3 trucos de inteligencia emocional para negociar con los demás, según un exagente del FBI

La inteligencia emocional es una de las competencias más útiles para la vida, tanto en el plano profesional como en el personal. Se trata de la capacidad de reconocer sentimientos propios y ajenos, de la relación con los demás a través de la empatía y la gestión de las emociones. 

Al igual que la creatividad, la concentración o la capacidad para hablar en público, la inteligencia emocional puede trabajarse a través de diferentes técnicas y ejercicios. En el libro Hidden Genius, publicado por Polina Marinova Pompliano se detallan los hábitos y la mentalidad de algunas figuras exitosas e influyentes a las que merece la pena prestar atención, recoge CNBC.

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Una de ellas es Chris Voss, un importante exagente del FBI que trabajó 24 años como uno de los principales negociadores internacionales. Su secreto fue escuchar y leer a las personas con atención, como cuando tuvo que negociar al terléfono con uno de los atracadores que secuestraron como rehenes a 3 empleados del Chase Manhattan Bank de Brooklyn (Nueva York) en 1033.

Estas son las 3 cosas que hizo para resolver el conflicto, y que son claves en la comunicación con los demás si quieres tener una inteligencia emocional elevada.

1. Hablar tranquilamente

En aquella negociación de 1993, Voss utilizó una técnica que él denomina "la voz del DJ de la FM nocturna". ¿Qué quiere decir esto? Que una voz tranquilizadora, suave, relajada y en tono descendente puede ayudarte en cualquier situación. 

Este tono de voz desencadena una reacción neuroquímica que calma el cerebro de su interlocutor, generando una respuesta involuntaria de lucidez mental en ambas partes.

"La curiosidad genuina es un hack para el control emocional", dijo en una entrevista de pódcast en 2018. Este tipo de voz no solamente calma a la persona con la que estás hablando, sino que también es útil para relajarte a ti mismo.

2. Repetir afirmaciones como preguntas

Utiliza la técnica del reflejo: es ideal para recabar información, crear un clima confiado y dar sensación de buena voluntad. Repite varias palabras clave de su última frasee.

Si la persona dice: "He tenido un día muy duro debido a todo el estrés que tengo", podrías responder: "¿El estrés que tienes?". Es una manera de conservar la sobriedad y el equilibrio emocional y permanecer presente, según el exagente del FBI.

3. Etiquetar las emociones de la otra persona

Después de hablar del estrés, Voss le dijo al segundo atracador: "No ha sido culpa tuya, ¿verdad?" y "Te arrepientes de lo que ha pasado, ¿verdad?". Ambas preguntas insinuaban que el atracador simplemente se vio envuelto en una mala situación.

El etiquetado se utiliza para identificar y nombrar verbalmente las emociones de tu interlocutor. 

La clave está en tener una escucha estratégica para resolver los conflictos de alta presión que puedan surgir en el ámbito laboral, familiar o de pareja. Sin escuchar, no puedes negociar adecuadamente.