El Tribunal Superior de Madrid confirma que los 532 repartidores de Deliveroo son falsos autónomos

• El Tribunal Superior de Justicia de Madrid ha ratificado la condena impuesta a Deliveroo.
• La justicia falló en julio que los repartidores de Deliveroo son en realidad falsos autónomos. 
• Ya el Tribunal Superior de Justicia de Madrid había fallado que repartidores que denunciaron a la española Glovo eran falsos autónomos.
• La Tesorería pide más de 1,2 millones de euros a la empresa en materia de cotizaciones sociales, según eldiario.es.
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El Tribunal Superior de Justicia de Madrid ha confirmado este jueves la condena impuesta a Deliveroo por contar con 532 repartidores falsos autónomos.

La macrocausa arrancó gracias a la actuación de oficio de la Tesorería de la Seguridad Social tras un acta de la Inspección de Trabajo que alertaba sobre la situación de los mensajeros.

Así, la justicia falló en julio a favor de la Seguridad Social y declaró que los repartidores de Deliveroo estaban sujetos a una relación laboral con la empresa, concluyendo que los cientos de repartidores de la compañía son asalariados y no autónomos, como defiende Deliveroo. 

La compañía británica y mensajeros de la asociación afín a Deliveroo Asoriders recurrieron el fallo del Juzgado de lo Social número 19 de Madrid, pero ahora el TSJM da la razón a Inspección.

Ahora, la Tesorería exige a Deliveroo más de 1,2 millones de euros en materia de cotizaciones sociales, según ha publicado eldiario.es, que ha adelantado la decisión, citando a fuentes de Deliveroo.

El sindicato UGT ha destacado la importancia de esta sentencia, al considerarla "la primera de un Tribunal Superior de Justicia sobre un procedimiento de oficio, iniciado por las actas de liquidación de la Inspección de Trabajo contra la relación de falsos autónomos que mantenía y mantiene aún Delivero (Roofoods) con sus repartidores", informa el mismo periódico. 

Ya el Tribunal Superior de Justicia de Madrid había fallado que repartidores que denunciaron a la española Glovo eran falsos autónomos.

Se trata de la mayor sentencia contra una plataforma de entrega de comida a domicilio y se cierra así la mayor pugna por dictaminar si los repartidores de las plataformas de entrega de comida a domicilio son asalariados o autónomos.