Así es cómo y cuándo debes meditar para conseguir dormirte más rápido por la noche

Dormir bien
  • ¿Tienes problemas para dormir? La meditación puede ayudar. Pero no vale esforzarse o de lo contrario la mente empezará a sentir ansiedad.
  • El truco está en cambiar de chip, modificar el motivo por el que meditas. Es algo muy sencillo que desbloqueará muchos problemas.
  • Descubre más historias en Business Insider España.

¿Tienes problemas para dormir? ¿No puedes dormir tanto cómo te gustaría y no sabes qué hacer? Quizás has oído hablar de un truco genial para dormir rápido: la meditación. Está comprobado que meditar ayuda a gestionar el estrés, reduce los pensamientos y emociones negativas y te ayuda a tener perspectivas nuevas para los problemas.

Pero puede que hayas intentado meditar un ratito antes de ir a dormir y, en lugar de serenarte, los nervios te han dominado todavía más. O puede que a veces te funcione y otras veces no. ¿Por qué ocurre esto?

El psicólogo Jason Ong, especialista en tratar problemas relacionados con el sueño, ha explicado cómo y cuándo meditar para dormir mejor y más rápido durante una entrevista en el podcast Think Act Be (Piensa, Actúa, Sé).

Jason Ong explica que el problema de utilizar la meditación como herramienta (en este caso, para dormir mejor) es que entonces la mente se activa y piensa en dicha actividad como un esfuerzo. 

“En otras áreas de nuestra vida hemos aprendido que debemos esforzarnos para solucionar problemas”, explica Ong. “Pero dormir es algo que cuanto más empeño pones, peor resultado obtienes”.

19 errores que cometes antes de irte a dormir y que perjudican tu descanso

Seguro que te ha pasado. Te tumbas en la cama y piensas “tengo que dormirme ya para descansar siete horas o mañana no rendiré”. Chas, eso es lo que necesitaba la mente para ponerse nerviosa al intentar hacerte caso. Y tardas tres horas en viajar al mundo de los sueños.

Esos nervios que has sentido tienen nombre: ansiedad de rendimiento. Aparece cuando estás en modo “tengo que hacer una tarea”. Así que también aparecerá si te tomas la meditación para dormir como una tarea.

Este psicólogo especializado en trastornos del sueño explica que el truco está en cambiar la intención de la meditación. Ong lo compara a cualquier actividad que realizas antes de irte a dormir. No lees un libro para dormir mejor, o no miras una peli para dormirte más rápido. El cansancio simplemente llega.

Con meditar tiene que ser lo mismo. Si meditas, debe ser porque quieres, o porque quieres experimentar la sensación de atención plena.

“Se nos ha enseñado a que queremos cosas y que esas cosas ocurra. La práctica de la atención plena, el mindfulness, es diferente. Es casi opuesto a eso. Te reta a no buscar la recompensa cortoplacista, el goce instantáneo”.

Ong recomienda entonces que taches tu tarea “meditar para dormir” y la reemplaces por “meditar para estar presente”. 

¿Existe alguna forma efectiva de meditar? El psicólogo recomienda una simple meditación en posición sentada si acabas de empezar con esto. Cierra los ojos y céntrate en la respiración. Cada vez que la mente divague, date cuenta de que ha ocurrido, réstale importancia y regresa a la respiración.

Si te cuesta hacerlo por tu cuenta (es habitual al empezar), puedes recurrir a meditaciones guiadas como esta:

Es importante que tu objetivo no sea “alcanzar el nirvana”. Tu objetivo tiene que ser “darme cuenta de que mi mente divaga”. De lo contrario, volverá esa ansiedad de rendimiento.

Dormir bien puede ser más importante que comer o hacer ejercicio: los 5 consejos para dormir mejor por la noche

¿Y cuándo? Pues en cualquier momento menos antes de irte a dormir. Cuanto menos tiempo haya entre meditar y la hora de irse a dormir, más asociarás las dos actividades como causa-efecto (“medito porque quiero dormir”) y más te costarán ambas cosas.

Meditar mañana

Para empezar, el mejor momento es durante el día. Va bien por la mañana, antes de entrar en “el mundo real”, o después de comer, a modo de actividad para reponer energías.

“Después de que sepas cómo hacerlo durante el día, puedes intentarlo por la noche”.

Si meditar no te ayuda a dormir mejor o más rápido, no es el fin del mundo. Ong recuerda que existen muchas soluciones y que a cada persona le funciona una o la otra. Intenta por ejemplo realizar una actividad tranquila antes de irte a dormir, preferiblemente sin utilizar pantallas. O solo túmbate en la cama cuando realmente tengas sueño, para evitar esos nervios. Y si te encanta el café puede que no te guste, pero dejar de tomar café 6-8 horas antes de dormir puede ayudarte un montón. Existen formas de mantener la productividad sin necesidad de tomar café.

¡Que tengas dulces sueños!

Descubre más sobre , autor/a de este artículo.

Conoce cómo trabajamos en Business Insider.

Etiquetas: