“La próxima estrella mundial de la moda va a ser una niña de 11 años que diseña capas para un avatar”

El año 2022 viene cargado de innovación. Tras dos años de pandemia en los que la tecnología ha jugado un papel fundamental, ahora toca echar la vista hacia el futuro y sentar las bases de lo que será el entorno profesional del mañana.

Las herramientas digitales jugarán un papel central en ese entorno: desde la creación de nuevos tipos de profesionales digitales a la mejora por parte de las empresas de la experiencia del empleado, pasando por funciones con un increíble poder transformador como la realidad virtual o el metaverso, la tecnología será el motor del cambio en el horizonte social y laboral que nos espera en los próximos años.

Uno de los principales beneficios de esta revolución tecnológica es precisamente su carácter democratizador. Para Luis Ureta, Country General Manager de Globant España y uno de los líderes del encuentro 'Hacia 2022: los nuevos desafíos tecnológicos', los beneficios son más que evidentes. “La tecnología hoy empodera a los profesionales para poder evolucionar en sus carreras y es una herramienta que democratiza el poder formarse”, expresó en el encuentro, añadiendo, además, "que será esto lo que inmunice a las organizaciones a los cambios que están por venir".

Gracias a tecnologías como la Inteligencia Artificial, como explicó Ureta, es posible ayudar a los empleados a mejorar, a esbozar su propia hoja de ruta en su carrera profesional y tener más oportunidades dentro del mundo laboral. Su empresa, Globant España, acompaña a organizaciones en esta transformación digital y les muestra cómo sacar el máximo partido posible a este momento de cambio a través de sistemas operativos, metodologías ágiles, etc. 

Esto entronca precisamente con la inercia del trabajo en remoto que hemos tomado en los últimos tiempos, pero especialmente durante la emergencia sanitaria; el teletrabajo ha redefinido la forma que tenemos de concebir nuestro día a día, especialmente en cuestiones de proximidad física y presencialismo. Atrás quedan las rutinas diarias de oficinas de lunes a viernes, que seguirán sustituyéndose, cada vez más, por formas más fluidas de producir. 

En este sentido, nuestro país ofrece unas condiciones muy atractivas para la atracción del talento. En palabras de Ureta, “ciertas capacidades como la conectividad, la infraestructura, la cultura o la calidad de vida, son algo hoy que es muy relevante para las nuevas generaciones” y que se puede encontrar en nuestra geografía. 

La oportunidad de trabajar de forma remota que se ha asentado en los dos últimos años ha permitido que los nómadas digitales hayan fijado su atención en España, un país “líder en servicios financieros y turismo”. Estos movimientos migratorios de profesionales han dado lugar así a “equipos muy diversos”, según Ureta.

Blockchain, facilitando el acceso universal 

El Blockchain es uno de los conceptos más de moda, con “muchísimo potencial” a la hora de reinventar industrias y generar un impacto real.

Sobre esto último, Ureta pone en valor la capacidad de inclusión social que puede tener el Blockchain, sobre todo a la hora de extender el acceso a un nivel mínimo de servicios educativos, financieros o sanitarios. El Blockchain sería capaz de permitir a “mil millones de personas a acceder a una universidad” o ser visibles ante las entidades financieras, con todo lo que esto conlleva en el progreso individual de una persona.

Sin embargo, aún debemos salvar algunos obstáculos. “Paradójicamente, uno de los principales problemas es la identidad, el poder certificar y dar titularidad”, comenta Ureta sobre los posibles puntos de fricción que entraña el uso de esta tecnología. También el impacto medioambiental que conlleva es uno de los riesgos, aunque Ureta se mostró optimista con la aparición de nuevos proyectos que den solución a esta problemática.

La sostenibilidad, siempre en el centro

La tecnología en este campo tiene un valor incalculable, ya que gracias a ella y a la información que nos proporciona, cada vez somos capaces de identificar, analizar y anticipar. Como explicó Ureta, gracias a las herramientas digitales, “un directivo en una compañía puede anticipar cuál va a ser el impacto ambiental, las decisiones y los programas” con los que cuenta su organización e introdujo el tema de los gemelos digitales, una funcionalidad con un potencial extraordinario. “Son plataformas que utilizan muchísima Inteligencia Artificial y con las que se puede proyectar el impacto ambiental que van a tener unas decisiones u otras”, afirmó.

Además, en este sentido, el metaverso, el entorno estrella de nuestros días, puede resultar igual o más beneficiosa que las demás, ya que sus posibilidades son, muchas veces, equiparables a las de la vida real. Su aplicación en el entorno empresarial permite que muchas organizaciones puedan simular y virtualizar sus procesos, de forma que no haga falta llevarlos a cabo en el plano real, con la energía y los desechos que esto conllevaría.

Un ejemplo que nos trajo Ureta es el de los entornos industriales, “donde se hace mucho prototipado y mucho testing de producto”. En estos casos, “el poder hacerlo de una manera virtual, tan precisa, mitiga precisamente una gran parte del desperdicio que puede ocurrir en ese proceso de testing”. 

Conociendo de cerca el metaverso

Desde su irrupción en el ecosistema tecnológico, el metaverso ha dominado la conversación pública y esto, añadido al posicionamiento además de grandes de la digitalización, como Facebook y Microsoft, ha terminado de disparar el hype sobre este universo alternativo.

Aunque aún queda mucho por desarrollar en esta línea, ya existen elementos del metaverso que nos dan una idea de todo el potencial que tiene y de cómo redefinirá ámbitos como la comunicación o la industria del entretenimiento. 

La aplicación de avatares y realidades paralelas en otros sectores, como por ejemplo el de las organizaciones, hará posible que gran parte de la interacción empresarial se haga en este plano virtual. De esta forma, surgirán nuevas profesiones que busquen dar respuesta a las necesidades que vayan apareciendo en el metaverso y nuevas aplicaciones en industrias como el turismo o el deporte.

Así apuntaba Ureta, que veía en el metaverso la oportunidad de generar experiencias que ni siquiera aún existen. “No es alocado pensar que la próxima estrella mundial de la moda va a ser una niña de 11 años que produce capas para un avatar. Eso está sucediendo y detrás de esto, hay una economía creativa de gente que desarrolla tareas, creatividad y contenido y hoy por primera vez tiene en estos espacios tan masivos la oportunidad de comercializarlo” afirmó el experto en tecnología.