Cómo cuidar tu piel pasados los 50 para ralentizar la aparición de arrugas a medida que vayas cumpliendo más años

A los 50 tener arrugas es natural. Y no pasa nada por ello. Pero para aquellos que no lo lleven bien o quieran ralentizar su aparición existen formas de lograrlo.

Con la edad tu cuerpo va cambiando y esos cambios tienen consecuencias. De hecho la piel, y en concreto la de la cara, es una de las partes en las que antes notas el paso de los años. 

En esta época tu cuerpo sintetiza mucho menos colágeno, también hace tiempo que disminuyó su nivel de ácido hialurónico y la renovación celular es mucho más lenta. Esto sumado a otras alteraciones  hacen que la piel madura sea más seca, flácida y se intensifiquen las arrugas.

Por tanto, a los 50 toca cuidar la piel de otra manera que como lo hacías a los 30 cuando apenas había motivos por los que preocuparse o a los 20 cuando tu ritual de belleza se centraba en prevenir.

Aquí una serie de consejos obtenidos de especialistas sobre cómo empezar a cuidar tu piel a partir de los 50 años para ralentizar las arrugas y otros signos de la edad.

Utiliza protección solar cada día

Los dermatólogos no se cansan de decirlo: si quieres cuidar tu piel, prótejela del sol. Pues nada envejece más que la radiación solar.

La exposición solar continuadareducirá la cantidad de aceites lubricantes que de manera natural están presentes en tu piel. Algo que ya sucede con la edad, por lo que potenciarás su sequedad.

Asimismo, la radiación ultravioleta (UV) del sol puede causar cambios a largo plazo en la estructura de la piel, afectando al colágeno y favoreciendo la aparición de arrugas.

"Por ello en todas las edades se debe usar fotoprotección solar diaria con  FPS 50", enfatiza a Business Insider España la doctora Elena De las Heras

A la hora de escoger el mejor protector solar, asegúrate de que este protege de los rayos  UVA y UVB de amplio espectro.Además de esto puedes optar por alguno que incluya un cuidado especial antiedad.

"Ahora la novedad es que los fotoprotectores incluyan agentes antiedad como péptidos o vitamina C y despigmentantes como niacinamida, rucinol, tranexámico, etc.", señala la experta.

Hidrata tu piel de manera regular

Es normal que con la edad notes que tu piel se vuelve más seca. 

A medida que vas cumpliendo años, los componentes que mantienen tu dermis tersa y flexible se van degradando. En mujeres, sobre todo a partir de la menopausia la renovación celular y la producción de grasa se va ralentizando.

Por ello es importante que a partir de los 50 te asegures una nueva rutina de belleza centrada en favorecer la hidratación de tu piel.

“Las cremas hidratantes que contienen ácido hialurónico ayudan a retener el agua, manteniendo la piel flexible", mientras que los serums y cremas con antioxidantes "como la vitamina C combaten los radicales libres que contribuyen al envejecimiento", aconseja la dermatóloga Kiyanna Williams en Cleveland Clinic.

Como en el resto de edades, es importante que te asegures de limpiar tu rostro tanto por la mañana como por la noche. Con ello eliminarás los restos de suciedad y piel muerta, favoreciendo además que después los productos que te des para el cuidado de tu dermis penetren realmente en esta.

A esta edad, mejor escoge limpiadores y tónicos más suaves, sin alcohol ni fragancias fuertes, pues es más probable que estos resequen la piel.

Evita el agua caliente y las duchas largas

Según Harvard, entre los factores que pueden empeorar el envejeciemiento de la piel está el agua caliente. Ya que esta "quita los aceites naturales" presentes en tu dermis. 

Por ello, recomiendan mantener la temperatura del agua "cómodamente tibia".

Asimismo, aconsejan reducir el tiempo de ducha, a no más de 10 minutos, pues mientras que en ese tiempo hidratarás tu piel, permanecer más tiempo hará que elimines humedad.

Busca productos que contengan ácido glicólico, retinol o vitamina C

"A los 50, según el tipo de piel, se aconseja usar cremas que combinen ácido glicólico y ácido retinoico, o usar retinol solo o ácido retinoico solo (invierno por las noches) y vitamina C y/o vitamina E (verano o mañanas en invierno)", aconseja De las Heras.

"De todos los agentes antiedad, la estrella para mí es el ácido glicólico", asegura la dermatóloga. Según sus directrices este componente tiene acción hidratante, acelera la renovación epidérmica y ayuda a mejorar la textura y consistencia de la piel.

En cuanto a los retinoides, se trata de compuestos relacionados con la vitamina A que parecen favorecer la producción de colágeno y melanina.

Por su parte, la vitamina C es uno de los antioxidantes que más puede hacer por tu piel. Sirve como cofactor de las enzimas esenciales para la síntesis y la estabilidad del colágeno, combate el efecto de los radicales libres y tiene acción fotoprotectora contra la radiación UV.

"En dos estudios mujeres de 50 a 60 años se aplicaron una crema de ácido ascórbico o vitamina C al 5% durante 6 meses frente a otras con las mismas condiciones que se aplicaron la misma crema sin vitamina. Se observó un incremento en la síntesis de colágeno dérmico (confirmado por biopsias)", remarca De las Heras.

Una "sinergia eficaz para pieles secas y/o envejecidas por el sol es el ácido glicólico al 8% con vitaminas C y E", subraya la experta. La vitamina C siempre debe estar en concentraciones entre 5 y 10%, en ph ácido y en excipiente tipo serum, puntualiza.

Comienza a exfoliarte de manera regular

A partir de los 50 exfoliar tu piel se vuelve más clave. 

"La capa externa es como un techo de piel muerta y se espesa a medida que envejeces, por lo que debe exfoliarse para ver una piel más fresca", aconseja en Byrdie Steven J. Pearlman, cirujano plástico de Nueva York.

Con este gesto ayudas por tanto a deshacerte de esas células muertas y suciedad, activando además la renovación diaria del colágeno. 

Exfolia tu rostro, pero no te excedas. 

Así lo advierte en Voguela famosa experta en cuidado facial Joanna Czech. "En las mujeres mayores de 50 años, la capa exterior de la piel se vuelve más fina y delicada", evidencia. Por lo que esta acción podría provocar "microdesgarros en la epidermis". Para evitarlo mejor usar un exfoliante suave.

Apuesta por los masajes faciales

El masaje facial está de modo. Es más que recomendable a cualquier edad, pero es especialmente aconsejable para los cutis maduros. 

Como remarcan desde Vogue, este tratamiento permite "definir los músculos faciales y reducir la acumulación de líquido, así como mejorar el flujo sanguíneo, la renovación celular, la tonificación de los tejidos y aumentar la producción de colágeno". 

A medida que se envejece el cuerpo genera menos colágeno, lo que hace que la piel "se vuelve más flácida, se hunda y se forman arrugas", explica en dicho medio Rochelle Weitzner, fundadora y directora ejecutiva de Pause Skincare, una línea de productos de belleza desarrollada para mujeres que están pasando por la menopausia. 

De acuerdo a la especialista el masaje facial permite estimular los fibroblastos, que son las células que producen colágeno. 

Para ponerlo en práctica utiliza una herramienta o las yemas de los dedos y contornea los músculos faciales, moviendo estos a lo largo de la línea de la mandíbula y hacia arriba, hacia la parte alta de los pómulos, la zona debajo de los ojos y la frente. 

Para extra Czech aconseja envolver una gasa alrededor de cubitos de hielo a partir de té verde o de manzanilla y deslizarla previamente sobre la piel.