Elon Musk no quería que el Tesla Model Y tuviera volante, así que los ingenieros desarrollaron el coche a sus espaldas, según un nuevo libro

Elon Musk no quería un volante en su Tesla Model Y, pero los ingenieros diseñaron uno de todas formas.

Según el nuevo libro del periodista de The Wall Street Journal Tim Higgins, Power Play: Tesla, Elon Musk, and the Bet of the Century(Juego de poder: Tesla, Elon Musk y la apuesta del siglo), Musk argumentó originalmente que el Modelo Y, lanzado el año pasado, no necesitaba un volante, ya que el vehículo estaba destinado a ser totalmente autodirigido.

Sin embargo, los ingenieros de Tesla, dirigidos por el entonces jefe de ingeniería Doug Field, desarrollaron el modelo a sus espaldas. Según Higgins, a Field le preocupaba que Musk se inmiscuyera en el diseño de la producción de los vehículos, hasta en los más mínimos detalles, y quería evitar que interviniera.

Tesla no ha respondido de forma inmediata a la solicitud de comentarios de Business Insider. Elon Musk se ha opuesto a otras partes del libro en Twitter.

Field dejó Tesla a mediados de 2018 en medio de supuestas luchas entre los altos cargos de la empresa. Al parecer, Musk quería tener más control sobre el proceso de producción de los vehículos de la empresa y apartó a Field. Esa agitación se centró específicamente en el Modelo 3, que fue lanzado en 2017 y sufrió problemas de producción.

Tesla se ha esforzado durante mucho tiempo en lograr la capacidad de autoconducción en sus vehículos, pregonando planes para lanzar en algún momento una flota de robotaxis. En 2019, Musk hizo debutar un Tesla sin volante en el llamado Día de la Autonomía para los inversores. 

"Creo que habrá un periodo de transición en el que la gente podrá tomar el relevo del robotaxi, pero una vez que los reguladores se sientan cómodos con que no tengamos volante, simplemente lo eliminaremos", dijo Musk en su momento. 

El director general y fundador de Tesla incluso ha llegado a decir que los clientes perderán el interés por los volantes.

"La probabilidad de que se quite el volante es del 100%", ya que "los consumidores lo exigirán", dijo Elon Musk en 2019.

Desde entonces, Tesla ha avanzado en su software de autoconducción, pero aún se ha topado con inconvenientes. Musk ha advertido recientemente a los conductores de Tesla de que el sistema "puede hacer lo incorrecto en el peor momento" y les dijo que "por favor, sean paranoicos".

La compañía comenzó a entregar su Modelo Y en marzo de 2020 cuando la pandemia empezó a sacudir el mundo, causando problemas en las fábricas de la empresa en Fremont, California (Estados Unidos). Hay una versión de 60.990 dólares (unos 51.470 euros) y otra de 5.990 dólares (5.045 euros) del Model Y, y la compañía retiró su versión más asequible del vehículo en febrero.

Musk dijo en abril que el Model Y será "muy probablemente" el coche más vendido del mundo en 2022.