Cómo la digitalización y la conducción autónoma están transformando la manera de diseñar los coches, según el jefe de diseño de Audi

Álvaro Escobar
Marc Lichte, jefe de diseño de Audi

Audi

  • Marc Lichte, jefe de diseño de Audi, afirma en una entrevista con Business Insider España que el punto de partida para diseñar los coches ahora es el interior y la experiencia de los ocupantes mientras viajan.
  • El peso de la tecnología en los vehículos es cada vez mayor. Por eso el objetivo es hacer visible y tangible esa tecnología con el diseño, subraya el directivo. 

“En el pasado diseñábamos primero la piel exterior y después nos fijábamos en si el interior y los pasajeros encajaban bien. La digitalización y, sobre todo, la conducción automatizada, están convirtiendo el interior en el centro de atención”.

Las palabras de Marc Lichte, jefe de diseño de Audi, reflejan cómo la tecnología ha ganado peso en el diseño de los coches, transformando la concepción del sector en unos pocos años. Ahora primero se crea el interior y todo el universo que rodeará a los pasajeros; luego se define qué “carcasa” se le pone a todo eso, como si de un smartphone se tratara.

Ahora el punto de partida es siempre el interior, la esfera de vida y experiencia de los ocupantes mientras viajan. Sus necesidades y deseos determinan el espacio, la arquitectura y las funciones. Al principio de todos los debates, la atención se centra en el interior y su diseño. Solo después diseñamos el paquete, las líneas exteriores y las proporciones que dan forma al coche”, añade el directivo en una entrevista con Business Insider España.

La explicación de Marc Lichte sobre la manera de diseñar los coches guarda relación con la familia Sphere de coches eléctricos de Audi, compuesta por tres prototipos: Audi skysphere, Audi grandsphere y Audi urbansphere, al que se suma ahora un cuarto y último integrante, el Audi activesphere. Cuatro concept cars que muestran la visión del futuro de la movilidad para la firma alemana. 

Según explica el directivo alemán, “Audi pone en el centro de sus diseños el espacio que rodea a los pasajeros”. Es decir, la esfera, de ahí el nombre Sphere. Esa esfera “se convierte en un espacio de experiencia para ellos: el interior”, agrega.

Audi activesphere

Audi

Audi es una de las marcas que más fuerte está apostando por el desarrollo del coche eléctrico, en sintonía con los objetivos de la Unión Europea de reducir las emisiones en los próximos años. Concretamente, un 55% en 2030 y el 100% en 2050

En este sentido, la marca de los cuatro aros anunció el año pasado que todos sus nuevos modelos serán eléctricos a partir de 2026 y, en 2033, será una marca totalmente eléctrica. Actualmente, ya cuenta con cuatro modelos eléctricos: el Audi Q8 e-tron y Q8 Sportback e-tron; el Audi SQ8 e-tron y SQ8 Sportback e-tron; el Audi e-tron GT y RS e-tron GT; y el Audi Q4 e-tron y Q4 Sportback e-tron.

Y las ventas de vehículos a baterías no van mal para la marca de Ingolstadt: según los resultados comerciales presentados a finales de enero, Audi cerró el ejercicio 2022 con 118.196 unidades vendidas en todo el mundo, lo que supone un 44,3% más que en 2021.

El rol de la tecnología en el diseño de un coche

Los coches tienen una carga tecnológica cada vez mayor, hasta el punto de transformar la concepción que se tenía de ellos, entre otras razones, porque han cambiado los gustos del consumidor. 

A muchos conductores ya no les interesan las prestaciones, cuánto tarda en acelerar de 0 a 100 km/h o cómo se comportan las suspensiones. Ahora prefieren tener un cargador inalámbrico para su smartphone o conectarlo a la pantalla para disponer de un universo de aplicaciones. 

Lógicamente, la tecnología también desempeña un rol importante en el diseño de un vehículo. El jefe de diseño de Audi explica la filosofía ‘Audi Design’, que describe como “Inteligencia Estética”, es decir, “la combinación perfecta entre tecnología y diseño progresista”.


“Nuestro lema es ‘Vorsprung durch Technik’ [ventajas gracias a la tecnología]. Por tanto, nuestro objetivo es hacer visible y tangible la tecnología de nuestros coches con nuestro diseño”, señala Lichte.

Para explicarlo, pone como ejemplo la palabra quattro, todo un emblema de la marca, desde la aparición del Audi Quattro a principios de los años 80: “La palabra italiana para el número ‘cuatro’ se eligió originalmente para describir el sistema de tracción a las cuatro ruedas de Audi. Después de más de 40 años, se ha convertido en una filosofía que ahora puede expresarse en la siguiente fórmula: Audi es quattro y quattro es Audi”.

“Esta herencia está profundamente arraigada en el ADN de Audi, pero también es tan atemporal que podemos reinventarla constantemente con nuestro diseño sin diluir su verdadera esencia”, explica. “Hoy, el Audi RS e-tron GT totalmente eléctrico, con su arquitectura quattro, forma aquí un puente con la historia de Audi”, concluye Lichte.

La conducción autónoma lo cambia todo

La familia Sphere de prototipos de Audi se ha convertido en el laboratorio de la marca para investigar cómo será la siguiente fase de la historia de la movilidad: la conducción autónoma. "Nos hacemos preguntas como 'qué puedo hacer con el tiempo que ya no necesito para conducir el coche", explica Lichte, que subraya que en esta nueva fase ahora en el interior del vehículo podrás trabajar, relajarte o divertirte.

"Me gusta compararlo con mi afición a la vela. Un barco crea la conexión entre el ser humano y la naturaleza. Cuando estoy en el agua, estoy completamente conmigo mismo. Por muy bonito que sea mi destino, la atención se centra en el camino", subraya el jefe de diseño de Audi.

Interior audi activesphere concept

Audi

"La conducción autónoma es clave porque con ella el conductor se concentra mucho más en el viaje, que es lo que se puede ver en nuestro Audi activesphere. Por ejemplo, puedes disfrutar de un paisaje invernal y relajarte con la familia". 

Estos prototipos de Audi se han concebido para una conducción autónoma de nivel 4, lo que quiere decir que el conductor ya puede delegar toda la responsabilidad en el coche, sin tener que intervenir en demasiadas ocasiones. Así, el volante o los pedales pueden quedar ocultos, transformando el interior del vehículo para que todos los pasajeros puedan disfrutar del paisaje con una vista panorámica o entretenerse con todas las opciones que ofrece un vehículo conectado.

"Esta forma de viajar se transforma en auténtico tiempo de calidad: cuando se está tan relajado en la carretera, llegar es aún más agradable", sentencia Lichte.

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