En 2023, el efectivo va a ser el rey para retener a los grandes talentos de Silicon Valley

Las empresas tecnológicas se pasaron el año pasado buscando formas de mantener contentos y tranquilos a sus empleados en medio de los anuncios de despidos y de los recortes en incentivos y otras ventajas que hacían diferente trabajar en Silicon Valley. Ahora, los expertos dicen que esperan que las empresas emitan más acciones e incentivos en efectivo para mantener también intacta su alta dirección. 

Los principales valores tecnológicos prosperaron en 2020 y 2021 gracias al repentino cambio hacia lo digital provocado por la pandemia. Pero la suerte cambió en 2022, con una fuerte caída del valor de las acciones.

Los expertos afirman que en 2023 las tecnológicas buscarán estructurar acuerdos a largo plazo con pagos por permanencia como forma de inducir la lealtad de los altos cargos.

Cinco de los mayores valores tecnológicos, Apple, Microsoft, Alphabet, Amazon y Meta, perdieron un valor agregado de 3,7 billones de dólares en 2022. Un desplome de las acciones no solo perjudica a los accionistas; también perjudica a los empleados que tienen parte de su paquete retributivo remunerado en acciones. Las empresas tecnológicas repartieron acciones suplementarias para apoyar a los empleados cuyas acciones perdieron valor el año pasado, hasta el punto de que algunos inversores mostraron su preocupación ante el posible impacto que pueda tener en la rentabilidad a futuro.

Otras empresas, como Shopify y Netflix, optaron por permitir que los empleados tuvieran un mayor control sobre sus paquetes retributivos, eligiendo cada año qué parte de su salario se paga en efectivo o en acciones.

Deepali Vyas, uno de los principales cazatalentos de Korn Ferry, explica a Business Insider que va a haber una recalibración de la compensación en efectivo de los altos cargos a un nivel que refleje las valoraciones actuales.

"Yo diría que esos niveles bajarán entre un 10 y un 20%", afirma.

Como la Reserva Federal continúa subiendo los tipos para combatir la inflación —igual que el BCE—, se pedirá a los consejos de administración y a los accionistas de las empresas que sean creativos con los paquetes retributivos para satisfacer a unos empleados asustados, incluidos los directivos, que ven cómo se reducen los beneficios del boom tecnológico y cargan con más trabajo debido a los despidos.

Los competidores del sector y de fuera de él están dispuestos a hacerse con el talento de las grandes tecnológicas a un precio más realista, aunque competitivo, añade Vyas.

Dado que éste es el peor momento para perder talento de primer nivel, como un alto cargo que cumple sus objetivos, Vyas espera que las empresas establezcan incentivos a largo plazo, basados en métricas, en los que se pague en efectivo o en acciones dentro de unos años o incluso más tiempo. 

Aalap Shah, gerente de la empresa de asesoría Pearl Meyer, explica que, para saber a quién se le promete un gran sueldo por permanecer en la empresa, ésta tendrá que fijarse en el poder de retención que tiene sobre cada una de las personas a las que quiere retener.

"Si nos fijamos en las participaciones de capital no adquiridas y determinamos cuál es su valor actual, podemos hacernos una idea de cuánto valor conserva el empleado y si se trata de un valor suficientemente significativo", explica Shah a Business Insider.

Para los altos ejecutivos que alcancen ese listón, incluso con un mercado de trabajo tan tentador como el que se abre en los próximos años, al menos en Estados Unidos, podría ser más rentable quedarse en su actual compañía.