Barclays alerta a los bancos españoles: la crisis del coronavirus recortará sus ingresos a la mitad por la caída de hipotecas y créditos al consumo y pese al filón de los avales para los préstamos a empresas

Los analistas siguen calculando a cuánto ascenderá el impacto económico de la crisis del coronavirus. En el caso de la banca española, Barclays estima que las entidades españolas verán mermados sus ingresos un 48%, de media, en 2020, en gran parte porque prevén una caída de las hipotecas y los créditos al consumo, que no se verán compensados por los créditos a empresas apoyados por las garantías del Gobierno. 

Las previsiones de esta firma de análisis no solo apuntan a una caída de los ingresos este año, sino también a un descenso en 2021 y 2022. Concretamente, apuestan por una reducción media del 51% y el 33%, respectivamente, en esos años. 

"Observamos que el actual escenario económico es inestable y creemos que las perspectivas se mantienen inciertas. Sin embargo, consideramos que se producirá un escenario de recuperación en forma de U, donde el confinamiento durará tres meses, hasta junio, y las economías verán solamente una recuperación gradual de la demanda", señalan. 

La parte de crédito más afectada: consumo e hipotecas

En este contexto, los expertos de Barclays creen que las hipotecas y los créditos al consumo serán los más afectados dentro de los préstamos y frente al segmento de empresas. "Creemos que la demanda de préstamos de empresas y pymes se mantendrá alta no sólo por la complicada situación, sino también por las preocupaciones de un posible cierre de los mercados crediticios para firmas medianas y grandes", apuntan. 

Dentro de este último segmento, consideran que los bancos utilizarán de forma activa el sistema de garantías —los avales del ICO— que ha puesto en marcha el Gobierno. 

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Las previsiones apuntan a que la actividad se recuperará gradualmente a finales de año. De esta forma, el crédito podrían caer entre un 3% y un 4% en 2020, volviendo a subir en 2021, cuando prevén un aumento de entre el 0,5% y el 1,5%. En 2022, el alza será de en torno al 1%. 

En el caso de las hipotecas, asumen una paralización de las escrituras durante 3 meses y que la actividad se retomen de forma gradual. 

Respecto a la situación de los bancos para afrontar esta crisis, consideran que están mejor capitalizados que en anteriores crisis: "El mayor riesgo para nuestra tesis es la duración de la crisis y el impacto en la calidad de los activos". Aunque, consideran, los bancos tienen ingresos resilientes en un contexto de medidas de apoyo del Banco Central Europeo, a las que se suman los programas del Gobierno.

En lo relativo a la calidad de los activos, esperan que haya un aumento de provisiones gradual en 2020 y 2021, pero que mejore en el ejercicio siguiente por las mayores expectativas que había en el segmento de negocios.