Inditex se enfrenta a una metamorfosis casi obligada: por qué el cierre de tiendas es mucho más que un ahorro de costes en un futuro cada vez más digital

En la imagen, una tienda de Zara.
En la imagen, una tienda de Zara.

Reuters

  • A cierre de enero de 2021, Inditex sumaba 6.829 tiendas. Son 640 establecimientos menos que los 7.649 que tenía un año antes.
  • En los resultados del primer trimestre de 2020, con la pandemia provocando las primeras pérdidas para el gigante textil, el grupo ponía en marcha un plan para absorber 1.200 establecimientos. Sin embargo, este movimiento no era nuevo. En 2016, ya cerró 705 puntos de venta. Dos años después, la cifra superaba los 1.400.
  • El objetivo era recuperar esa venta en tiendas cercanas y, por supuesto, a través del canal online. 
  • Descubre más historias en Business Insider España.

Inditex, pese a ser uno de las mayores firmas de moda del mundo, no ha podido salir indemne del terremoto que ha provocado el COVID-19 y sus resultado anuales así lo han reflejado. El gigante textil ganó 1.106 millones de euros en el ejercicio fiscal de 2020 —concluido el 31 de enero de este año—, lo que supone un 70% menos que un año antes. 

Las ventas retrocedieron un 27,9%, hasta 20.402 millones, lo que le sitúa en el nivel de hace 5 años. Pero este convulso año también se ha saldado con un menor ritmo de aperturas: 111 nuevas tiendas, frente a las 307 de 2019 y hasta un 70% menos frente a 2 años antes.

Al cierre del último ejercicio, Inditex operaba 6.829 tiendas. Son 640 establecimientos menos un año antes (7.469). La superficie de venta se situó en 4.826.566 metros cuadrados, lo que representa un descenso interanual del 5,4%. 

Se atenúa el ritmo incesante de aperturas

Tienda de Zara en Zúrich, Suiza

En 2002, ya como compañía cotizada, Inditex realizó 274 aperturas, hasta alcanzar las 1.558 tiendas en 44 países. Solo un año después, sumaba 364 tiendas y, en 2005, otros 448 establecimientos. 

Incluso en plena crisis financiera, en 2008, el grupo vivió un año de fuerte expansión. Se agregaron 537 nuevas tiendas a la red. En 2012, continuó el ritmo de aperturas (482), e Inditex alcanzaba, por primera vez en su historia, la barrera de las 6.000 tiendas. Una cifra que tocaría máximos en 2018, con 7.490 puntos. Sin embargo, estas cifras están lejos de las actuales.

Luis Lara, director internacional de Inditex durante 5 años, incide en este cambio de tendencia y detalla que el grupo ha pasado de abrir unas 500 tiendas al año —de forma que aumentaba en 1.000 tiendas su parque cada dos ejercicios—  a apenas abrir puntos de venta y replantearse su presencia física con un modelo de integración total entre tiendas y online. 

El plan de absorciones que lleva años fraguándose 

En los resultados del primer trimestre del año, el grupo controlado por Amancio Ortega anunció al mercado su plan de absorber de 1.200 establecimientos a un ritmo de entre 500 o 600 al año. Sin embargo, este movimiento no es nuevo. De hecho, si en 2016 ya había absorbido 705 puntos de menor tamaño, 2 años después, la cifraba se elevaría a 1.401.

Este proceso, explica Lara, profesor en ISEM Fashion Business School, se basa en la analítica de datos, que permite a la empresa saber dónde necesitan ampliar o mejorar su base física. No obstante, en esta última optimización, hay 2 matices que difieren de las operaciones anteriores.

El primero es que siempre que se absorbían tiendas se suplían con nuevas aperturas: en 2018, se abrieron 370 e incorporaron 355. Un año después, continuaba la tendencia, con 307 y 328, respectivamente. Sin embargo, durante 2020 –con el plan ya en marcha–, solo abrieron 111 puntos frente a los 751 absorbidos. 

Inditex quema etapas en la venta online: la estrategia sigilosa con la que ha consolidado el ecommerce antes lo previsto y en plena pandemia

Otro punto a señalar es que, por primera vez, Inditex situaba en el mapa las áreas geográficas en donde se producirían los cierres. La peor parte se la llevaba España, donde se absorberían entre 250 y 300 tiendas. Tanto en Europa—sin contar a España— como en Asia y el resto del mundo se llevarían a cabo entre 340 y 400 absorciones, respectivamente. El área menos afectada sería América, con entre 70 y 100 cierres. 

