España y Portugal están ante la oportunidad histórica de ser un nodo imprescindible para conectar cables submarinos de Europa, África y América, según los expertos

Instalación del cable Marea.
Instalación del cable Marea.

Telxius

  • La Península Ibérica tiene potencial para convertirse en el hub europeo por excelencia para la conexión de cables submarinos de fibra óptica.
  • Barcelona ya construye su puerto de ocho cables, mientras que de las costas portuguesas y españolas se están desplegando nuevos cables a América y África.
  • Facebook, Microsoft, Google, Telefónica... en colaboración o de forma individual, las multinacionales de la comunicación trabajan para conectar el mundo.
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En los últimos años, la península ibérica ha sido el escenario elegido por diversas compañías tecnológicas para desplegar nuevos cables de comunicaciones submarinas. Google, Microsoft, Facebook, Telefónica y otras tantas firmas están tratando de conectar el mundo con sus redes submarinas, y Portugal y España se han convertido, de facto, en un nodo indispensable.

Al menos eso es lo que consideran varios expertos como el CEO de EllaLink, el jefe de Tecnología de Telxius —la división de Telefónica que instala cable y torres telefónicas—, o el responsable de inversiones en cable para EMEA de Facebook.

Los tres participaron este miércoles, junto con el CEO de BCLS —Barcelona Cable Landing Station— y el director de Interxion, Mike Hollands, en un webinar que organizó esta última firma. El evento en directo trató de ahondar en las razones por las que la península ibérica es, hoy por hoy, un nodo de conexión elemental para entender la infraestructura sobre la que se sostiene internet.

Los nuevos cables que salen de la península

ElliaLink.

ElliaLink

La premisa era constatar cómo muchos de los cables submarinos que las multinacionales de comunicaciones están desplegando en los últimos años parten de costas portuguesas o españolas. Y después, tratar de explicar por qué.

Así, EllaLink está trabajando en el desarrollo de un cable submarino que nace en la ciudad portuguesa de Sines, al sur del país, con el propósito de alcanzar la urbe brasileña de Fortaleza

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Marea y Grace Hopper son cables que parten de España con el objetivo de tocar costa estadounidense: ambos nacen en Bilbao con el propósito de alcanzar Virginia y Nueva York, respectivamente. 

2Africa es un proyecto de Facebook y otras marcas, que pretende crear un anillo de cable rodeando el continente africano, para lo que es indispensable partir también de la península ibérica.

Tanto Marea como 2Africa son proyectos de Facebook, pero no únicamente de Facebook. En el primero también se cuenta con la participación de Microsoft y será operado por Telxius. En 2Africa participan Facebook y grandes telecos como Orange, Vodafone o China Mobile International.

Por qué la península es un atractivo

Philippe Dumont es el CEO de EllaLink, la compañía que pretende erigir un cable submarino entre Portugal y Brasil. "La península ibérica es, geográficamente, el mejor lugar para conectar Europa con Sudamérica y con Norteamérica", remachó al iniciar su participación en el webinar.

El resurgir de esta ruta transatlántica es "competitiva" y una "alternativa" frente a las rutas que parten de países asiáticos. "La península, gracias a su ubicación geográfica, es un punto esencial entre Asia, Sudamérica y Norteamérica. Durante los últimos siglos se ha visto Lisboa como uno de los principales puertos de Europa: ahora también como un hub para la comunicación de datos, también procedentes de África".

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El cable de EllaLink parte de Sines pero también toca las costas de Madeira y de las españolas Islas Canarias, hasta llegar a la costa africana antes de emprender su ruta hacia Brasil. 

Ricardo Orcero, responsable de inversiones en cables de Facebook para Europa y Oriente Medio, coincidía con su compañero de panel. "La península ibérica tiene un papel protagonista: ha sido históricamente la puerta de entrada al comercio en el Mediterráneo, y aunque en el siglo XIX fueron otros los países que lideraron el despliegue de cables telegráficos, es ahora cuando Portugal y España tienen una posición privilegiada para convertirse en el hub digital que necesita Europa".

Demandas para España y Portugal

Las infraestructuras no dependen únicamente de los cables submarinos. El pasado mes de noviembre comenzaba la construcción en Barcelona de un puerto capaz de recepcionar hasta ocho de estos cables de fibra óptica. La gestiona la empresa Barcelona Cable Landing Station, de la que es CEO Norman Albi, quien también participó en el webinar.

Orcero, de Facebook, reivindicó el potencial que puede tener para Portugal y España la apuesta de ser el nodo imprescindible para la maraña de cables que se están desplegando en los océanos. El propio Orcero reconocía que el tráfico de datos ha cambiado mucho en los últimos años, y su cantidad e intensidad puede variar de las aplicaciones que puedan ejecutarse en internet hoy día.

"Por ejemplo, el videojuego en línea es un punto que cada vez demanda más", detalló. Otros usos, como la realidad virtual y otras nuevas tecnologías van a necesitar de la instalación de nuevos cables que reduzcan al mínimo la latencia entre los usuarios.

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El desarrollo de estas infraestructuras repercutirá positivamente también en los países de la península. Pero los expertos requieren de mayor colaboración por parte de las administraciones. Carlos Dasi, el CTO de Telxius, recordó que un permiso no puede ser un impedimento para que lleguen nuevos negocios y rieguen los países de dinero. "Necesitamos de múltiples actores", detalló, antes de pedir mayor facilidad a la hora de negociar con las instituciones.

"No solo es cuestión de conectar de frontera a frontera", remachó Orcero. "Zonas como la España vaciada también necesitan de buena conexión". Además, los países nórdicos ya aprovechan energías renovables como la hidroeléctrica, algo que en España o en Portugal no puede ser un impedimento. "En los próximos años veremos cómo energías como la solar o la fotovoltaica se podrán comparar con la hidroeléctrica en el precio de los vatios". "Todo eso se tendrá en cuenta".

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