Cómo ha cambiado la educación y cómo será la educación del futuro, según los expertos reunidos por Samsung y Business Insider España

Marzo de 2020, el mes que estalló en occidente la pandemia de la COVID-19, fue el comienzo de una crisis inédita que afectó a todos los ámbitos de la sociedad. Todo el sistema educativo tuvo que renunciar a la presencialidad y hacer un enorme esfuerzo por adaptar su oferta a los canales digitales.

El momento dejó una intensa huella en los formadores y profesionales de la educación que lo vivieron y, sin duda, aceleró la transición general en la educación.

Pero la tendencia ya estaba ahí. Era un proceso inevitable, y ahora todos los agentes del sistema educativo están aprendiendo a transitarlo y a ver la tecnología como una oportunidad para mejorar la docencia y construir nuevas metodologíasmás flexibles y eficaces.

Reflexionar sobre cómo se está produciendo esta digitalización de la educación, y sobre qué cambios y oportunidades trae consigo, fue el objetivo principal del evento “Digitalización en la Educación.¿Qué tecnologías están revolucionando el sistema educativo?”, organizado por Business Insider España en colaboración con Samsung.

Ana Muñoz, editora de tecnología de Business Insider, fue la encargada de dirigir la mesa redonda, que se celebró el pasado martes 18 de octubre en Talent Garden (Madrid), y reunió a cuatro expertos en diferentes ámbitos de la educación:

• Miguel Ángel Ruiz, responsable de Innovación y Marca de Samsung Electronics Iberia.
• Andrés Carretero, director del Museo Arqueológico Nacional (MAN).
• Ricardo Palomo Zurdo, decano de la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales de la Universidad San Pablo CEU y delegado rector para la transformación digital.
• José Luis Fernández, jefe de servicio de Experimentación Educativa del Instituto Nacional de Tecnologías Educativas y Formación del Profesorado(INTEF), que pertenece al Ministerio de Educación y Formación Profesional

Un nuevo tipo de alumnado que necesita nuevas metodologías

Los ponentes comenzaron sus intervenciones recalcando que el uso cotidiano de la tecnología ha cambiado al alumnado, y es necesario que docentes y centros lo asuman y se adapten.

El principal motor de ese cambio son las redes sociales, que nos han acostumbrado al consumo masivo de contenidos breves. Ahora los alumnos tienen menos capacidad para mantener la atención durante los 45 o 50 minutos que dura una clase.

“Las tecnologías nos permitirán diseñar experiencias para que los alumnos se abstraigan de lo que les rodea y centren la atención”, comentó Ricardo Palomo, que ve una oportunidad para pasar a un aprendizaje más efectivo. “No pueden estar seis horas encadenados a un pupitre, de las cuales solo aprovechamos 40 o 50 minutos, y luego otras cuatro horas en casa estudiando. Debemos utilizar la tecnología para hacer ese aprendizaje más eficiente, certero y claro”

Pasaríamos así a un paradigma de alumno más activo que, gracias a las nuevas experiencias tecnológicas, aprenderá participando y haciendo, más que escuchando. Y, curiosamente, los invitados estuvieron de acuerdo en que la presencialidad será un factor positivo para lograr este objetivo.

“Los entornos presenciales bien organizados y las tecnologías bien aplicadas hacen que el aprendizaje sea exponencial -afirmó Miguel Ángel Ruíz-. Los alumnos pueden experimentar, compartir, diseñar y desarrollar juntos, y eso es mucho más enriquecedor para el alumno y el profesorado cuando se hace en un entorno presencial”.

El docente, pieza clave de la educación digital

Los ponentes también estuvieron de acuerdo en que el docente no solo no pierde importancia en los nuevos modelos educativos tecnológicos, sino que la gana. Ya no es solo un contenedor de conocimiento, sino que ahora también se convierte en un gestor del mismo.

 “El docente genera las experiencias de aprendizaje -afirmó José Luis Fernández-, las implementa, se convierte en mentor, en guía, en alguien que ve como evoluciona el alumno, pone remedio a las situaciones en las que puede haber alguna dificultad y evalúa”.

En esta idea profundizó también Ricardo Palomo: “Si se consiguiese que los profesores fuesen más maestros inspiradores, guías de aprendizaje, sería muy satisfactorio para ellos y los alumnos”.

