La Xiaomi Mi Band 5 es completa, sencilla y útil, pero le falta un detalle para ser la pulsera inteligente perfecta

Las pulseras de actividad se han convertido en un muy buen complemento, tanto para aquellos que necesitan una motivación para salir a hacer ejercicio o bien para los que quieren comenzar en el mundo de los wearables sin necesidad de gastar mucho. En esta ocasión te contaré mi experiencia con la última pulsera inteligente de Xiaomi, la Mi Band 5.

La compañía es una firma que desembarcó hace menos de tres años en España y, desde entonces, no ha parado de crecer. De hecho, ya se sitúa entre los 5 fabricantes que más venden en España, según Canalys.

Esto se debe a la buena relación calidad/precio de sus productos, ya que ofrece dispositivos muy interesantes al alcance de todos los bolsillos.

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Y la quinta generación de su pulsera inteligente no iba a ser menos. Pero, ¿merecerá la pena dar el salto de la Mi Band 4 a la Mi Band 5? ¿Qué aporta de nuevo al usuario? ¿Será, de nuevo, uno de los wearables más vendidos? Respondo a todas estas preguntas en este análisis...

Su diseño es continuista, a la par que característico. Sigue siendo sobrio, aunque ya se corresponde como un icono de a firma en el que prima la utilidad a lo superfluo.

La Xiaomi Mi Band 5 cuenta con un diseño práctico y útil, donde reina esta característica frente a lo superfluo. En la parte frontal se alberga un botón táctil, aunque la pantalla de 1,01 pulgadas lo es en su totalidad.

En la parte trasera de la cápsula es donde se encuentra el sensor de frecuencia cardíaca y los pines de carga, además del logotipo de Xiaomi.

Cabe destacar que resulta muy cómoda y que apenas he notado que la llevaba puesta, más allá de cuando había una notificación entrante. Lo que sí me gustaría destacar es que en ocasiones el enganche se abre con demasiada facilidad, nada grave, pero a comentar.

Pantalla nítida y colorida en el día a día con un táctil que funciona muy bien

Los colores de la pantalla son muy nítidos y la información de la pantalla se ve correctamente. El brillo, según Xiaomi, es mayor que en la Mi Band 3, y llega a alcanzar los 400 nits. En esta pulsera tampoco se incluye un sensor de luz ambiental, por lo que tendrás que regular de forma manual el brillo.

Con un brillo medio he podido observar la información tanto en situaciones de mucha luz como de baja luz. Por lo general se ve bien, aunque a veces hay muchos reflejos y no se aprecia apenas la subida de nits de la que habla la marca.

El panel táctil responde en cualquier ocasión. De hecho, hay que destacar la efectividad de detección de los gestos en pantalla, ya que son muy rápidos incluso cuando he estado realizando actividades deportivas.

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La Mi Band 5 ofrece una información amplia y detallada en el día a día gracias a la app Mi Fit

Las funciones que tiene esta Xiaomi Mi Band 5 son distintas de las que incorporaban las generaciones anteriores. Y es que cada vez este tipo de pulseras son más completas.

En este caso, la navegación se realiza a través de gestos. Gracias a ellos he podido acceder a los diferentes menús y realizar diferentes acciones, desde monitorizar una actividad física dentro de los 11 deportes con los que es compatible.

Por otro lado, te monitorizará la frecuencia cardíaca cada cierto tiempo y los pasos que recorres a lo largo del día.

Además de este tipo de funcionalidades cuenta con otras opciones como, por ejemplo, conocer el tiempo, encontrar el smartphone o realizar fotografías de forma remota. En definitiva: un montón de funciones útiles que al final he ido utilizando en cada ocasión.

Una de ellas es el control de la música, algo que parece una buena idea y que realmente lo es, pero que no me ha ofrecido los resultados que esperaba. Las notificaciones también han entrado correctamente, y siempre está bien que uno mismo elija qué alertas activa en la pulsera.

Lo que no me ha parecido nada intuitivo ha sido el indicador PAI —un parámetro que muestra la actividad y está basado en los hábitos diarios—. Recuerda mucho a los anillos del Apple Watch, pero creo que falta trabajarlo un poco más, sobre todo motivación para animar a seguir haciendo deporte.

Las alarmas resultan bastante poco efectivas, aunque es cierto que no soy una persona que se despierte con facilidad una vez que coge el sueño, pero es muy sencillo posponerlas.

La app de Mi Fit ha cambiado mucho con el paso del tiempo, ahora bien, resulta muy útil para conocer el histórico de los datos recogidos por la Mi Band 5 a lo largo de los días y también para conocer datos más curiosos relacionados con el descanso. La app es bastante intuitiva y me ha gustado mucho que sea tan fácil realizar ajustes en la pulsera.

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La batería dura menos que la generación anterior, pero sigue siendo lo suficientemente buena

La Mi Band 5 cuenta con una batería de 115 mAh, algo inferior que lo Mi Band 4. Eso sí, sigue siendo más que aceptable: tan solo he tenido que recargarla una vez cada 10 días.

De hecho, una de las novedades que se incluyen en el Mi Band 5 es el cargador por pines, ya no es necesario tener que sacar la cápsula para realizar la carga, lo que hace que la durabilidad de las correas sea mayor y también hace que sea mucho más fácil y menos tedioso el proceso para cargar la pulsera.

Puedes poner distintos apartados de la pulsera a tu gusto

Si hay una cosa que me gusta en cualquier dispositivo es que se pueda poner a mi gusto. La Xiaomi Mi Band 5 es totalmente personalizable, incluso puedes poner una foto tuya en la esfera y configurar los datos que quieres que aparezcan para que nadie más tenga un fondo igual al tuyo.

En mi caso he utilizado la que venía de serie, debido a que ninguna que se incluía en la tienda me convencía, aunque cabe destacar que ya existen apps de terceros que puedes descargar desde la Google Play Store en la que podrás encontrar mucha variedad.

Otra de las opciones que permite la Xiaomi Mi Band 5 es poder elegir el orden en el que quieres que aparezcan los diferentes datos en la esfera. Hay que tener en cuenta que las smartbands son intercambiables y más allá de la negra que viene, siempre puedes hacerte con una que sea de tu estilo.

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Mantiene la esencia de las pulseras inteligentes de Xiaomi

La Xiaomi Mi Band 5 me ha gustado, pero no me ha sorprendido. Personalmente, creo que por 40 euros poco más se le puede pedir.

Además, cabe destacar que es resistente al agua gracias a la certificación IP67, por lo que podrás llevártela de vacaciones sin problema. Asimismo, la experiencia de uso sigue mejorando cada generación, algo que es de agradecer por parte de la marca, ya que implica que escucha las peticiones de sus clientes.

Sin duda es un salto adelante en todos los aspectos, a excepción del de la autonomía debido a su mayor pantalla y su inferior amperaje, que sigue ofreciendo unos buenos resultados.