El bonsái es un arte milenario que podría estar desapareciendo: estas son las razones por las que es tan caro

  • El bonsái es el arte de empequeñecer un árbol normal para crear una perfecta representación del mismo en miniatura en una maceta más pequeña.
  • Esta artesanía tuvo origen en la antigua China, y requiere años de entrenamiento y siglos de dedicación,
  • En la Convención Internacional de Bonsáis, uno de ellos llegó a alcanzar un precio de unos 100 millones de yenes, poco menos de un millón de dólares. Muchos de los cuales son considerados piezas completamente invaluables.
  • Hablamos con una maestra de los bonsáis de cuarta generación en pleno centro de Japón para entender qué es lo que hace que esto árboles sean tan caros.

Esta es la transcripción del vídeo. 

El bonsái es un arte que requiere años de entrenamiento y siglos de dedicación. En la convención internacional de bonsáis de 2012, un árbol llegó a estar a la venta por 100 millones de yenes, algo menos de un millón de dólares. Y muchos más de estos árboles son considerados como algo completamente invaluable. Entonces, ¿qué es lo que hace que un bonsái sea tan caro?

El bonsái es el arte de empequeñecer un árbol normal para crear una perfecta representación en miniatura de la naturaleza en una pequeña maceta. Tiene una larga historia: originario de china, la práctica de cresar pequeños árboles y paisajes apareció ya en el siglo V. El crecimiento del árbol está restringido por años de poda, alambrado, replantaciones e injertos, y las plantas necesitan ser cuidadas y a menudo regadas todos los días. Las habilidades necesarias para cultivar estos árboles juegan un papel muy importantes en su valor final.

A menudo se doblan y se retuercen, se colocan rocas alrededor o incluso se colocan con otros árboles para simular un bosque diminutos. Muchas de estas técnicas requieren años para lograr dominarlas, y cualquier error cometido puede resultar en la ruina permanente en la forma o incluso en la muerte de la planta que ha estado creciendo durante siglos. Chiako Yamamoto es una maestra del bonsáis de cuarta generación con sede en el centro de Japón. Ella ha estado creando y vendiendo bonsáis durante los últimos 51 años, y una de las habilidades más difíciles de dominar cuando se cultivan estas plantas es la paciencia.

Leer más: La reforestación puede ser una de las armas más poderosas en la lucha contra el cambio climático, según una reciente investigación 

Chiako Yamamoto: Acaba siendo algo parecido a eso. Y sí, hicieron falta 15 años para crear esto. Este es un árbol muy viejo, y estuve 25 años creándolo a partir de esto. Después de que nazcan las ramas, nada vuelve a cambiar pero el bonsái sigue creciendo. Sigue cambiando por la forma en que le doy amor y lo trato. Por lo tanto, el bonsái es siempre inestable. Doy mi amor a estos árboles tan inestables. Incluso si trasplanto un árbol, necesitaríamos tres años para crea runa nueva raíz y cinco años para cambiarla. Así que, incluso si lo trasplanto este año, ese esfuerzo sólo dará resultados de tres a cinco años más tarde.

El tiempo y la devoción que este proceso requiere es diferente a casi cualquier otra forma de obra de arte. Si bien la obra es casi una forma de escultura, las plantas son seres vivos y siempre reaccionarán a su manera.

Chiako Yamamoto: Después de tres o tal vez cinco años, obtengo respuestas a mis ideas. Continúa cambiando y cinco años después me pregunto por qué evolucionó así, pero las plantas viven y se enfrentan al sol por sí mismas. Lo que resulta en un movimiento diferente al que tenía planeado. Lo miro de nuevo y pienso: “Ah, esto no es bueno”. Y sigue cambiando. No hay respuestas inmediatas, así que necesito vivir una larga vida para ver los resultados.

El tiempo extraordinario que dura este proceso significa que no hay muchos más árboles alrededor. Algunos de los bonsáis más valiosos tienen más de 800 años, por lo que la oferta no va a aumentar pronto.

Chiako Yamamoto: Pero como soy una fabricante de bonsáis de cuarta generación, ahora planto semillas y se las entrego a la gente. Porque se necesitan de dos a tres generaciones para crearlos. Especialmente a nivel nacional, ahora que hay menos empresas, es un problema difícil.

Los bonsáis de hoy se recolectaron en la época Meiji, piezas famosas que tienen entre 30 y 40 años de antigüedad. Pero no hay muchas piezas famosas en formación, así que me pregunto si habrá más. Otros factores pueden contribuir al precio. Los potes de los bonsáis y las herramientas usadas son a menudo hechas a mano y pueden costar miles de dólares. Ciertos tipos de árboles también son más difíciles de cultivar o requieren ciertas técnicas y pueden alcanzar precios más altos. Pero, ante todo, estos árboles son obras de arte valoradas por su belleza y la visión del artista.

Hablando como una fabricante de bonsáis, considerando el tiempo y los ingresos habituales de todos, es muy barato, me refiero a los propio bonsái. Después de todo, sólo hay uno en el mundo. No hay dos idénticos. Lleva décadas. Teniendo en cuenta estos factores, se puede fijar un precio más alto. Pero incluso si tardo décadas en crearlo, tendrá un valor bajo si no es lo suficientemente bueno. Así que, la evaluación del precio de los bonsáis es muy estricta. Sin buenas evaluaciones, nadie los compra, sin importar cuántos años haya tardado.

 

 

Descubre más sobre , autor/a de este artículo.

Conoce cómo trabajamos en Business Insider.