Morir en el escenario: los artistas que siguen trabajando y triunfan después de los 80 años

Cada vez vivimos más y con más calidad de vida y eso también lo notan los famosos y artistas, que además como suelen ser reticentes a jubilarse, cada vez se retiran más tarde o bien no lo hacen nunca, trabajando hasta más allá de los 80 e incluso 90 y 100 años. 

Seguro que te vienen a la mente los más célebres, como el propio Morgan Freeman, de la foto en actores, y no digamos directores como Clint Eastwood (93 años), Woody Allen (87 años) o Scorsese (80 años). Pero hay casos como verás más increíbles en longevidad. 

Cuatro grandes del cine que siguen incombustibles

Los cuatro son ya clásicos de la historia del cine, pero tienes la suerte de que aún viven y no solo eso, sino que siguen trabajando incansablemente, aunque el más mayor de todos, Clint Eastwood, ha anunciado que Juror #2, su último rodaje, será eso, el último y definitivo, a sus 93 años. 

También Woody Allen ha podido estrenar en Venecia su última película, Golpe de suerte, y, por tanto, retirarse a sus 87 años. No así ocurre con Scorsese o Ridley Scott, que cumplidos ambos los 80 años, no paran de trabajar, sobre todo Scott, que a sus 85, acaba de rodar nada menos que el gran sueño de Kubrick, una superproducción sobre Napoleón y ya prepara un Gladiator 2. 

Los ejemplos más extremos: al pie del cañón en la centena

Es muy raro en facetas artísticas como la música o la actuación, pero en la dirección de películas sí es más frecuente de lo que puedes creer, y no es porque sea más fácil, al contrario, dirigir un film conllevan jornadas maratonianas, estar pendiente de todo, ser responsable también de todo y tener que lidiar con todo tipo de problemas, algo que parecería incompatible con una persona de 100 años.

Pues hay dos casos de directores que rodaron con 100 o más años. Fue Leni Riefenstahl, que en 2022 estrenó cuando era ya centenaria, y Manoel de Oliveira, estrenando en 2014 The Old Man of Belem, con 104 años. Pero ha habido muchos directores rodando con 90 o más años: Alejandro Jodorowsky, Mario Monicelli, Alain Resnais, Kaneto Shindo y Clint Eastwood.

El caso de los actores

Siempre hay quejas de que no hay papeles para sobre todo mujeres maduras, pero hay excepciones, como el de Judi Dench, que no para de rodar con 88 años, o Carol Burnett (89). En hombres es más frecuente, como el mencionado Morgan Freeman u otros tótems de la interpretación, como Anthony Hopkins (85 años), Harrison Ford (81) y George Takei (85). 

En el caso de los españoles, aún siguen en activo grades estrellas de nuestro cine y teatro, como José Sacristán (83 años) o Lola Herrera (86). Además, tanto ellos como ellas, extranjeros como españoles, cada vez están más presentes en series en streaming. 

Músicos que quieren morir en el escenario

En la música también hay ejemplos de gran longevidad, a pesar de lo duro de las grabaciones y sobre todo giras y conciertos. Pues artistas mundialmente reconocidos como Paul McCartney siguen subidos al escenario más allá de los 80, aunque hay casos más increíbles como el de Charles Aznavour, que en 2014, celebrando su 90 cumpleaños, lo hizo con una gira mundial. 

Lo mismo ocurre con otro ex Beatle, Ringo Star, que sigue en la música con más de 83 años, o la cantante seis veces ganadora de un Grammy, Dionne Warwick, que a sus 82 años no para de trabajar, lo mismo que Willie Nelson, que seguro que te suena por su dueto con Julio Iglesias en los 80. Ahora tiene 89 años y ahí sigue. 

Otros artistas incombustibles

Pero no solo en la música o el cine hay artistas que no paran ni quieren hacerlo, seguramente hasta que puedan. Es el caso del pintor Antonio López (85 años), que hace dos años pudiste verle en la Puerta del Sol pintando un cuadro de la emblemática plaza.

En literatura podemos pensar que es más "fácil". Escritores como Vargas Llosa (85 años) o Margaret Atwood (81) siguen publicando novelas y todo tipo de textos.