Cómo estudiar y aprobar lo antes posible si quieres afrontar una oposición

Tras el verano llega el momento de nuevos proyectos, como comenzar a hacer deporte, aprender un idioma o algo más ambicioso: sacarte una oposición. Para ello necesitas un plan muy específico, sacrificio y llevarlo a rajatabla. 

El objetivo es estudiar lo más posible pero de manera más eficaz y aprobarlas lo antes posible, que luego nunca se sabe si tendrás más oportunidades, sobre todo en la oposición que quieres aprobar.

Aprovecha la enorme oferta española

España es uno de los países con más funcionarios por millón de habitantes, con más de tres millones y aumentando, así que aprovecha. En definitiva, ya sea con 40 años o recién salido del instituto, siempre es momento de ponerte a estudiar y conseguir un trabajo para toda la vida, un lujo con la inseguridad laboral y la precariedad de muchos contratos. 

Eso sí, sacarlas no es fácil. Si te presentas, no vale con probar, no va a sonar la flauta por casualidad, incluso aunque se oferten muchas plazas, pero que esas oposiciones tendrán por contra muchos más candidatos, con lo que igual es menos complicado sacar una con pocos puestos ofertados. 

Lo primero, escoger bien 

Cuanto antes comiences, mejor, con lo que lo primero es saber qué oposición estudiarás y cuándo es la convocatoria, para planificar tu preparación. Si no la conoces, pues seguir el plan con la misma actitud, en espera de la confirmación. La clave es tenerlo claro y poner toda la carne en el asador, sin autoengaños, sabiendo que no valdrán medias tintas ni excusas. 

Ante todo, sé realista. No es lo mismo preparar una plaza para bedel que unas oposiciones a registrador de la propiedad, notario o abogado del Estado. Cada una requiere un mínimo de horas, pero todas una dedicación lo más completa posible. Si la pregunta es el tiempo mínimo de una oposición normal, no hablamos de meses sino de años.

¿Estudio por mi cuenta o en una academia?

Es igual el mayor dilema. Si estudias por tu cuenta, vas a tu ritmo y ahorras un dinero, además de desplazamientos o distracciones; pero si vas a una academia, te exigen un ritmo, te controlan la evolución y puedes practicar con los exámenes que te encontrarás. 

Lo mejor es contar con una academia, que te controle los tiempos, que te lleve, que te examine continuamente, resuelva dudas, y sobre todo que te tenga al tanto de las habituales actualizaciones del temario o cambios. Puede ser clave para conseguir tu plaza. Si tu decisión ya está tomada y tienes claro que lo que quieres es ser funcionario, empieza ya a pedir información.

¿Cuánto tengo que estudiar al día...?

Lo mejor es atender a lo que te dicen por experiencia, quienes ya han conseguido su plaza y lograron con éxito pasar sus oposiciones. La mayoría coincide en que el tiempo medio de estudio al día son unas 8 a 10 horas. A partir de ahí, habrá que organizarse según la situación de cada uno: si trabajas, si tienes familia, si retienes más o menos...

Si los días de diario te es imposible sacar esas horas, todos coinciden en que necesitas sacar un mínimo de cuatro horas al día y recuperar el resto festivos y fines de semana. De todas formas, los que quieren ir a lo seguro y puede dedicarse 100% a las oposiciones, estudian de lunes a domingos, sin descanso. El premio final vale la pena. 

¿... y durante cuánto tiempo en total?

Preparar unas oposiciones requieren un mínimo de entre 12 y 18 meses, con lo que calcula desde la convocatoria hacia atrás cuándo empezar. Es un tiempo óptimo para conocer de sobra el temario, las pruebas y haber podido practicar con antelación. No prepares una oposición cuya convocatoria se para dentro de poco, aunque puedes presentarte al examen en modo prueba. 

Por supuesto es el tiempo medio. Hay personas que necesitan menos tiempo por sus capacidades y otros que será mejor que empleen más. Es mejor siempre ir a lo seguro y que luego no tengas que ir con prisas, porque si, al contrario, te ha sobrado tiempo, es perfecto para repasar y sacar horas para posibles eventualidades o cambios.

Tan importante es el cómo

Lo primero es estudiar sin móvil y con todo lo que necesitas a mano (subrayador, bloc de notas, botella de agua…). Hazte o crea un sistema de estudio y repaso efectivo. Hay muchos que incluyen antes un aprendizaje de técnicas de estudio, lo que te puede ahorrar horas improductivas y aprender más en menos tiempo, sin que además lo olvides.

Realiza con frecuencia no solo pruebas y test, sino simulacros de examen con las mismas condiciones de tiempo, número de preguntas, etc.; y ten claro una hoja de ruta con horarios, objetivos…

Sigue un método

Y mejor, si está comprobado científicamente, nada de experimentos. Hay uno creado por el profesor de la Universidad de Florida, Robert A. que se basa en la premisa de que las matemáticas son simples. 

Por ejemplo, si se tiene una asignatura de tres horas a la semana, se tiene que dedicar al menos 12 horas semanales. En resumidas cuentas, los alumnos aventajados se pasan frente a los apuntes un promedio de 50 a 60 horas de lunes a domingo o, lo que es lo mismo, entre 7 y 8,5 horas de estudio por día, sin contar el tiempo extra para exámenes y trabajos complementarios.