Así es como reduce su impacto ambiental una ciudad de Islandia: Akureyri, un ejemplo de sostenibilidad mundial

Madre jugando con su hija
  • Los habitantes de Akureyri, una ciudad de Islandia, han implantado un sistema de flujo de carbono que les hace ser uno de los lugares más sostenibles del planeta.
  • Utilizan residuos y materiales orgánicos para generar combustible, de modo que no tienen que recurrir a productos artificiales.
  • Descubre más historias en Business Insider España.

Las ciudades son un gran foco de creación de residuos y contaminación. En especial, la mala gestión que se hace de ellos provoca problemas tanto ecológicos como de salud.

Más de la mitad de los gases invernadero proceden, por tanto, de las ciudades. Los gobiernos y las poblaciones se han visto obligados a tomar medidas para acabar con la gran crisis climática en la que nos encontramos actualmente.

Claro que, los núcleos urbanos, además de ser uno de los responsables por su envergadura, también son los que más recursos poseen para poder frenar el cambio climático.

Akureyri es una ciudad situada en el litoral de la región de Norðurland Eystra en Islandia de la que se pueden obtener una serie de ideas que nos inspiren a cambiar nuestra forma de cuidar el planeta, según explica Henner Busch en Phys.

Cuenta con una población de 18.000 personas y un sistema educativo que invita a la innovación y a las sugerencias para crear un mundo mejor gracias a su universidad.

Islandia es conocida por sus bajas emisiones procedentes de hogares, sin embargo, en cuanto al transporte y el consumo se refiere, cuenta con proyecciones residuales bastante altas respecto a lo anterior.

Hace una década, la localidad de Akureyri, decidió cambiar sus políticas medioambientales convirtiéndose en uno de los lugares más sostenibles del planeta y siendo todo un ejemplo para el resto del mundo.

Leer más: Los incendios en el Amazonas podrían ser parte de un escenario apocalíptico en el que la selva lanza carbono a la atmósfera acelerando el cambio climático

Un sistema de flujo de carbono

Dos figuras de la ciudad, Guðmundur Sigurðarson y Sigurður Friðleifsson, analizaron los materiales que circulaban por esta para ver de qué forma podían servirles e introducirlos en un nuevo sistema sostenible.

Lo que consiguieron de esta manera fue, que en vez de darles un solo uso a materiales residuales, estos se intentaban utilizar para un propósito nuevo.

Para ello, primero debieron analizar todos los componentes residuales que se movían por la ciudad y establecer un uso posterior a cada uno.

Ciudad de Akureyri en Islandia

Materiales como el aceite de cocina usado pueden ser reutilizados

Aunque en algunos países ya se ha implantado un sistema de transporte público eléctrico, mucho más sostenible que el anterior movido por gasolina, en Akureyri han apostado por el aceite de cocina viejo. Sí, el que se usa para freír en casa. Y es que el transporte público en esta ciudad es muy importante y muchos de sus habitantes lo utilizan a diario (en parte también ayuda el hecho de que este servicio sea gratuito, no solo para los residentes sino también para visitantes).

Además, el nuevo sistema de flujos de carbono permite que los desechos orgánicos se composten y los nutrientes se utilicen para la actividad agrícola. De esta manera, no se utilizan productos artificiales que dañen el medio ambiente.

Leer más: Estas 10 startups que trabajan por luchar contra el cambio climático están llamadas a cambiar el mundo con tecnología

Un sistema sostenible que aporta beneficios

Gracias al nuevo sistema, se puede decir que esta localidad ha ayudado a reducir las emisiones de gases que agravan el efecto invernadero. Sus espacios están ahora más cuidados y han llegado a crear un zona verde destinada al ocio de sus habitantes.

Otra de las ventajas más importantes es la reducción del consumo de plástico. Este es uno de los mayores problemas de la crisis medioambiental en la que vivimos ya que somos muy dependientes de este material.

Nuevas empresas, y por lo tanto, nuevos empleos, también han aparecido gracias a este nuevo estilo de vida sostenible mejorando la economía de la zona

El conjunto de todos estos factores han hecho de Akureyri un referente mundial en cuanto a sostenibilidad convirtiéndose en líder medioambiental de Islandia.

Akureyri, un ejemplo mundial

Incluso en ciudades lejanas como esta, sistemas de flujo de carbono son posibles, lo que mejoraría el problema climático global.

Personas simbólicas como en este caso Sigurðarson y Friðleifsson ayudan a que una causa sea mejor extendida y seguida por los demás. La gente tiende a seguir lo que otras personas hacen, por lo que, líderes que muevan a la sociedad y gestionen el cambio son necesarios.

Está claro que con la ayuda de todos, crear un mundo más limpio y cuidado es posible.

Descubre más sobre , autor/a de este artículo.

Conoce cómo trabajamos en Business Insider.