El día de tu cumpleaños suele ser el más feliz o uno de los más felices del año, aunque igual estás en el grupo de los que odian cumplir años y más aún celebrarlo. Sin embargo, como se suele decir, alégrate porque si cumples uno más significa que estás vivo. Pero hay un dato que podría darte la razón si no te gusta tu onomástica o que te lo amargará si estabas dispuesto a disfrutar como cada año de tu día señalado. 

La estadística que agua la fiesta de tu cumpleaños

Un estudio realizado por investigadores suizos reveló que tienes un 14% de probabilidades de morir el día de tu cumpleaños que cualquier otro día del año. ¿Quieres saber las razones? Tiene su base científica. De hecho, el estudio es de lo más serio, realizado por científicos reputados y sobre un análisis de datos ingente sobre 2,5 millones de muertes en Suiza entre los años 1969 y 2008. 

Los datos fueron concluyentes, llegando a una conclusión que desde luego no te gustaría que te dijeran justo el día que cumples años, aunque es siniestra cualquier día que te lo expongan. 

Las posibles respuestas y causas 

¿Es casualidad o algo lógico teniendo en cuenta factores como llegar como sea a tu día o bien las circunstancias que rodean al día, donde nos exponemos más a beber y moverse y por tanto tener accidentes? 

Según el profesor David Spiegelhalter, estadístico de la Universidad de Cambridge, la teoría de la espera hasta tu cumpleaños estando mal de salud y que en consecuencia, llegando a esa "meta", digamos que te dejas llevar, no es sólida. 

Para el Dr. Vladeta Ajdacic-Gross de la Universidad de Zúrich, quien dirigió el estudio, simplemente los datos muestran que en los cumpleaños hay un mayor riesgo de muerte por dos causas: accidentes y suicidio, es decir, por las celebraciones en si y por factores psicológicos. 

Los que se niegan a amargarte tu cumpleaños

Pero como en tantos estudios académicos, siempre hay detractores que no ven un patrón ni unas causas concretas, sino algo circunstancial, como defienden muchos en este caso. Es el caso del propio Spiegelhalter, que señala que estos datos "son compatibles con un bache uniforme del 14%" en todas las causas, edades y sexos.

Como buen científico, no solo refuta, sino que ofrece una explicación alternativa y plausible, un argumento perfectamente lógico a tenor de los fallos habituales burocráticos, más aún en tiempos pretéritos: se refiere a la inexactitud de los registros de defunción usados por los investigadores, más aún en un análisis con 2,5 millones de casos, que, por un lado, dan una muestra grande para sacar conclusiones, pero que puede agrandar el margen de error por este tipo de circunstancias, sesgando el resultado y el porqué. 

Lo relativo viendo los números absolutos

Si vamos a los datos absolutos, de los 2,5 millones de muertes analizadas, en solo 900 se observó la misma fecha de nacimiento y de muerte. Eso sí, como se señalaba anteriormente, las fechas del registro son correctas, ya que eran frecuentes errores o variaciones de uno o más días (por ejemplo, cuando se nacía en fin de semana y no se registraba hasta el lunes). Eso sin contar casos donde se ha podido errar también en la fecha de fallecimiento. Puede parecer rebuscado para negar una conclusión tan llamativa, pero con que solo en el 0,04% de los registros ocurriera tal cosa, sería suficiente para caerse el castillo de naipes. 

Aun así, los autores del estudio recuerdan que incluso con los errores administrativos tan plausibles, que podría reducir el porcentaje al 4%, ya es mayor que en el resto de días del año. 

Los economistas siempre hilan fino

La economía no es una ciencia exacta, pero explica muy bien la realidad. Siguiendo con el tema de las fechas de defunción, en 2006 los economistas Joshua Gans y Andrew Leigh publicaron un artículo que examinaban el efecto de un cambio de ley fiscal en Australia sobre las tasas de mortalidad. Las conclusiones fueron muy curiosas.

El gobierno australiano abolió los impuestos sobre patrimonio en 1978, un tema tan en boga en España, ya que es uno de los pocos países del mundo que aún lo tienen, al margen de la potestad de las Comunidades Autónomas para implementarlo o no. Como la ley indicaba que cualquiera que muriera a partir del 1 de julio de 1979 no pagaría impuestos, muchas muertes se "retrasaron" curiosamente para después de junio de ese año. Hecha la ley, hecha la trampa. 

Famosos que "corroboran" el estudio: murieron el día de su cumpleaños

Seguro que te has hecho la pregunta de famosos que hayan fallecido en la misma fecha de su nacimiento. Pues hay muchos y la mayoría a edades avanzadas y por problemas de salud, nada de accidentes: actrices como Ingrid Bergman o María Félix, el dramaturgo William Shakespeare, el pintor renacentista Rafael Sanzio, el actor Maury Chaykin (recordado por su papel secundario en Bailando con lobos), la defensora de los derechos de las mujeres Betty Friedan, el cantante country Mel Street o el saxofonista y clarinetista de jazz Sidney Bechet. 

Como vemos, estadísticamente no son muchos respecto al total, ya que la lista no es mucho más grande.