El Museo Arqueológico Nacional, un ejemplo de adaptación digital

La educación no se desarrolla solo en las aulas. Otro tipo de centros, como los museos, también contribuyen en esta labor. Y, para mostrar cómo la tecnología puede adoptarse de manera exitosa en un museo, tomó la palabra Andrés Carretero.

Carretero explicó el funcionamiento de la aplicación de visita virtual del Museo Arqueológico Nacional, desarrollada en colaboración con Samsung como parte del programa de cultura de su iniciativa Tecnología con Propósito.

La visita a MAN Aula Virtual presenta un cuadro de doble entrada: por un lado, está todo el contenido del Museo; por el otro, el temario de primaria y bachillerato. En función de estas dos variables, el profesor o el alumno pueden desarrollar una visita virtual por el museo, con el contenido apropiado según el curso y tema que quieran estudiar.

Y esta visita, que hacemos virtualmente, puede seguirse luego en el propio Museo mediante el teléfono móvil. Así, los alumnos asisten con un conocimiento previo y sacan mucho más partido a la visita.

Fomentar las vocaciones STEM

El concepto de educación STEM (acrónimo en inglés de Science, Technology, Engineering and Mathematics) también fue debatido por los ponentes, que coincidieron en que es básico para crear tejido empresarial e industrial.

Miguel Ángel Ruiz llamó la atención sobre la brecha que existe entre hombres y mujeres a la hora de optar por carreras STEM. El número de mujeres que eligen este tipo de especializaciones sigue siendo muy inferior, y Ruíz señaló que hace falta atajar el problema desde que las alumnas son muy jóvenes.

En general, Ruíz cree que fomentar las vocaciones STEM es estratégico para que el país tenga un tejido competitivo a nivel mundial. “El futuro es tecnológico, las tecnologías son personas. Hay que tener una fuerte formación y tejido de talento STEM para ser un país que pueda competir en  generación de riqueza y empleo”.

En este sentido, Ruíz señaló que las instituciones y las empresas tecnológicas son conscientes de esta necesidad y trabajan para darle respuesta.

El metaverso puede ser una herramienta educativa útil

También hubo tiempo para comentar el impacto que el metaverso puede tener en la educación. Definido como una experiencia tecnológica más inmersiva, que ya tiene muchas aplicaciones prácticas y que aprovecha, entre otras muchas herramientas, la Realidad Aumentada y la Realidad Virtual, los ponentes estuvieron de acuerdo en que el metaverso tiene muchas posibilidades educativas.

Miguel Ángel Ruíz señaló que, según algunos estudios, las experiencias que los alumnos viven en estos entornos virtuales llegan a recordarse hasta ocho veces más que el aprendizaje tradicional a través de texto escrito.

Se conseguiría así, por lo tanto, abrir la puerta a nuevas formas de aprendizaje, si bien hay que ser prudentes: habrá que medir si estos resultados se mantienen cuando las experiencias en el metaverso sean frecuentes para los alumnos, así como la posible pérdida del desarrollo de pensamiento abstractoque fomenta la lectura.

Mirando hacia las aulas del futuro

El aula como espacio transformado por la tecnología también tuvo hueco en el debate. Fue el momento de resaltar el proyecto Aula del Futurodel Ministerio de Educación y Formación Profesional, impulsado por Samsung. José Luis Fernández explicó que el proyecto pondrá en marcha 20 aulas repartidas por el territorio español dentro del programa de red nacional de aulas del futuro, en las cuales se forma a los docentes en los usos educativos de las nuevas tecnologías de la forma más práctica: los profesores las utilizan y experimentan con ellas. Por el momento están ya abiertas cuatro aulas en Madrid, Valencia, Valladolid y La Rioja.

El objetivo del proyecto Aula del Futuro promueve que los profesores salgan con el conocimiento y la experiencia necesarios para promover cambios metodológicos en su práctica docente gracias al potencial de la tecnología.

La educación digital: un nuevo universo de oportunidades

El evento concluyó con una reflexión de los ponentes sobre la importancia de la transformación digital de la educación, que es un fenómeno irreversible y que se debe aprovechar.

“Hemos dejado atrás un aprendizaje puramente memorístico basado durante cientos de años en textos escritos -comentó Andrés Carretero-. No queda más remedio que adaptar la educación a las nuevas tecnologías y a las nuevas formas de narrar, de comunicar. Y esas tecnologías nos ofrecen posibilidades”.

“Si el futuro es digital, si la educación y nuestros chicos y chicas son el futuro, la educación tiene que ser digital”, concluyó Miguel Ángel Ruíz.