Un conductor de Google Street View se da a la fuga con el vehículo de la empresa

Un conductor de un coche de Google Street View se ha dado a la fuga a más de 160 kilómetros por hora y ha protagonizado una persecución con la policía. El conductor se terminó estrellando en una zanja al negarse a detenerse, según los oficiales del Departamento de Policía de Middletown, Indiana.

Los oficiales han difundido un comunicado de prensa en el que aseguran que uno de sus agentes vio el coche de Google Street View circulando a gran velocidad y adelantando a otros conductores de manera temeraria. La velocidad excedía los 160 kilómetros por hora, por lo que iniciaron una persecución para detener el vehículo del infractor.

El coche de Google Street View estaba equipado con el material técnico proporcionado por la empresa: cámaras de 360 grados y antena en la parte superior del vehículo. La persona contratada por Google utilizaba el coche de la empresa para tomar imágenes de Middletown cuando sucedieron los hechos. 

Según el comunicado de prensa del Departamento de Policía de Middletown, el jefe Landon J. Dean vio que el conductor se negaba a detenerse, por lo que lo persiguió durante varios kilómetros. El conductor de Google no se detuvo y llegó a cometer otras infracciones como saltarse un semáforo en rojo antes de llegar a un puente cerrado. 

El conductor ha generado numerosas situaciones de peligro durante la persecución, aunque la más reseñable es el intento de girar a alta velocidad para evitar el puente. Los oficiales aseguran que perdió el control del vehículo y se estrelló contra la zanja de un arroyo, donde quedó atascado.

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Los agentes detuvieron entonces al conductor, que aseguraba que tenía miedo de parar, según el comunicado. El implicado no ha sufrido lesiones de gravedad y fue dado de alta con rapidez, luego pasó a disposición judicial con ingreso en la cárcel del condado de Henry. El conductor se enfrenta a un cargo grave por resistencia a la aplicación de la ley. 

Google ha declarado a Business Insider que colabora con trabajadores independientes para conducir y recoger imágenes. La empresa se ha puesto a disposición de las autoridades de Indiana para garantizar que se tomen las medidas adecuadas para resolver esta situación. 

Google ha remarcado también la seriedad y profesionalidad que caracteriza a sus conductores y la seguridad de los protocolos llevados a cabo en las operaciones de Street View.