¿Qué comida se puede llevar en el equipaje de mano del avión?

Existe una norma para viajar que seguro que tienes más que clara: no se puede llevar en el equipaje de mano líquidos en recipientes de más de 100 mililitros. 

Hasta ahí todo claro ¿Pero qué pasa con la comida? ¿Se puede viajar con comida? Sí, pero hay varias restricciones a tener en cuenta.

Lo primero de todo es saber que lo de los 100 mililitros también aplica a comida que contenga líquidos o salsas, por lo que mucho mejor viajar con sólidos.

Latinoamérica y Europa

A partir de aquí, la cosa varía en función del país. La mayoría de las normativas se basan en el peligro de contagio ante determinadas bacterias o microorganismos, por lo que son más comunes entre diferentes países o continentes.

Por ejemplo, en países de Latinoamérica se prohíbe viajar con fruta fresca y en Estados Unidos no se puede entrar con productos de origen animal. Estos suelen ser los alimentos que generan más problemas a la hora de viajar.

En los países musulmanes se prohíben productos cárnicos del cerdo y en la Unión Europea no se puede entrar con carne que no venga de países miembro, San Marino, Suiza, Noruega, Andorra o Lienchestein.

La excepción

La comida para bebés y niños pequeños es una excepción a la hora de viajar y las aerolíneas deben respetarlas.

Si viajas con un bebé puedes llevar los alimentos que este necesite, sin tener en cuenta la restricción de los líquidos, por ejemplo.

Eso sí, es común que en el control de seguridad tengas que separarlos del resto de equipaje y debes llevar una cantidad acorde a lo que consuma el bebé. Lo mismo ocurre para las dietas especiales.

Recomendaciones

En los aviones está permitido comer, siguiendo estas normas y no pueden prohibírtelo. Por lo general, es más fácil viajar con alimentos secos y envasados, como barritas, galletas o frutos secos. Estos productos rara vez presentan problemas en los controles de seguridad del aeropuerto.

No se suele permitir llevar comida caliente o recién cocinada en la maleta de mano debido a los riesgos asociados con la seguridad y la conservación de los alimentos.

La comida que más problemas suele causar y que debes evitar es la líquida o gelatinosa, alimentos exóticos, carnes y algunas frutas y verduras para determinados países.