La semana laboral de 4 días puede aumentar la productividad pero también tiene una importante desventaja

• Empresas como Microsoft y Shake Shack han experimentado con la semana laboral de 4 días para mejorar el equilibrio entre la vida laboral y personal de sus empleados.
• Pero a pesar de todas las ventajas que puede ofrecer una semana laboral más corta, también hay una desventaja a considerar.
• Acortar la semana laboral podría significar menos tiempo para el desarrollo profesional a largo plazo, dice la experta en gestión del tiempo Laura Vanderkam.
• Una solución más viable podría ser ofrecer horarios de trabajo más flexibles en lugar de acortar la semana laboral un día.
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Empresas como Microsoft y Shake Shack han experimentado recientemente con la semana laboral de cuatro días como parte de un esfuerzo por ayudar a sus empleados a lograr un mejor equilibrio entre la vida laboral y personal.

Y si bien la reducción en un día puede motivar a los empleados a trabajar más en menos tiempo, existe un inconveniente que puede derivarse de solo trabajar 4 días por semana.

Una semana laboral más corta podría significar destinar menos tiempo a avanzar en la carrera profesional de un empleado a largo plazo, como ampliar la red de contactos.

Así opina Laura Vanderkam, experta en gestión del tiempo y autora de varios libros sobre temas de productividad y equilibrio entre la vida laboral y personal, incluyendo "Qué hace la gente exitosa con su tiempo libre: ¡Siéntete menos ocupado y logra más!".

"La gente trabaja en los asuntos que tienen que hacerse de manera inmediata, pero esta reducción también podría significar dedicar menos tiempo para el desarrollo profesional a largo plazo", dijo Vanderkam a Business Insider.

Por ejemplo, una persona que trabaja solo 4 días a la semana puede decidir no comer con un compañero de trabajo o cliente que podría haber llevado a un proyecto importante en el futuro porque no tenía tiempo disponible para hacerlo.

"Creo sin duda que hay argumentos para poner un límite a las horas que han sido ineficientes antes", dijo Vanderkam. "Pero creo que también hay un punto en el que no se puede ser más eficiente sin perder realmente algunas de las cosas de mayor valor que son importantes, pero no urgentes".

Eso no quiere decir que reestructurar la semana laboral no sea beneficioso de alguna manera.  

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En un estudio de 7.500 empleados el año pasado, por ejemplo, un informe de Gallup reveló que el 23% de los trabajadores se sentían agotados siempre o muy a menudo, mientras que el 44% dijo que a veces se sentían agotados en el trabajo. Eso podría estar dificultando que la empresa retenga talento. Casi la mitad de los 614 líderes de recursos humanos encuestados por Kronos Incorporated y Future Workplace en 2017 dijeron que el agotamiento es la razón de hasta la mitad de la rotación anual de su fuerza laboral.

Acortar un día de la semana laboral podría ayudar a resolver ese problema y al mismo tiempo potencialmente mejorar la productividad al obligar a los trabajadores a aprovechar al máximo su tiempo en la oficina.

Pero de acuerdo con Vanderkam, la solución probablemente sea permitir horarios flexibles en vez de proporcionar una regla general como reducir la semana laboral a cuatro días. Si un empleado tiene dificultades para evitar compromisos importantes no relacionados con su profesión, como citas con el médico o el cuidado de un niño o un miembro de la familia, puede solicitar trabajar más horas de lunes a jueves y trabajar un día más corto el viernes.

"Será una cuestión de optimización", dijo Vanderkam sobre la cantidad ideal de horas que los empleados deberían trabajar durante la semana. "Realmente no sabemos cuál es el número correcto. Supongo que no es 80, pero tampoco 20."