El sistema de salud pública español protege a los ciudadanos ante dificultades financieras mejor que otros países, según la OMS

Varias personas atienden a un paciente de COVID en el Hospital Isabel Zendal de Madrid (Reuters)
Varias personas atienden a un paciente de COVID en el Hospital Isabel Zendal de Madrid (Reuters)

Reuters

  • La Organización Mundial de la Salud ha publicado un informe sobre la protección financiera que ofrecen los sistemas de salud pública a sus ciudadanos.
  • El sistema sanitario español ha logrado blindar a los ciudadanos ante grandes gastos en atención médica o prescripción de medicamentos.
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El sistema público de salud en España protege a los ciudadanos ante posibles dificultades financieras.

La afirmación, que puede sonar redundante, proviene de la división europea de la Organización Mundial de la Salud, que en su análisis sobre la protección financiera que ofrecen los sistemas de salud de cada país a su ciudadano, ha alabado a España por su fortaleza.

"La sanidad es un derecho fundamental que nunca debería hacer que la gente pierda dinero, y me alegra ver que España lidera el camino en nuestra región", ha asegurado el Dr Hans Henri P. Kluge, director regional europeo de la OMS.

El estudio de la OMS explica que "las personas experimentan dificultades financieras cuando los pagos directos —pagos formales e informales realizados en el momento de utilizar cualquier bien o servicio sanitario— son grandes en relación con la capacidad de pago bruta por atención sanitaria de un hogar".

Pese a conceder que "los pagos directos pueden no ser un problema si son pequeños o si los pagan personas que pueden permitírselo", la OMS alerta sobre el efecto que estos pueden tener sobre "las personas pobres y a las que tienen que pagar tratamientos de larga duración".

Por ello, sostiene el análisis de la OMS "cuando los sistemas sanitarios no ofrecen una protección financiera adecuada, es posible que las personas no dispongan de suficiente dinero para pagar la asistencia sanitaria o para cubrir otras necesidades básicas".

Esta imposibilidad de afrontar los pagos —o falta de protección financiera— podría provocar, por tanto, una reducción del acceso a la atención sanitaria, así como "socavar el estado de salud, profundizar la pobreza y exacerbar las desigualdades sanitarias y socioeconómicas".

De acuerdo al comunicado emitido por la OMS, el diseño protector de la cobertura de salud en España ha propiciado que "tan solo una pequeña cantidad de hogares" sufran dificultades financieras a la hora de usar servicios sanitarios en España.

Más específicamente, la OMS señala que 150.000 hogares (un 0,8%) se han empobrecido tras los pagos directos al sistema sanitario, mientras que 300.000 hogares han experimentado "un gasto sanitario catastrófico".

El análisis concluye que la crisis financiera tuvo un impacto significativo en la capacidad de las personas para pagar por servicios de salud, al verse incrementados sus costes entre 2008 y 2014.

Tanto la crisis económica en España como los recortes introducidos durante ese periodo, matiza el informe, tuvieron un impacto significativo en la capacidad de los ciudadanos para pagar los servicios de salud.

Pese a ello, algunos de los aspectos del sistema de salud destacados por el informe de la OMS como factores relevantes en la protección de los ciudadanos ante cualquier dificultad económica son:

  • Que el acceso al sistema de salud se basa en la residencia del ciudadano.
  • Que los servicios incluidos dentro del sistema público son amplios, con una distribución equitativa de centros a lo largo del país.
  • Que muchos de los servicios de salud ofrecidos son gratuitos, sin existencia de copagos para consultas, diagnósticos o cuidados de pacientes.
  • Que incluso cuando existe el copago, se aplican medidas de protección como pagos reducidos, o un límite de 4,24 euros por producto para muchas prescripciones.

Aun poniendo el foco sobre estas características positivas a la hora de proteger financieramente a los ciudadanos, la OMS también alega que algunos aspectos que puede mejorar el país pasan por: ampliar la cobertura de la atención dental y óptica, reducir los copagos para los hogares con menos ingresos, abordar los tiempos de espera para la atención especializada o eliminar los obstáculos administrativos para los inmigrantes en situación no regularizada.

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