europeas y estadounidenses.

Volvo deja de vender coches en Rusia tras la invasión a Ucrania

El fabricante de camiones del mismo nombre, Volvo —que no pertenece a la misma compañía, ya que Volvo Cars es propiedad de la china Geely— también ha anunciado que detenía su producción y ventas en el país debido a los problemas de seguridad y las sanciones.

General Motors es otra de las compañías que ha decidido suspender sus exportaciones con destino a Rusia. "Nuestro pensamiento está con la gente de Ucrania en estos momentos. La pérdida de vidas es una tragedia y nuestra preocupación es la seguridad de las personas en la región", ha señalado la compañía en un comunicado recogido por varios medios.

Uno de los principales fabricantes del sector, la compañía alemana Volkswagen, habría decidido suspender temporalmente la entrega de vehículos a los concesionarios rusos, según informó la agencia rusa RIA y recoge Automotive News. 

El grupo alemán ya se vio afectado la semana pasada por el inicio de la contienda, ya que tuvo que parar la actividad en dos de sus fábricas en Alemania debido a la dependencia de componentes que se fabrican en Ucrania, apunta Reuters.

Varios fabricantes europeos quieren desvincularse de la compañía Kamaz, un fabricante de camiones que suministra vehículos blindados al ejército ruso. Mercedes pretende desprenderse del 15% de la compañía que es de su propiedad, según el diario alemán Handelsblatt, y la Daimler Trucks quiere desvincularse de ella.

Las marcas revisan sus actividades comerciales con Rusia y Toyota investiga si el ciberataque a su proveedor tiene relación con el conflicto

JaguarLand Rover, fabricante de deportivos y todoterrenos propiedad de la marca india Tata Motors también ha confirmado que detenía la entrega de vehículos a Rusia debido a los "desafíos al comercio" por la situación de guerra, según ha informado Reuters.

Este martes se podrían sumar otros fabricantes, ya que el alemán BMWtiene "sus actividades comerciales en Rusia bajo revisión" y se espera que tome una decisión las próximas horas.

Otros grupos se están viendo afectados de forma directa. Además de Volkswagen, la compañía francesa Renaulttiene entre sus filiales a la rusa Avtovaz, que tuvo que frenar su actividad aunque en su caso por un problema de suministro de semiconductores.

Un ciberataque a un proveedor obliga a Toyota a parar todas sus fábricas en Japón, un golpe que le cuesta 10.000 vehículos al día

Incluso Toyota, que sufrió este lunes un ciberataque en uno de sus proveedores principales, podría haberse visto afectada por el conflicto, ya que algunas fuentes no descartan que la vulnerabilidad tenga que ver con el conflicto. Tanto es así que el primer ministro Fumio Kishida ha admitido que su gobierno está investigando si el incidente tiene alguna relación con el conflicto, según su web oficial.

Toyota ha revelado este jueves que detiene la producción en su planta de San Petersburgo y dejará de exportar vehículos a Rusia "debido a las disrupciones en la cadena de suministro", donde cuenta con 168 concesionarios. Además, desde el 24 de febrero suspendió sus actividades en Ucrania, donde tiene 37 puntos de venta.

"Toyota observa los acontecimientos en curso con gran preocupación por la seguridad de la población de Ucrania, y espera un retorno seguro a la paz lo antes posible", señala el fabricante nipón en un comunicado.

También otras marcas de Japón, como Honda o Mazda han decidido dejar de exportar coches, motocicletas y otros productos a Rusia, según la agencia Nikkei. En el caso de Mazda, también dejará de enviar componentes a su fábrica en el país