Ante esto, Isla aseguró que había varios motivos que explicaban por qué había zonas geográficas donde el porcentaje de tiendas absorbidas era mayor. Apuntó a España y a la proliferación de tiendas de los años 80 y 90 como uno de los motivos. Y también señaló la decisión del grupo de centrarse en la venta online de sus cadenas jóvenes en China. 

¿Qué enseña ha perdido más tiendas en solo un año?

En imagen, una tienda de Zara.
En imagen, una tienda de Zara.

Reuters

Todas las tiendas del grupo Inditex han reducido su número de tiendas, pero no todas lo han hecho por igual. Estos son los datos:

Zara. El buque insignia del grupo, que aporta el 69,3% de los ingresos del grupo, ha visto caerel número de sus tiendas —que incluyen a Zara Home y Kids— un 8,1% en tan solo un año, hasta las2.653. Son 233 puntos de venta menos. La superficie comercial se redujo un 4,1%, hasta 3.209.510 metros cuadrados.

Pull&Bear. La firma unisex, que nació en 1991 con la clara de intención de vestir a jóvenes con un estilo desenfadado, sufrió un retroceso interanual del 10%, hasta los 873 establecimientos (97 tiendas menos). La superficie comercial se contrajo un 8,1% y se situó en 394.170 metros cuadrados.

Bershka. La enseña, que se dirige a un publico más joven y provocativo, redujo su red de tiendas un 9,21%, hasta los 1.005 puntos de venta, con un 7,3% menos de superficie comercial —513.139 metros cuadrados—.

Stradivarius. La firma de moda femenina, que tiene fuerte inspiración en diseñadores italianos pero también franceses como Isabel Marant, tiene actualmente 936 tiendas, casi un 7% menos que un año antes. Suma 321.421 metros cuadrados de superficie comercial (-5%). 

Massimo Dutti. La tienda, que en sus orígenes se orientó a la moda masculina, redujo su red comercial en un 10,2%, hasta 677 (77 establecimientos menos). Cerró 2020 con 258.310 metros cuadrados, un 7,1% menos. 

Oysho. La enseña del grupo enfocada a la ropa de baño y lencería tiene actualmente 600 tiendas, un 11,4% menos que en el mismo periodo del ejercicio anterior. Con 115. 581 metros cuadrados, la superficie comercial cae un 9,2%. 

Uterqüe. La marca del grupo que está más especializada en complementos de moda, cuenta con 85 tiendas, un 4,5% menos que hace un año. Suma 14.437 metros cuadrados (-4,7%).

¿Ahorro de costes o giro necesario?

"La rentabilidad media de las tiendas que estamos absorbiendo es de dos dígitos. No están perdiendo dinero ni nada por el estilo", explicaba Isla en la conferencia con analistas tras la presentación de resultados del ejercicio fiscal 2020. No obstante, uno de los criterios para el cierre de las tiendas era que registrasen un valor neto contable bajo: menos de 260.000 euros de media.

Ivan San Félix, analista de Renta 4, no pasa por alto que el plan de optimización permitirá al grupo acceder a una potente fuente de ahorro. Así, el experto apunta a una ventaja en cuanto a alquileres y a los gestión de gastos operativos y de personal, al tiempo que consigue que las ventas no se resientan porque las tiendas eliminadas se trasladan a otras en proximidad o al negocio online. 

Por su parte, Luis Lara explica que el grupo lleva años optimizando su red porque es su “obligación” dentro de su modelo flexible fashion: "Ya no es necesario tener tiendas en cada calle o centro comercial para llegar al cliente final". 

15 datos que no conoces y que muestran la evolución de Inditex en los 5 años previos al COVID

Para Lara, este giro responde a la revolución silenciosa que se ha producido en el mercado y que el grupo gallego ha sabido interpretar mejor que otras empresas. "Hay que leer sus movimientos en este contexto y no como una mera voluntad de reducir gastos", explica.

En esto también coincide Enrique Porta, socio responsable de Consumo y Distribución de KPMG en España, que apunta que el papel de la tienda física —y la estrategia de red que tenían los gigantes textiles antes de la crisis— ha dejado de ser válida y ha forzado un replanteamiento estratégico para adaptarse a los cambios en los hábitos de consumo. 

