¿Trabajarías 5 años más para cobrar el 100% de tu jubilación si no llegas? Este es el plan del Gobierno

La jubilación es tu tema crucial, el plan de vida definitivo para estar tranquilo los últimos años de vida. Uno de los dilemas es hasta cuándo trabajar versus cuánto cobrarás, sobre todo si no llegas o lo haces justito en cuanto a años cotizados y así optar al 100% de tu jubilación. El Gobierno se plantea un sistema donde todos ganen: cotizar más y llegar a ese 100% trabajando hasta 5 años más. 

Ante el siempre preocupante futuro de las pensiones, con el debate sobre su viabilidad a medio-largo plazo, se siguen planteando posibles soluciones y otras maneras de enfocar la jubilación, como en este caso, ofreciendo la posibilidad de compatibilizar la pensión con el salario por un período extendido tras alcanzar la edad ordinaria de jubilación. 

Este enfoque no solo tiene implicaciones económicas significativas para el trabajador, sino también para la dinámica laboral y la sostenibilidad del sistema de pensiones en general.

La propuesta del Gobierno

La posibilidad de compatibilizar la pensión con el salario tras la edad ordinaria de jubilación es una propuesta del Gobierno que busca ofrecer a los trabajadores una transición más flexible hacia la jubilación. 

A través de esta medida, se busca incentivar la prolongación de la vida laboral, lo que podría ser especialmente atractivo para aquellos que deseen maximizar su pensión, y de paso el Estado sigue obteniendo fondos para la sostenibilidad del sistema

Una propuesta innovadora

La propuesta sobre el Nuevo marco regulador de la compatibilidad de trabajo y pensión, del que se ha hecho eco el diario Expansión tras tener acceso al mismo, plantea que, después de cumplir la edad ordinaria de jubilación, un trabajador pueda hacer su pensión compatible con el salario por un período de cinco años o más. 

Esta medida previamente solo estaba disponible para trabajadores autónomos con empleados a su cargo, permitiéndoles compaginar los ingresos de su negocio con la totalidad de la pensión. La nueva reforma, propuesta por la ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, Elma Saiz, busca extender esta posibilidad a un rango más amplio de trabajadores, fomentando así la actividad laboral prolongada.

Incentivos para prolongar la actividad laboral

La reforma no solo facilita la compatibilidad entre pensión y salario, sino que también mejora los incentivos para aquellos que deciden retrasar su jubilación. Por cada año de retraso, el trabajador recibirá un incremento adicional del 4% en su pensión, además de una prima única que podría ascender hasta 12.300 euros, dependiendo del tiempo cotizado. 

Estos incentivos se suman a la posibilidad de cobrar un porcentaje creciente de la pensión en función de los años de actividad laboral extendida, llegando al 100% tras cinco años de trabajo post-jubilación.

Cambios en la jubilación parcial y el género del trabajador

El Gobierno también ha propuesto endurecer las condiciones para acceder a la jubilación parcial antes de la edad ordinaria de jubilación, en un esfuerzo por evitar abusos del sistema. Además, se contempla revisar el período mínimo de cotización necesario para acceder a esta modalidad de jubilación, prestando especial atención a la brecha de género en el trabajo a tiempo parcial, predominantemente femenino, con el fin de promover una mayor igualdad.

El relevista: una figura clave

Una innovación destacada es la regulación en la contratación del trabajador relevista, quien deberá tener un contrato indefinido a tiempo completo y una base de cotización que alcance al menos el 75% de lo cotizado por el jubilado parcial en sus últimos seis meses de actividad. Esta medida busca garantizar una transición ordenada y sostenible en el mercado laboral, así como la sustentabilidad del sistema de pensiones.

La propuesta del Gobierno representa un cambio significativo en la manera en que se aborda la jubilación en España, ofreciendo más flexibilidad y opciones para los trabajadores al final de su carrera laboral. 

Al mismo tiempo, plantea desafíos en términos de implementación y aceptación por parte de los agentes sociales. El objetivo de promover una vida laboral más larga, tanto para los individuos como para el sistema de pensiones, es claro y apunta hacia una evolución que se antoja necesaria para la sostenibilidad del sistema.