Jets privados, campos de golf y protección frente al coronavirus: el plan de los ricos en la Costa del Sol para atraer a visitantes de lujo
- El recinto de lujo de Sotogrande ya está haciendo los preparativos para una campaña veraniega diezmada por el coronavirus, por lo que los planes serán incluso más exclusivos.
- El complejo prepara viajes de más de 5.000 euros por varios días en la Costa del Sol con la única compañía de un staff seleccionado y un palo de golf, pero sin rastro del COVID-19.
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El negocio del golf en la Costa del Sol está a punto de descubrir cuánto están dispuesto a gastar sus aficionados con tal de llegar a salvo al último hoyo.
La comunidad de Sotogrande, uno de los destinos de lujo predilectos de la comunidad europea, es a día de hoy un conglomerado de yates, campos de polo y cotos privados donde practicar golf, y en este particular y exclusivo ecosistema se han fijado también los destinos de jets privados. Eso sí, no lo ofertan al alcance de cualquiera.
La factura puede rondar tranquilamente los 5.000 euros por tres días entre los campos de Valderrama, Sotogrande y La Reserva. En ellos va incluido el paquete de viajes y, sobre todo, una garantía de seguridad para enfrentarse al coronavirus en forma de pruebas antes de embarcar, terminales privadas para los clientes en ruta, menos pasajeros por avión y villas costeras donde alojarse.
"La preocupación del cliente de cara a los próximos meses es evitar los aeropuertos y no enclaustrarse en un tubo de aluminio para viajar", asegura Marc Topiol, director ejecutivo de Sotogrande SA, a Bloomberg.
Junto a su colega François-Henry Bennahmias, director general del fabricante de relojes suizo Audemars Piguet Holding SA, Topiol ha organizado a lo largo de los años una auténtica red de viajes exclusivos vía jet privado que giran alrededor del complejo de Sotogrande. En la situación actual, la oferta que lanzará entre sus círculos serán grupos de 5 o 6 personas por avión, destino Gibraltar, con un viaje corto a Soto.
El complejo ha sido históricamente un lujoso patio de recreo donde las principales fortunas de Europa, desde Tony Blair hasta el difunto presidente del Banco Santander, Emilio Botín, han podido refugiarse durante los meses de verano. La urbanización, situada en el municipio de San Roque (Cádiz), es a día de hoy la más exclusiva y discreta de la costa mediterránea, con menos de 3.000 residentes, pero con la llegada del calor su número se multiplica hasta 10 veces.
Es la magia del dinero, aunque en el contexto de una pandemia global la logística se vuelve más complicada. Según Topiol, ninguna fecha de estreno es del todo segura, aunque admite que ya hay preparativos para que el 15 de junio se dé por inaugurada la temporada de palos de golf, esloras de 12 metros y margaritas al sol.
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