¿Prefieres el teletrabajo o trabajar en la oficina?: cómo responder a la pregunta recurrente de las entrevistas laborales

"¿Prefieres teletrabajar o trabajar en la oficina?"; sin lugar a dudas, esta es la nueva pregunta recurrente con la que te encontrarás en próximas entrevistas laborales. La pandemia cambió radicalmente las reglas del trabajo: prácticamente todo el mundo tuvo que trabajar desde casa por seguridad. Aunque ahora la productividad poco a poco regresa a las oficinas, hay personas que han descubierto que prefieren seguir currando en casa porque, por ejemplo, se concentran mejor en soledad.

Si eres de ese tipo de personas, seguro que si se te da la posibilidad de elegir preferirás el teletrabajo a la opción más habitual. Ahora bien, puede que encuentres una oferta que te interese, pero que durante el proceso de selección sospeches que la empresa quiere que trabajes en oficina. Cuando en la entrevista laboral se te pregunte directamente por tus preferencias, ¿qué es lo que debes responder para conseguir el puesto?

Para elaborar una buena respuesta, debes llegar a la entrevista con tu réplica preparada. Y para ello es indispensable una fase de investigación previa, según Debrah Wheatman, presidenta de Careers Done Write, compañía de marketing para personas individuales. 

"Habla con gente que trabaja ahí, busca noticias sobre la empresa, desentraña cuál es su cultura y cómo funciona", explica Wheatman para Wall Street Journal. "Mucha gente no hace eso previamente y ese es su gran error".

De esta forma, podrás confirmar si tus preferencias para trabajar encajan con las opciones de la empresa: 100% teletrabajo, 100% trabajo en oficina o un modelo híbrido. Si estáis de acuerdo con ello, la entrevista laboral será un proceso fácil porque podrás aportar datos de por qué eres una buena elección de entre todos los candidatos.

En el caso de que no hayas investigado o desconozcas cuál es el modelo de la empresa en cuestión, sé honesto cuando se te haga la pregunta. "Se nota cuando la gente miente", advierte Wheatman.

Si resulta que tus preferencias no encajan con las del puesto de trabajo, y la oferta te interesa, prepara una lista con todas las ventajas que puedes ofrecer si aceptan tus condiciones. Lo razona Alexandra Carter, director de la Clínica de Mediación de la Escuela de Leyes de Columbia y experta en negociaciones.

"Si quieres teletrabajar, pero la empresa te dice que no está segura de aceptarlo, primero pregunta directamente por las preocupaciones relacionadas con el trabajo a distancia. Cuando entiendas lo que preocupa, podrás llegar a un acuerdo que os beneficie a ambos".

Por ejemplo, si tu posible futuro superior te dice que teme que tu productividad no sea la adecuada si trabajas desde casa, puedes responder mostrando tus hitos de productividad durante la época de teletrabajo. Carter te recomienda que compartas el horario que seguías y los objetivos que cumpliste. Si resulta que estar cerca de tu familia te motiva y te ayuda a dar el 200%, dilo con sinceridad.

Carter pone como ejemplo una cliente suya al que se le ofreció un trabajo a distancia. Ella prefería trabajar desde la oficina para conocer mejor a los demás. Llegaron a un acuerdo: trabajaría durante un mes en la sede para aprender la cultura de la empresa y establecer vínculos con sus compañeros. Cuando le tocó teletrabajar al 100% ya tenía todas sus dudas disipadas y pudo ponerse manos a la obra.

Pero atención porque en las entrevistas de trabajo siempre aparece una cruda verdad: "A las empresas no les interesa lo que el candidato quiere", aclara Wheatman. "Quieren conseguir un acuerdo que les beneficie". Si no te funciona una o 2 veces, no desesperes: sigue este método de investigación-preparación-negociación hasta hacer diana.