Cómo conseguir una hipoteca o préstamo personal aún teniendo mal historial crediticio

Solicitar una hipoteca cuando todo corre a tu favor, véase porque eres un funcionario o llevas 20 años en la misma empresa, no suele más que un mero trámite. Y lo mismo sucede para solicitar un crédito al consumo.

Sin embargo, si no reúnes esas características puede ser un proceso más complejo. Más aún si tienes un historial de crédito bastante negativo. En este sentido, es posible que te puedas preguntar si tienes capacidad de acceder a un préstamo personal o hipotecario en el caso de que tus cuentas no estén especialmente saneadas.

Si tu historial crediticio es débil, no es el fin del mundo. Quizá pudieras reunir los requisitos para algún crédito, pero debes tener presente que será bajo unos requerimientos más estrictos con unos tipos de interés y unas garantías mucho más exigentes.

No obstante, antes de nada, es fundamental que sepas qué es un historial de crédito negativo y cómo te puede afectar.

Puedes seguir leyendo para observar con detalle de qué forma puedes acceder a la financiación si te encuentras en esta situación.

En qué consiste el historial crediticio

El historial de crédito no es más que un informe en el que se recogen los antecedentes que tienes a nivel financiero. Dicho de otra forma, reúne todos los pagados o impactos que has tenido con todas tus deudas. Tanto en el caso de las actuales como en el de las antiguas. Es la hoja de servicio que tienes para con los bancos.

Tener un informe favorable, o lo más saneado posible, es muy importante, ya que es solicitado por las entidades financieras previo a la concesión de un crédito. Es uno de los factores que se tienen en cuenta para ver la capacidad de pago de la que dispones y para analizar la solvencia económica de cara al futuro. 

De igual modo, el historial de crédito refleja tanto las deudas que se tienen en el presente como las que se arrastran previamente. Por ejemplo, si has sido puntual con todos y cada uno de los pagos o si en algún momento no has abordado el pago de alguna cuota o recibo. Todo se refleja en el informe. 

Los bancos y otros prestamistas utilizan estos datos para hacer un estudio de tu nivel de endeudamiento y del perfil de pagador que eres. Así, utilizan toda la información para decidir si te pueden ofrecer financiación o si acarreas un gran riesgo para la entidad bancaria en particular. 

En el caso de que años atrás no hayas pagado correctamente tus deudas a tiempo o si tienes alguna factura pendiente de pago, tendrás más dificultades para que las entidades bancarias te presten dinero. 

Pero, como siempre, hay alguna posibilidad. 

Como puedo recibir financiación si el historial de crédito no es positivo

No existe ningún secreto especial para que te aprueben un préstamo personal o hipotecario. Eso sí, hay algunos conceptos que puedes tener en cuenta para tener la mejor oportunidad posible. 

El primer consejo es que no deberías hacer demasiadas solicitudes de préstamo al mismo tiempo. Es un indicativo negativo que alerte a las entidades de crédito y puede suponer un obstáculo sobre las probabilidades para acceder a la aprobación de un crédito. Tenlo en cuenta a la hora de pedir financiación. 

Otro método que puede resultar interesante es la utilización de una calculadora sobre créditos a título personal. Será una manera de asegurarte que no pides un préstamo para el que no tienes capacidad de pago. Es importante porque, fundamentalmente, los prestamistas, cuando revisan una solicitud, la aprobarán únicamente en el caso de que el usuario pueda afrontar los pagos. 

En último lugar, una alternativa que te puede ayudar es que verifiques la puntuación para conocer tu momento crediticio. Al hacerlo, tendrás la posibilidad de hacerte una idea cuál es la situación en la que te encuentras.

Las posibilidades para obtener un préstamo personal

No obstante, hay algunas posibilidades de créditos personales que puedes tener en el caso de que tu historial de crédito no sea el mejor. 

Entre otros, créditos personales garantizados, que se financian con un tipo de interés fijo y con reembolsos de cantidad concretas en plazos cada mes. Habitualmente, esta fórmula exige garantías diferentes a las de un préstamo personal tradicional. Asimismo, si puedes proporcionar una garantía, como coche u otro activo, el prestamista puede estar más dispuesto a dejar al margen algunos aspectos negativos de tu historial de crédito.

Por otra parte, hay entidades que pueden ofrecer préstamos inmediatos de pequeñas cantidades. Estas están menos enfocadas en tu historial de crédito, pero sí más centradas en tu posición financiera actual y en tu capacidad de pago del crédito. Eso sí, cabe decir que los intereses y comisiones son elevadas.