4 señales de que eres demasiado crítico en tu relación de pareja y 4 cosas que puedes hacer para evitarlo

Según un estudio reciente, estar en una relación excesivamente controladora puede ser malo para ti y para tu pareja, y no solo en términos de salud mental, sino también física.

Sin embargo, a veces resulta difícil saber si estás siendo demasiado crítico.

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Tal como afirma la doctora Melissa Robinson-Brown, psicóloga de Nueva York para los Servicios de Psicología de Enfoque Renovado, a veces la necesidad de controlar una relación proviene de la falta de control en otras áreas de la vida de una persona.

"Cuando las personas sienten una falta de control en otras áreas de su vida, como tener un jefe muy exigente, luchar con la alimentación y la pérdida de peso o tener malas relaciones con la familia, pueden sentirse más convencidos de su necesidad de controlarlo todo en su relación", explicó Robinson-Brown.

Business Insider habló con ella y con la doctora Nanika Coor, psicóloga y terapeuta para padres de Brooklyn Parent Therapy, sobre los 4 signos de que está siendo demasiado crítico y 4 maneras de abordarlo.

Tu relación implica mucho conflicto

La primera señal de que podrías controlar demasiado tu relación es la cantidad de discusiones que tienes con tu pareja.

La pelea constante sobre lo que cada uno hace mal, cómo de mal lo hace y las dudas generales suelen ser una señal que delata una profunda necesidad de tener el control.

Si bien la crítica a veces puede justificarse, otras veces es un mecanismo de defensa para tapar algo más profundo.

"Ser crítico o controlador puede mantener a los demás a cierta distancia, por lo que puedes protegerte a ti mismo y tus sentimientos", explicó Robinson-Brown a Business Insider.

La retroalimentación que le das a tu pareja siempre es negativa y te cuesta mucho hacerle cumplidos

Si felicitar a tu pareja no te sale de forma natural, es probable que estés siendo demasiado crítico.

"Si tu pareja logra algo en el trabajo, recibe un ascenso, gana un concurso, comparte una victoria personal contigo, y tienes dificultades para alabarlo", planteó Robinson-Brown.

Esto no solo puede ser perjudicial, sino que también puede impedir que proceses traumas pasados y conversaciones negativas.

"Si siempre has sido criticado cuando eras niño, es probable que hayas aprendido una forma de relacionarte con los demás que se basa en enfocarte en los fallos en lugar de en las características positivas o fortalezas. Eres muy crítico contigo mismo, lo que a menudo se traduce en cómo interactúas con el resto", añadió.

Te preocupas o te ofendes cuando tu pareja no hace lo que quieres que haga

Otra señal de que estás controlando demasiado a tu pareja es ser muy consciente y muy crítico sobre cómo sigue tus instrucciones.

"[Una señal de que podrías estar controlando demasiado] es que tiendas a la microgestión de proyectos o tareas, a menudo para sentirte totalmente satisfecho con la forma en que se ha hecho algo", dijo Robinson-Brown.

Si tu pareja decide que quiere hacer algo completamente diferente, puedes tomarlo como un rechazo total.

"Puedes sentirte ofendido o preocupado cuando otros no hacen lo que tú quieres que hagan de la manera en que quieres que lo hagan", explicó Coor a Business Insider.

Ya sea por cómo doblan la ropa o que prefieran comer sushi en lugar de comida tailandesa, si interpretas la preferencia de tu pareja de hacer algo como un rechazo hacia ti, podría ser una señal de que tienes problemas respecto al control.
 

Te resulta difícil confiar en las personas

Según Coor y Robinson-Brown, gran parte de la necesidad que algunas personas sienten de controlarlo todo proviene de su propio pasado y sus trauma.

"El control puede tener que ver con experiencias en la primera infancia donde la parte emocional de los cuidadores adultos no estaba disponible o era inconsistente", apuntó Coor. "Un niño cuyas emociones no estaban en sintonía suficiente mientras crecía a menudo se convierte en un adulto que tiene dificultades para comprender sus propios sentimientos o las motivaciones de los demás".

Si te resulta difícil confiar en tu pareja, o en las personas en general, es importante reflexionar por qué podría ser.

Primero, discúlpate y asume la responsabilidad por el daño que puedes haber causado

Si quieres empezar a ser menos controlador y luchar por tu relación, lo primero que debes hacer es asumir la responsabilidad de tus acciones.

"Si tu relación es importante para ti, discúlpate y asume la responsabilidad por el dolor que han causado tus tendencias de control", aconsejó Coor.

Pídele a tu pareja que te diga si nota que te estás excediendo en algún momento

Escuchar a tu pareja es clave. Pregúntale cuándo se siente más controlada y qué puedes hacer para que se sienta mejor.

"Es importante prestar atención a cualquier comentario que pueda ser demasiado crítico o controlador", comentó Robinson-Brown. "Empieza a hacerlo consciente. Hazle saber a tu pareja estás trabajando en ello".
 

Pídele a tu pareja directamente lo que necesites

A veces, comunicarse de forma pasivo-agresiva en vez de verbalizar claramente nuestras necesidades y luego culpar al otro por no hacer lo que querías puede ser una forma de controlar demasiado.

En cambio, exponer tus necesidades y confiar en que la otra persona trabaje codo con codo contigo si tenéis desavenencias es ir por el buen camino.

"Esforzarse por ser más flexibles y colaborar para encontrar soluciones para todos los problemas que surjan", explicó Coor. 

Pon en práctica la búsqueda de todo lo positivo que hay en tu relación

La hipercrítica a tu pareja suele significar que te criticas a ti mismo. Aprender a ser más amable puede ayudar a aliviar el daño que pudiste haber causado.

"De nuevo, pregúntale a la otra persona o a alguien de tu confianza si pueden ayudarte a comenzar a encontrar aspectos positivos en diferentes situaciones y en ti mismo", recomendó Robinson-Brown.