Cuándo llegará el 6G y por qué es tan importante para la revolución de la IA

Cuando aún estamos en pleno establecimiento de la red 5G, como lo ha estado el 4G en los últimos años, cada vez se van quemando etapas más rápido, ya que se va a solapar con el 6G, donde países como China ya están poniendo todo el foco. Si el 5G era necesario para dotar de velocidad y capacidad al internet de las cosas, la domótica y el creciente volumen de datos, la revolución de la inteligencia artificial (IA) hace que se necesite ya la siguiente evolución. 

En la vanguardia de la revolución de las comunicaciones inalámbricas, el desarrollo del 6G se perfila como un avance monumental que transformará la forma en que compartimos información. Aunque la implantación del 5G aún está fresca y las redes 4G y 3G persisten en algunos lugares, las miradas ya se centran en el futuro. Para que estimes el grado de rapidez con lo que avanza todo, el 6G estaba inicialmente programado para 2030, pero habrá que adelantarlo para 2026. 

Velocidad y latencia revolucionarias y vitales para la que se avecina

Todo va a estar pronto conectado, desde tu lavadora hasta incluso una prenda, por no hablar del tsunami que está suponiendo la inteligencia artificial. Sin el 6G no habrá suficiente capacidad y velocidad para soportar la ingente cantidad de datos. El propósito fundamental del 6G es elevar la velocidad de transmisión de datos a niveles impresionantes, multiplicando por diez la velocidad actual. 

La latencia, ese breve lapso en que se transmiten los paquetes de información a través de la red, se reducirá a asombrosos 0,1 milisegundos, prácticamente en tiempo real. Keysight Technologies, líder en equipamiento de herramientas de medida, y gigantes como LG, Huawei, Nokia y Samsung, destacan en el panorama de investigación y desarrollo para hacer realidad estas proyecciones.

5G+ y la carrera tecnológica europea

En medio de esta competencia global, las grandes empresas de telecomunicaciones europeas, incluyendo a Telefónica, Deutsche Telekom, Vodafone, Telecom Italia y Orange, han solicitado a la Unión Europea la implementación de redes Open RAN en el continente. Este movimiento estratégico no solo busca liderar en el despliegue del 5G, sino también anticiparse al 6G. Establecer estándares efectivos y seguros para la comunicación entre dispositivos es esencial, y el 6G se propone integrar los mundos digital, físico y humano para superar desafíos previos.

Seguridad y resiliencia en el centro de la evolución

La seguridad, tanto en términos de privacidad como de ciberseguridad, es un punto crítico. Ante el riesgo potencial de una red 6G con datos personales y el aumento del uso de inteligencia artificial, se enfatiza en el desarrollo de medidas como la resiliencia frente a ataques y la protección de la privacidad de los usuarios. 

La inversión en estos aspectos es crucial para garantizar un entorno seguro y confiable, más aún cuando nuestras vidas, si ya estaban rodeadas e influenciadas por la tecnología, ahora estarán totalmente sumergidas. 

Ventajas medioambientales y militares

El 6G no solo promete avances en la conectividad, sino también beneficios medioambientales. Reducir significativamente el consumo energético, superando los logros del 5G, será esencial en un mundo centrado en combatir la crisis climática. Además, el 6G facilitará un aumento notable en el número de conexiones simultáneas, permitiendo la exploración de tecnologías aún inexploradas como réplicas digitales, holografía móvil y experiencias inmersivas de realidad virtual, otra revolución que se ha quedado algo estancada bajo el peso de la IA pero que llegará su momento. 

Competencia global e implicaciones militares

La carrera tecnológica no está exenta de implicaciones militares. China y Estados Unidos ya aplican modelos estratégicos para el uso militar del 6G. Un informe del Instituto Internacional de Estudios Estratégicos señala que China sigue un modelo de mando centralizado, mientras que Estados Unidos confía en niveles inferiores de mando y operadores. 

La tecnología 6G se vislumbra como crucial en programas de armas hipersónicas, según revela Periodismo Internacional Alternativo.

Europa no quiere quedarse atrás en el liderazgo tecnológico

Las empresas europeas de telecomunicaciones instan a la colaboración urgente para implementar redes Open RAN. Subrayan la importancia de una RAN abierta, inteligente y virtualizada para cumplir los objetivos de 5G para todos en 2030. 

Europa busca mantener su competitividad, liderazgo tecnológico y resiliencia, reconociendo que la acción decidida ahora es esencial para evitar quedarse rezagada frente a Norteamérica y Asia en el desarrollo y despliegue de las redes de próxima generación. Sin embargo, otros advierten de que la política europea de restricciones, leyes, prohibiciones y burocracia respecto a las nuevas tecnologías como la IA está haciendo perder el tren del futuro. 

La evolución hacia el 6G representa no solo una revolución en la velocidad y la conectividad, sino también un desafío global que impulsa la colaboración, la seguridad y la sostenibilidad. Europa se encuentra en una encrucijada crucial, donde su acción decidida o la apuesta por la regulación en pos de seguridad y privacidad, determinará su posición en la vanguardia de la tecnología de comunicaciones inalámbricas.