El cierre de tiendas Inditex avanza en España cargado de polémica: trabajadores y sindicatos insisten en que no se está cumpliendo lo pactado

Inditex avanza en el programa de cierres de tiendas en España, y por el que acometerá la clausura de un total 114 establecimientos hasta el mes de abril, según fuentes sindicales, pero no lo está haciendo exento de polémica: los sindicatos denuncian que no se esta obedeciendo a lo pactado en cuanto a las reubicaciones y que el 40% de los puestos ofrecidos están fuera de la provincia.

El plan del gigante Inditex pasa un cambio de modelo de negocio centrado en tiendas de mayor tamaño y por ende, la absorción de las más pequeñas. Esta operación se saldará con el cierre de 1.200 tiendas en todo el mundo, de las que entre 250 y 300 se encuentran en España, según explicó Pablo Isla, presidente del grupo.

Cabe explicar que CCOO detalla que solo el cierre de 114 tiendas en el territorio nacional afecta de lleno a 986 puestos de trabajo. Otras fuentes sindicales apuntan a que durante este año se materializará la clausura de otros 186 puntos de venta. 

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Como era de esperar este proceso está lleno de escollos. En octubre se lograba un preacuerdo entre Inditex y y los sindicatos UGT y CCOO. En él se priorizaba el mantenimiento del empleo y se agilizaba la reubicación de las plantillas afectadas a otras tiendas del grupo. Eso sí con varias condiciones: se fijaba un máximo de 25 kilómetros para estos traslados y las mismas condiciones laborales.

A mediados del pasado mes, los trabajadores de la multinacional denunciaban a través de CCOO que se estaba superando este límite kilométrico, al tiempo que detallaban que las vacantes ofrecidas durante proceso de adscripción eran "de mala calidad". Ahora, es el sindicato UGT el que insiste en la problemática. 

De acuerdo a la información de Reuters, el sindicato ha analizado las vacantes ofrecidas por el grupo textil y ha descubierto que el 40% de los nuevos puestos estaban fuera de la provincia donde el trabajador desarrolla su labor. Y en algunos, explica, "en la otra punta del país". 

A tenor de este informe interno elaborado por la confederación 1 de cada 4 trabajadores a los que se ofrecieron nuevos puestos en España hasta ahora había renunciado. "Si a los trabajadores que solían trabajar 40 horas se les ofrece de 12 horas, eso no es preservar el empleo”, alegó Cristina Estevez, representante minorista de UGT.

"Básicamente nos están invitado a irnos"

Buena parte de los trabajadores del grupo textil alegaron que las opciones que la compañía les pone sobre la mesa son las de "recortar sus horas semanales de 40 a menos de 20, con turnos trasladados a las tardes y fines de semana". 

De hecho, la Confederación Intersindical Galega (CIGA), el sindicato con mayor representación en Galicia, ya explicó el mes pasado que "las centrales sindicales mayoritarias ya sabían que este acuerdo no garantizaba los puestos de trabajo ni las jornadas. La negociación debería haber sido a nivel provincial porque actualmente no se ciñe a la realidad".

"Básicamente nos están invitando a irnos", añade una trabajadora de Zara, en Guadalajara. La empleada alega que en su propia tienda las vacantes que ofrecía el grupo "eran jornadas de 8 a 16 horas semanales, siempre fines de semana o incluso los domingos". 

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Por otro lado, los 25 kilómetros acordados por Inditex no se están cumpliendo, de acuerdo a la información de las confederaciones de trabajadores. "A algunos trabajadores de Barcelona se les ofrecieron vacantes en Santander, eso son 7 horas en coche", argumenta, por su parte, el sindicato CGT. 

“Estos son despidos disfrazados”, alega Anibal Maestro, secretario de la CGT para Zara en Madrid y que explica que cuando una empresa propone tales movimientos a sus trabajadores, les está obligando a renunciar a su puesto.

Inditex se defiende

Desde Inditex se defienden y explican a Reuters que secumpliendo con el convenio sindical y que las deslocalizaciones "respetan" el principio de priorizar el mantenimiento de los puestos de trabajo.

Asimismo, el grupo textil añade que se han estado ofreciendo más de una vacante por cada puesto afectado, al tiempo que que señala que el 75% de los trabajadores han sido reubicados en otras tiendas "con éxito".

Por otro lado, un portavoz de la compañía detalla que en el acuerdo con los sindicatos se tenía en cuenta el hecho de que las vacantes más alejadas podían resultar "atractivas para algunos empleados". En cambio, José Ángel Parejo, trabajador de Zara y sindicalista de AST concluye que el pacto fue "un cheque en blanco para la firma textil".