He probado durante una hora las Vision Pro de Apple y me han provocado un efecto wow que llevaba años sin sentir en el mundo de la tecnología

Wow. Eso es lo primero que tengo que decir tras probar las Vision Pro.

El pasado 2 de febrero Apple puso a la venta en Estados Unidos sus gafas de realidad mixta u "ordenador espacial", como las define la compañía. Por 3.499 dólares (unos 3.250 euros) puedes tener en tus manos una de las tecnologías que más ha llamado la atención en los últimos años gracias a las posibilidades que ofrece, eso sí, siempre que residas al otro lado del charco —o te acerques a recogerlas a una de sus tiendas en USA—.

Este dispositivo interesa a Apple (y mucho), ya que es una nueva línea de producto que puede monetizar a largo plazo —y en eso la multinacional es experta—. Según Canalys, se prevé que las ventas de este producto asciendan a las 350.000 unidades en 2024 y que lleguen a los 3,6 millones de unidades vendidas en 2026, una cifra nada baladí.

A pesar de que aún no están disponibles en España (pero lo estarán), he tenido la oportunidad de hacer una primera toma de contacto gracias a Spatial Voyagers, la agencia de creación de contenidos y apps de Spatial Computing.

¿Son tan especiales como se preveían? ¿Les quedan 4 generaciones para triunfar, como aseguran algunos? ¿Te hacen evadirte del exterior, como comentan otros? Te cuento mis primeras impresiones de las Apple Vision Pro tras pasar una hora con ellas:

Lo primero que quiero mostrarte es lo que viene en la caja: 7 detalles que las hacen especiales.

Dentro de la caja vienen 7 accesorios:

• Un paño para ayudarte a limpiar el visor.
• Una segunda carcasa para un mejor ajuste (si lo necesitas).
• Una segunda correa por si buscas un ajuste distinto.
• Una batería externa.
• Un cable USB-C.
• Un adaptador de corriente. 

Además, en el interior de la caja viene una funda especialmente suave para proteger el dispositivo y que no se dañe debido al polvo, las huellas o cualquier otro elemento externo.

Nada más ponértelas de lo primero que te das cuenta es de que son pesadas: sus 600 gramos se notan...

... aunque tiene truco: si usas el agarre que rodea la parte superior de la cabeza no las sientes tanto, según comenta mi compañero Manu de Computer Hoy. Sin embargo, con la cinta que he usado yo (la trasera) sí que he notado su peso.

Es interesante destacar que Apple ha diseñado más de una decena de modelos de rostro para que te resulten cómodas y que no te pase lo que a mí. Las que yo he probado tenían el modelo elegido por el propietario de Spatial Voyagers.

En cuanto enciendes el visor lo primero que hace Apple es ajustarlo a tus ojos para empezar a trabajar. De esa forma, tienes una experiencia totalmente personalizada.

Lo primero que he probado han sido unos vídeos grabados previamente por Spatial Voyagers. Hasta aquí la experiencia es más o menos "normal": los paneles se integran perfectamente con el entorno y se ve a las personas u objetos que tienes alrededor.

A partir de aquí comienza la magia...

... los wows...

... la tecnología computacional.

La experiencia inmersiva.

¿No te lo crees? ¡Mira este vídeo!

¡Qué espectáculo! He probado varias gafas de realidad aumentada, mixta y virtual y ninguna llega a la calidad que las Apple Vision Pro.

Uno de las experiencias que he tenido la oportunidad de probar era la de estar junto a un par de dinosaurios. Ha sido una sensación especial porque podías "tocarlos visualmente" pero sin "sentirlos". Realmente estabas "acariciando aire".

Pero, sin duda, mi favorito ha sido un vídeo de una escaladora en el que yo estaba en el borde de un precipicio. El vértigo que he sentido era real, tan real que tenía un nudo en el estómago.

Otra de las posibilidades que ofrecen las Apple Vision Pro son las de una experiencia inmersiva con vídeos de deportes, como fútbol o baloncesto. Y aquí es donde está el VERDADERO negocio: el mundo del entretenimiento, especialmente el deportivo.

¿Cuánto podría llegar a pagar un usuario por estar dentro de un partido? ¿Y por estar en el mismo escenario de una película que lidera su protagonista favorito? ¿Y por estar cantando al lado de una Madonna virtual? Quizás lo sabremos dentro de poco.

Dejando de lado los futuros imaginarios, he de decir que el onboarding al dispositivo ha sido muy sencillo y que en un par de minutos te haces con el gesto con el que necesitas moverte, una especie de pinza.

Si, por la razón que fuera, no eres capaz de hacer ese gesto, no te preocupes, el visor está preparado para que lo cambies por un sonido concreto.

¿Y la parte mala? Creo que no están hechas para usarlas en exteriores porque si te mueves mucho la imagen no es tan nítida y acabas mareado. Claramente son un dispositivo de interior, para trabajar en casa o para visualizar contenidos en la comodidad de tu salón.

Además, llevar todo el rato un cable a un lado no es especialmente ágil.

Dicho esto, y tras una primera experiencia, estoy deseando que lleguen a España.

¿Valen los 3.499 dólares que cuestan? Yo creo que sí. Sobre todo después de probarlas (y no lo vas a entender hasta que te las pongas). Son una primera versión bastante buena y nítida en la que se nota que Apple ha invertido mucho y está apostando fuerte.