Un científico de Oxford advierte que difundir la ubicación de la Tierra podría provocar una invasión alienígena

La NASA sigue intentando hallar vida extraterrestre. En sus intentos por ello, ha decidido transmitir la ubicación de la Tierra al espacio exterior, pero no a todos los científicos les ha gustado la idea. Anders Sandberg, investigador del Future of Humanity Institute de Oxford, cree que es un error compartir semejante información ya que podría provocar un ataque alienígena.

Algunos investigadores de la propia NASA han respaldado las intenciones de la agencia por transmitir el mensaje. Ya en 1974 transmitieron un mensaje con el mismo propósito.

Los avances tecnológicos hacen posible enviar una cantidad mayor de información al espacio. Es por ello que el nuevo mensaje incluirá conceptos matemáticos y físicos para establecer un medio de comunicación universal, así como información sobre al composición bioquímica de la vida en el planeta.

Sandberg, que ha hablado con el medio The Telegraph, ha dicho que las probabilidades de que el mensaje llegue a una civilización alienígena son escasas, pero el impacto que podría tener sería tan alto que no debe tomarse a la ligera.

Los intentos de buscar vida fuera de la Tierra están rodeados por un "factor de risa" que resta importancia al asunto. Esta realidad lleva a que "muchas personas simplemente se nieguen a tomar en serio cualquier cosa relacionada con ello", ha comentado.

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El investigador ha sugerido que este debate se lleve a la opinión pública ya que es un tema sobre el que la gente debería hablar primero. Las desventajas desencadenadas por esta misión podrían llegar a ser mayores que las ventajas si los temores de Sandberg se cumplieran.

"La principal cuestión es la proporción de civilizaciones pacíficas frente a civilizaciones hostiles", ha explicado. "Tenemos muy poca información sobre si este número es alto o bajo, y tampoco hay consenso científico".

No es la primera vez que un científico advierte de los riesgos que puede traer para la Tierra enviar un mensaje al espacio con semejante información. Stephen Hawking, reconocido físico que falleció en 2018, ya había hablado sobre los peligros que pueden traer estos mensajes.

"Solo tenemos que mirarnos a nosotros mismos para ver cómo la vida inteligente podría convertirse en algo que no nos gustaría conocer", dijo Hawking en un documental publicado en 2011 en el que señaló que la interacción de civilizaciones desarrolladas de diferente forma no solía funcionar bien. Al menos para el grupo menos avanzado.