Lavarse la cara en la ducha puede ser perjudicial para tu piel según esta dermatóloga 'youtuber'

Lavarse la cara en la ducha
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  • Lavarse la cara mientras te duchas: es una acción normal para ahorrar tiempo, pero en determinadas circunstancias puede ser perjudicial para tu piel.
  • Las personas con acné, dermatitis, propensas a rojeces... deben evitar las duchas largas y en agua hirviendo. También deben evitar cierto tipo de gel.
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Cuando te duchas, lo normal es que aproveches y te limpies bien la cara. A nivel lógico, no tiene sentido que lo hagas luego en el lavabo. Lo que quizás no has pensado es si lavarte la cara en la ducha puede ser perjudicial para tu piel.

La respuesta corta es "depende". La respuesta larga la amplía la dermatóloga y youtuber Gloria Abad (a través de Rac1). 

En la ducha, debes tener cuidado con la temperatura y la duración de la misma. "Habrá gente a la que no le pasará nada", explica Gloria Abad. "Pero las personas propensas a rojeces en la cara, o que tienen acné o dermatitis seborreica, no deben quedarse mucho rato en la ducha; para ellos, 30-40 minutos en la ducha con el agua hirviendo, como si fuera una sauna, serán nocivos para la piel".

Otra acción perjudicial en la ducha es lavarse la cara con jabón y agua caliente (de nuevo, el factor temperatura): hacer esto puede dañar y resecar la capa protectora de grasa natural de la piel. 

Una piel seca puede desarrollar problemas, como dermatitis (y esta a su vez causa enrojecimiento, agrietamiento e inflamación) o infecciones (las grietas de la piel seca permiten la entrada de bacterias).

El pensamiento aparentemente lógico de aprovechar y lavarse la cara en la ducha tiene un fallo. Y es que en la ducha se tiende a limpiarse el rostro a mayor velocidad que en el lavabo. Por lo tanto, es como si no te hubieras lavado.

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Siguiente duda: ¿es bueno lavarse la cara con el gel para el cuerpo? "Habrá gente a la que no le pasará nada", explica la dermatóloga youtuber. "Hay geles de buena calidad, pero luego hay unos muy fuertes. Si alguien con la piel sensible se aplica un gel potente, resecará aún más su cara".

Si una ducha larga e hirviente, por regla general, puede ser contraproducente para tu piel, lo contrario también se aplica: una ducha breve y con agua caliente, pero no intensa, es lo más recomendable para la mayoría de las personas. Para aquellos de piel sensible o con otros tipos de características, hay que actuar con aún más precaución y vigilar el tipo de gel que se utiliza.

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