Un conserje del hotel más lujoso del mundo detalla los deseos más disparatados de los huéspedes

Roger Geadah es el conserje jefe del Burj Al Arab Jumeirah, un hotel de lujo de Dubái.
Roger Geadah es el conserje jefe del Burj Al Arab Jumeirah, un hotel de lujo de Dubái.

Cortesía de Burj Al Arab Jumeirah

  • El Burj Al Arab Jumeirah es uno de los hoteles de lujo más emblemáticos del mundo, situado en una isla artificial de Dubái.
  • Roger Geadah es el jefe de conserjería del hotel, que organiza experiencias personalizadas para los huéspedes.
  • Algunas peticiones son extravagantemente lujosas, pero Geadah prefiere organizar experiencias más accesibles.

El hotel Burj Al Arab Jumeirah de Dubái es "el más lujoso del mundo", tal y como ha publicado anteriormente Business Insider.

También es quizá el edificio más conocido de Dubái. Desde las postales hasta las publicaciones de Instagram, la imponente y moderna estructura es un elemento reconocible del skyline de la ciudad.

Con forma de vela y situado en su propia isla artificial, esta maravilla arquitectónica de 1.000 millones de dólares (920 millones de euros) es conocida por sus extravagantes y lujosos detalles, desde suites de varios niveles hasta copas cubiertas de destellos de oro de 24 quilates.

También cuenta con ocho restaurantes, menús con estrellas Michelin, un spa galardonado, múltiples piscinas y 198 suites, cada una con vistas al Golfo Pérsico y precios a partir de 1.455 dólares (1.338 euros).

El Burj Al Arab Jumeirah ha ganado innumerables premios desde su apertura en 1999, desde el World's Best Hotels de Travel and Leisure hasta el World's Finest Suites de Elite Traveler, según la web de la compañía.

Y gran parte de esta glamurosa reputación se debe a su extraordinaria hospitalidad. Más allá de las comodidades, el hotel mima a sus huéspedes con un servicio de alta gama en el que no se pasa por alto ningún detalle.

El secreto de este servicio es Roger Geadah, el jefe de conserjería del hotel.

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Conoce al jefe de conserjes del hotel más lujoso del mundo, que atiende todos los caprichos de los huéspedes

Bridges and palm trees line a canal with the hotel visible in the back center of the image at dusk.
Sylvain Sonnet/Getty Images

Como jefe de conserjería del hotel, el trabajo de Geadah consiste en atender todas las peticiones de los huéspedes, por extravagantes que sean, y a menudo lo son.

Geadah ha trabajado en el sector de la conserjería durante casi 20 años en París y Dubái, antes de incorporarse al Burj Al Arab Jumeirah como jefe hace tres años.

En este puesto, mima a los huéspedes a su llegada para personalizar y adaptar cada estancia con itinerarios a medida diseñados para hacer realidad las experiencias soñadas por los huéspedes, según explica a Business Insider.

Esas peticiones pueden ir desde reservas en restaurantes difíciles de conseguir hasta accesos VIP de todo tipo.

Geadah recuerda a un huésped que hizo el check-in a altas horas de la noche y quería que le entregaran ropa de diseño confeccionada a medida en su habitación a su llegada.

"Fuimos a buscar a deshoras a las tiendas de diseño del Dubai Mall", cuenta. "La mayoría estaban cerradas, pero conseguimos ir a una tienda y entregar la ropa a las dos de la madrugada en el pasillo contiguo a la suite del huésped".

Interior del vestíbulo del hotel en 2014.
Interior del vestíbulo del hotel en 2014.Julia Schmitz/Oneworld Picture/Universal Images Group via Getty Images

Pero sus encargos más extravagantes suelen consistir en coordinar los detalles de acontecimientos vitales importantes, como la planificación de complicadas pedidas de mano.

Una de ellas tuvo lugar en el desierto de Dubái, con un anillo entregado por un halcón en un globo aerostático, mientras que otra envió un dron al cielo para que deletreara "¿Quieres casarte conmigo?" a los invitados que esperaban en un yate de lujo.

Además, también planea experiencias exclusivas solo disponibles en el Burj Al Arab Jumeirah, como una exclusiva y lujosa experiencia de contemplación de las estrellas en el helipuerto del hotel.

Como conserje jefe, Geadah se ocupa de muchas peticiones extravagantes, pero considera que las ofertas menos ostentosas son igual de mágicas

Un callejón del casco antiguo de Dubái.
Un callejón del casco antiguo de Dubái.Laszlo Szirtesi/Getty Images

No todas las recomendaciones de Geadah son tan lujosas. De hecho, prefiere sugerir a los huéspedes que visiten las zonas más accesibles —y menos ostentosas— de la ciudad.

"Mis huéspedes favoritos no conocen la ciudad, vienen con la mente abierta y quieren descubrir Dubái", explica. "Les guío por la ciudad en cuanto a restaurantes, actividades, atracciones o eventos".

Por ejemplo, Geadah comenta que le encanta hacer recorridos gastronómicos por el casco antiguo de Dubái.

"No es la estética de Dubái con la que la gente puede estar familiarizada", afirma, "sin embargo, la experiencia que se vive al descubrir los restaurantes locales es bastante mágica a una escala diferente".

A Geadah le gusta especialmente el ambiente de Deira, un barrio histórico.

"Tiene esa sensación de nostalgia y del Dubái tradicional", empieza explicando, "como cuando Dubái no era más que un modesto pueblo de pescadores en otros tiempos, y los lugareños buscaban perlas para cambiarlas por tejidos de seda en la India".

Desde experiencias lujosas a recorridos sencillos, Geadah afirma que satisfacer estas peticiones es siempre gratificante.

"La sensación de que los recuerdos se quedarán con los huéspedes para siempre es lo que nos hace seguir adelante", afirma. "Nos da ese chute de energía, y no dejamos de preguntarnos qué podríamos hacer mejor o —más loco— la próxima vez".

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