El sencillo riego automático casero para tus plantas cuando estés fuera y de viaje

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  • Si viajas en breve o con frecuencia y tienes plantas, hay sistemas caseros de autorriego que puedes implementar fácilmente y así no molestar a familiares y amigos. 
  • Tienes varias opciones con las que no necesitas gasto alguno, solo seguir las instrucciones y con ello tendrás un sistema con el que poderte ir tranquilo de viaje sin que tus plantas lo sufran. 
  • Si quieres gastar algo de dinero y asegurarte, tienes sistemas sencillos de programación de riego para que todo esté controlado. 

Tanto si te vas de vacaciones, como de fin de semana, viajes por trabajo, escapadas, etc., si tienes plantas y no quieres o puedes mandar a alguien a tu casa a regarlas, hay un problema, o había, si creas fácilmente un sistema de riego automático casero

Podrás implementarlo fácilmente y así de paso no molestarás a tus familiares o amigos, aparte de despreocuparte de la salud de tus plantas en tu ausencia. Ya no tendrás límite para irte días fuera, sea por necesidad o por ocio. 

Un sistema automático, fácil y con gasto cero

Solo necesitas reciclar un poco, gastar nada y seguir las instrucciones, con lo que ni siquiera hay que añadir imaginación. Un método de goteo eficiente y sin intervención. Te vale igual para plantas de interior que exterior, para tu terraza, jardín o balcón

Para ello toma nota porque te hacen falta: goteros, aspersores, bombas, programadores de riego, tubos, mangueras y electroválvulas, dependiendo del sistema. Puedes incluso habilitar aspersión o microaspersión. 

Sistema de goteo con prenda de ropa

El primero te parecerá propio de McGiver, sencillo y eficaz. Solo tienes que poner una botella o garrafa llena de agua y una punta de una prenda de ropa larga bien mojada en la garrafa, con la otra punta encima de la tierra de una maceta. La clave es el principio de capilaridad.

Otro método es el riego por goteo casero con botella de agua, también sencillo y eficiente. Consiste en colgar una garrafa de agua y en ella haces un agujero en el tapón. Pones un tubito muy pequeño en él y enterrarlo en el agua. Así, tus plantas cogerán esa agua cuando lo necesiten.

Otra opción de riego sin programar

Tienes más opciones en esta modalidad, y como ves todas caseras y sencillas de implementar, sin necesidad de ser ingeniero. Otra es el riego automático subterráneo. 

En este caso también hay que hacer incisiones en el tapón de una garrafa y enterrarla boca abajo para que al agua vaya humedeciendo la tierra. Deben de ser agujeros muy pequeños. Con una garrafa de cinco litros tienes para 10 días de riego.

Aprovecha el baño 

Una idea sencilla y lógica:  llevar tus plantas a la bañera en tu ausencia, no sin antes poner en ella una toalla grande, extendida y con el grifo abierto solo lo suficiente para que gotee un poco, si bien este sistema no te convenza tanto por riesgo a fugas y si te gusta ser previsor y cortar el agua en ausencias prolongadas.

Hay un último sistema artificial y es de goteo mediante materiales en el mercado similares a la gelatina. Debes ponerlos dentro de la maceta y regar mucho la planta, de manera que el material gelatinoso recogerá el agua y la irá expulsando poco a poco. 

Si quieres usar la tecnología e invertir algo de dinero

Sistemas de programación de riego

Lo visto hasta ahora son sistemas caseros sin ningún control: lo dejas y hace que la inercia actúe. Pero si quieres algo más sofisticado debes de programar los riegos. Esto es algo más elaborado, pero una vez más no necesitas de conocimientos técnicos avanzados. Con él podrás controlar en remoto el agua que llega a tus plantas. Vale la pena si pasas tiempo de viaje. 

Aquí sí que necesitas de elementos específicos que ha de comprar en tiendas especializadas, concretamente una válvula solenoide o electroválvula, un programador de riego casero o timer, goteros, microaspersores, difusores, estacas y mangueras de diversas características según cada planta; y por supuesto un temporizador para programar día, hora y minutos.

Cómo instalo el riego automático casero programable

Lo primero es conectar la electroválvula a una línea de agua que estará controlada por el programador. Pones la hora a la que deseas que la electroválvula se abra para dejar pasar el agua e inicie el riego y listo. Así de sencillo. 

En cuanto a los programadores, te vale cualquiera del mercado, uno sencillo y económico, si bien no olvides la cantidad de agua que requiere cada tipo de planta para poder colocar estos elementos de riego.

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