Canal online y físico: obligados a convivir sin fricciones

Tienda Zara

Inditex

El analista de Renta 4 cree que, seguramente, el grupo textil se ha dado cuenta de que, con un futuro que tiende hacia la venta online, ya no serán necesarias tantas tiendas. Y, considerando los últimos datos, se trata de un punto clave. Mientras las ventas del gigante gallego retrocedían un 27,9% en el año fiscal 2020, el canal online alcanzaba los 6.612 millones de euros, con un crecimiento del 77% a tipo de cambio constante. 

No estamos ante el final de las tiendas físicas, pero sí ante una obligada metamorfosis. Coro Saldaña, consultora digital de moda y retail, explica que, al igual que sucedió con la crisis financiera de 2008, las tiendas han tenido que reinventarse y esta vez con una exigencia mayor por parte del consumidor, que ha descubierto la conveniencia del canal online. 

Ante el complejo contexto económico, incide Porta, las marcas han tenido que potenciar rápidamente la venta online para mantener la actividad comercial y han colocado el canal digital en el centro de su estrategia integrándolo —sin fricciones— con la tienda física.

No obstante, el experto señala que el camino hacia lo digital aún es largo. Y apunta que, pese a que el sector de la sector moda ya era uno de los más maduros, antes de la crisis el canal online presentaba aún un nivel de penetración relativamente bajo: en torno al 10% de media en España. 

Con todo esto presente, Saldaña tiene claro que a la tienda física le queda "mucha guerra por delante". Pero subraya que es necesaria una red comercial que mire al mundo online: "El espacio físico siempre será un punto de encuentro privilegiado con la marca, pero en este proceso de reinvención deberá ofrecer experiencias personalizadas empoderadas por la tecnología". 

Belén Valiente, consultora digital y de ecommerce, va un poco más allá y sugiere que, detrás de este nuevo concepto tiendas –más grandes y más digitales–, está su función como puntos de entrega para pedidos online: "Se necesita más espacio para almacenar paquetes y para atender a ese nuevo consumidor que ya es unicanal más que omnicanal".

La robustez económica de Inditex: la gran ventaja competitiva

Pero, más allá del obligado y necesario salto a lo digital, lo cierto es que el plan de optimización de Inditex está funcionando pese al incierto contexto actual. Luis Lara, director de la consultora Retalent, explica que, si atendemos solo a las transacciones en los puntos de venta físicos, se ve un aumento en la venta por tienda media y en las ventas por metro cuadrado. 

Gráfico Inditex

ISEM Fashion Business School

El experto añade que lo virtuoso del modelo del gigante textil es que ha demostrado que, con la pandemia, en vez de aumentar inventario, los ha disminuido sin perder margen bruto. De hecho, este indicador, que mide la ganancia bruta por artículo vendido, fue del 55,8%, prácticamente idéntico al 55,9% de un año antes. 

Respecto a su comportamiento en bolsa, Iván San Felix indica que la cotización actual del grupo está muy cerca de su precio objetivo –tanto del consenso como en el análisis de Renta 4 está en 29,5 euros–. No obstante, considera que, para que haya una subida a partir de estos niveles, debería despejarse el entorno de incertidumbre actual. Una recuperación se irá reflejando en el ritmo de reaperturas de tiendas, lo que se se traducirá en un mayor nivel de ventas. 

"Siempre digo que hay que tener un cash flow mínimo que cubra una caída en las ventas del 30% de manera que, si esto pasa, no comprometa la existencia de la compañía", destaca Lara. A este respecto,Inditex es un verdadero caso de estudio: sus ventas han caído un 28% pero ha salido airosa de una debacle sin precedentes. 

Un factor significativo que sopla a favor de Inditex es su fuerte posición financiera neta. Su caja neta se situó en 2020 en 7.560 millones de euros y, aunque es inferior a los 8.060 millones del 31 de enero de 2020 —el umbral más alto de su historia—, sigue siendo muy superior a otras compañías. "Solo empresas como Apple, Amazon y Facebook tienen esta capacidad y, en el sector de la moda, únicamente Inditex", añade Lara. 

Esta fortaleza económica, que le concede flexibilidad y capacidad de reacción sin tener que endeudarse, es la artífice de que, aún ganando un 70% menos y reduciendo su red de puntos de venta en los 12 meses más convulsos que se recuerdan, Inditex parta con ventaja para enfrentarse a una revolución del negocio textil que marcará su futuro.  

Descubre más sobre , autor/a de este artículo.

Conoce cómo trabajamos en Business Insider.