¿Es bueno dormir con el móvil cerca? Esto dicen los expertos

Ya es totalmente indiscutible que la mayoría de personas se pasan el día pegadas a sus teléfonos móviles. 

Sin embargo, los científicos apuntan que el hecho de dormir con el dispositivo encendido sobre la mesita de noche puede tener consecuencias nocivas para la salud como alterar la calidad del sueño o el funcionamiento del cerebro, según recoge Saber vivir. 

Diego Redolar, neurocientífico, explica que la exposición a la luz azul que emiten este tipo terminales, entre los que cita los móviles y las tablets, puede provocar que el cerebro se confunda y crea que es de día.

Redolar señala que la retina dispone de un tipo de células especiales que llevan la información sobre la luz a una zona del cerebro que no es la que codifica la información a nivel visual, sino que se envía a una región del hipotálamo que controla el ritmo circadiano.

El neurocientífico apunta que esa luz azulada tiene una frecuencia determinada del espectro visible que es de las que más activan a estas células de la retina.

Esta 'confusión' puede alterar los patrones de sueño y vigilia pero también tener consecuencias a nivel fisiológico, por ejemplo, en la liberación de hormonas como la del crecimiento, que solo se hace de noche. 

Así, para evitar que la luz del móvil sea perjudicial, se debe programar para que, a una hora determinada, se ponga en modo sepia o nocturno, ya que así no afectará tanto a nuestro cuerpo. 

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Otro de los consejos del neurocientífico pasa por silenciar las notificaciones, ya que, si estas suenan, el cerebro se mantendrá en alerta todas las horas de la noche.

Esto puede por terminar alterando los patrones del sueño y provocar microdespertares. Según el neurocientífico, las personas a las que les cuesta conciliar el sueño deben dejar todos sus dispositivos en silencio. 

Respecto a las ondas electromagnéticas, Patricia de Llobet, investigadora del Programa de Radiaciones del Instituto de Salud Global de Barcelona, explica que no existe evidencia científica que demuestre los efectos negativos en la salud derivados de la exposición a dosis tan bajas. 

No obstante, la experta señala que la exposición depende de diversos factores como la distancia de los terminales a nuestro cuerpo y la función que se usa. Así, alejar el teléfono la disminuirá de forma drástica.

Respecto al WiFi, la experta señala que emite una señal muy baja que solo sube para mandar o recibir datos, siendo menor la exposición a esta red todo un día en condiciones normales que a una llamada corta con el móvil en la oreja.