A Twitter se le acumulan las deudas bajo el mando de Elon Musk: la compañía suma 6 demandas por impago

Han pasado 4 meses desde que Elon Musk entrara —retrete en mano— en las oficinas de Twitter por primera vez y tomara el control de la red social. Desde entonces, a la compañía que compró por 44.000 millones de dólares se le acumulan las demandas por impago.

Desde octubre del año pasado, hasta 6 empresas diferentes han demandado a Twitter, de acuerdo con PlainSite, una plataforma que rastrea las deudas de la red social con terceras empresas y que depende de Think Computer Corporation, una compañía de software especializada en mejorar la transparencia del sistema judicial. 

Las deudas de Twitter van desde el arrendador de sus oficinas en San Francisco, hasta una empresa de planificación de eventos. 

De acuerdo con los datos recolectados por Plainsite, la última demanda la ha interpuesto Writer, una compañía con sede en Delaware que exige a la red social el pago de 113.856 dólares (alrededor de 106.000 euros). 

Según la demanda a la que ha tenido acceso Business Insider España, la red social habría incumplido el contrato al no haber pagado a tiempo los servicios prestados de corrección de textos que la plataforma ofrecía a los empleados de Twitter.

Además, de esta demanda, el medio Fortune informó primero de los retrasos en el pago del alquiler las oficinas en San Francisco de Twitter. Esto ha hecho, según el medio estadounidense, que el propietario de los edificios donde tiene la red social su sede no haya podido pagar una serie de préstamos que tenía pendientes.

En la demanda interpuesta el pasado mes de diciembre por Columbia REIT contra Twitter, a la que ha tenido acceso Business Insider España, la empresa propietaria del edificio exige a la compañía tecnológica el pago de 136.260 dólares (alrededor de 128.000 euros), por no haber abonado el alquiler mensual.

Además de estas demandas, Platformer informó en exclusiva que esta semana, los empleados de Twitter se encontraron que no podían conectarse a Slack, la herramienta de trabajo similar a Microsoft Teams, porque supuestamente la compañía había dejado de pagar los servicios de este sistema, propiedad de Salesforce.

Entre las deudas que acumula Twitter se encuentran las ya mencionadas, además de un proveedor de servicios de transporte en jet privado, una empresa de planificación y producción de eventos llamada Blueprint Studios Trends, una firma de consultoría de fusiones y adquisiciones, y otra empresa que brindó servicios de consultoría relacionados con litigios a Twitter y sus abogados antes de que Musk comprara la empresa.

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Todas estas noticias han puesto en duda la salud financiera de la red social. Según varios expertos consultados por la CNBC, el impago a los proveedores sí que pueden ser una señal de alerta, en una compañía con un flujo de caja bajo y que fue adquirida con un pago del 30% emitido en deuda.

Josh T. White, execonomista de la SEC (Comisión de Bolsa y Valores de EEUU), ha asegurado al medio estadounidense que estos impagos pueden deberse a una “estructura de capital incorrecta y agresiva”. "La falta de pago y las violaciones del contrato son sin duda una señal de alerta de que la empresa probablemente esté en dificultades financieras”, ha señalado el experto.

Twitter, bajo el mando de Elon Musk, ha llevado a cabo una importante reestructuración de la empresa a nivel global y está intentando reducir costes a toda costa. Desde que el multimillonario se convirtió en propietario, cerca de 3.000 personas han sido despedidas de la compañía.