Vivo en un crucero por 0 euros y tengo una habitación con balcón panorámico
Christine Kesteloo
- Vivo en un crucero con mi marido, que trabaja en él, 6 meses al año.
- Nuestro camarote es minúsculo, pero perfecto para nosotros, aunque me gustaría que el cuarto de baño fuera más grande.
- El balcón privado panorámico es probablemente lo mejor, pero también lo es no tener que lavar la ropa.
Hola, soy Christine. Vivo medio año en un crucero y comparto mi experiencia en TikTok (@dutchworld_americangirl).
Mi marido es el jefe de máquinas del crucero, así que yo soy su "esposa a bordo" y vivimos en el barco con un horario de 3 meses dentro y 3 fuera. Cuando no vivimos a bordo, vivimos en Holanda.
Yo era directora de cruceros y, entre los 2, llevamos más de 45 años en el mar. Para muchos, nuestro camarote de 31 metros cuadrados es estrecho, pero para nosotros es perfecto.
Permíteme que te muestre su interior.
Cuando entras, puedes ver nuestra cama y los armarios empotrados...
Nuestro camarote de tripulación está en la cubierta 7, justo en la proa del barco. No todos los camarotes de la tripulación son iguales, y pueden dividirse en función del rango y la posición. Algunos tienen su propio camarote y otros lo comparten. Afortunadamente, tenemos el espacio para nosotros solos.
Nuestra habitación tiene una cama de matrimonio con espacio para guardar cosas debajo y una televisión delante.
Hay 2 televisiones en la habitación (la otra está encima del frigorífico), y el barco nos ofrece cientos de películas y acceso a muchas cadenas.
Pasamos muchas noches aquí mecidos por las olas mientras vemos nuestros programas favoritos.
En el barco, el servicio de habitaciones es gratuito y el menú está en la pantalla. Pedimos con regularidad para poder pasar un rato tranquilo lejos de los huéspedes y la tripulación.
Aunque estoy contenta con el tamaño de nuestro camarote, el baño es bastante pequeño.
Nuestro cuarto de baño tiene lo básico: inodoro, espejo, ducha y lavabo.
Para depilarme las piernas tengo que colocar una toalla en el inodoro, sentarme y extender una pierna dentro de la ducha.
El inodoro, como en la mayoría de cruceros, descarga con un fuerte sonido de vacío que nunca podrás olvidar. Da bastante miedo al principio.
También tenemos que tener mucho cuidado con lo que echamos en el inodoro para no atascarlo; solo papel higiénico, nada de toallas de papel ni productos sanitarios.
No tenemos vestidor, pero sí armario, sofá y mesa de comedor.
En cuanto al espacio del armario, tenemos uno dividido en 3 secciones. Puedes apostar a que utilizo la mayor parte del espacio del armario.
A bordo no se permiten vaporeras ni planchas, así que intento mantener la ropa colgada y sin arrugas.
También tenemos una pequeña mesa de comedor con 2 sillas, un escritorio, una nevera para vinos y una ventana con una repisa lo bastante grande como para que yo pueda usarla de tocador para maquillarme.
No tenemos lavadora ni secadora, así que nos recogen la ropa 2 veces por semana.
Pongo toda nuestra colada en una bolsa de tela e introduzco un papel con nuestro nombre, el número de habitación, la fecha y las prendas que hay dentro.
Normalmente nos lavan la ropa y nos la devuelven en un plazo de 24 a 48 horas. Doy algo de propina a mi camarero de habitación cada vez que recoge nuestra colada y la deja en la tintorería de a bordo.
La ropa limpia vuelve en perchas, así que lo único que tengo que hacer es volver a guardarla en el armario. El personal también limpia regularmente nuestra habitación.
Lo mejor de nuestra habitación es el balcón privado con vistas a la proa del barco.
El puente del barco, que es una especie de centro de control, está una cubierta por encima de nosotros, y tenemos un balcón panorámico debajo de él.
Muchos días en el mar hace demasiado viento para sentarse fuera. Cuando amaina el viento, soy la primera en coger mi toalla y tomar el sol.
En mi opinión, tenemos el mejor camarote de todo el barco y, sin duda, las mejores vistas.
En general, hay muchas cosas que me encantan de vivir en un crucero.
Me encanta no tener que cocinar ni lavar la ropa. También me encanta vivir sin deudas y sin tener que pagar el coche.
Vivir de forma minimalista también es bastante agradable, sobre todo porque no tenemos espacio para no hacerlo.
Solo somos 4 maletas, nosotros y el océano.
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