Los trucos definitivos para ahorrar en el uso de la lavadora

Llegan los meses de más gasto energético: usamos la calefacción, gastamos más luz para iluminar la casa, estamos más en ella y usamos mucha más ropa, con lo que hay que lavar más y, por tanto, usar más la lavadora. Pero como en todo electrodoméstico, hay formas de ahorrar bastante e incluso trucos poco conocidos. 

Con la inflación y la constante fluctuación en el precio de la electricidad, el coste de la luz en el mercado eléctrico español, más vale hilar fino a la hora del gasto energético. El impacto en el gasto eléctrico de los hogares es innegable, con lo que hay que replantearse sus hábitos de consumo y ahorrar donde se puede. Es crucial identificar qué electrodomésticos del hogar contribuyen significativamente al aumento de la factura eléctrica, y entre ellos, la lavadora destaca como uno de los principales consumidores de energía, junto con el frigorífico.

El truco infalible que pocos conoces para ahorrar en el uso de tu lavadora

Existe un truco infalible que puede marcar la diferencia tanto en la calidad del lavado como en la factura de la luz: el percarbonato sódico. Es un compuesto químico en polvo granulado de color blanco. La razón de este uso es su capacidad blanqueadora, desinfectante y limpiadora. Como explicación química, decir que a nivel molecular el percarbonato sódico se descompone en peróxido de hidrógeno (un blanqueador natural) y carbonato sódico (un potente limpiador alcalino) al entrar en contacto con el agua.

Además, el percarbonato sódico es excepcional para eliminar manchas difíciles de la ropa. Para su uso en lavadora, solo tienes que añadir una cucharada en el tambor de tu lavadora y así, de paso, revitalizarás los colores, aparte de su natural capacidad para quitar manchas persistentes sin dañar las prendas.

Otros usos

Además de su efectividad en la ropa, el percarbonato sódico puede utilizarse para limpiar otras superficies en el hogar. Solo tienes que mezclar el polvo con agua para crear una solución limpiadora que desinfecte y elimine olores. Es más económico, efectivo y ecológico, ahorrando en productos tóxicos. 

Y por supuesto, el ahorro energético que el percarbonato sódico supone para el uso de tu lavadora. Al ser un potente agente limpiador, permite reducir la cantidad de detergente necesario en cada carga, disminuyendo así el tiempo de enjuague y, por tanto, el consumo eléctrico de la lavadora.

¿Cómo elegir una lavadora eficiente para ahorrar energía?

A pesar de estos trucos, a veces echando cuentas igual la mejor opción de ahorro, sobre todo si tu lavadora es antigua, es comprar una nueva, optando por los modelos más eficientes y que gastan menos en agua y electricidad. En poco tiempo se amortiza ese coste superior de lavadoras más baratas. 

De hecho, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) destaca que el primer paso hacia un ahorro considerable en el consumo de energía se da al seleccionar la lavadora adecuada. Al adquirir este electrodoméstico, es esencial prestar atención a los siguientes aspectos del etiquetado energético:

• Criba marca y modelo: investiga y elige modelos de fabricantes reconocidos por su eficiencia energética.
• Clase de eficiencia energética: está representada por una letra, desde A (muy eficiente) hasta G (poco eficiente), y un código de colores, del rojo (G) al verde (A).
• Consumo de energía estimado: medido en kilovatios hora (kWh) para 100 ciclos en el programa Eco 40-60ºC.
• Capacidad de carga: indicando la cantidad máxima de ropa en kilogramos para el programa Eco 40-60º C.
• Duración del programa: el tiempo estimado para completar el programa Eco 40-60º C.
• Consumo estimado de agua: por ciclo del programa Eco 40-60º C.
• Eficiencia del centrifugado: clasificación de la A a la G.
• Nivel de ruido: medido en decibelios (dB).

Consejos para optimizar el consumo de tu lavadora

• Lava la ropa a una temperatura máxima de 40°C para reducir el consumo energético.
• Aprovecha al máximo cada ciclo de lavado llenando la lavadora con una carga completa de ropa.
• Programa el lavado durante las franjas horarias más económicas para aprovechar tarifas eléctricas más bajas.
• Utiliza la cantidad recomendada por el fabricante de detergente para evitar excesos innecesarios.
• Selecciona el programa de lavado más adecuado para el tipo de suciedad y los tejidos, evitando ciclos innecesariamente largos.