SEGA compra Rovio, creadora de 'Angry Birds', por 706 millones de euros: estos son todos los detalles del acuerdo

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  • La japonesa SEGA ha comprado este lunes el estudio de videojuegos finlandés Rovio, creador de Angry Birds.
  • Pagará 706 millones de euros por Rovio a un precio de 9,25 euros por acción, y solo queda el visto bueno de las autoridades.

Este sábado saltaba la noticia después de darse a conocer que el estudio japonés de videojuegos SEGA, un histórico del sector y creador de las sagas Sonic, había lanzado una OPA para comprar una de las desarrolladoras más grandes de Europa, la finlandesa Rovio, creadora de Angry Birds.

La decisión final en este caso no se ha hecho esperar demasiado ya que Rovio ha confirmado este lunes que acepta la oferta de compra de SEGA y que recomendará las condiciones a sus accionistas, como ha informado la compañía en un comunicado.

Como parte del acuerdo alcanzado entre ambas empresas, SEGA se compromete a pagar 9,25 euros por acción de Rovio, a lo que hay que añadir un importe adicional de 1,48 euros por las opciones de compra de títulos.

La suma de las acciones y las opciones de Rovio se traducen en un importe final acordado de 706 millones de euros si finalmente se completa la transacción, que está prácticamente cerrada desde el punto de la vista de las empresas pero que aún necesita de la aprobación de los reguladores locales.

Cómo han sido las negociaciones y qué queda por delante para cerrar la compra

El acuerdo entre las empresas no ha encontrado oposición por parte de la junta directiva de Rovio, que ha votado a favor de la oferta de SEGA por mayoría.

La junta directiva ha recomendado de forma unánime a los accionistas de la empresa que acepten el precio ofrecido por la compañía japonesa. Los accionistas poseen el 49,1% de los títulos de la empresa, y han aceptado mayoritariamente la OPA.

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El comunicado da a entender que la mayoría de los accionistas está de acuerdo. Aún es posible que una minoría de ellos pueda poner dificultades pero estas no deberían comprometer el acuerdo.

El único paso necesario que falta, al igual que sucede en cualquier otra adquisición, es que las autoridades de regulación de los países (la CNMV en el caso de España) den el visto bueno a la compra y confirmen que no va en contra de la legislación local.

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