Hijos de un mundo tóxico: un estudio descubre que las embarazadas están cada vez más expuestas a químicos de plásticos y pesticidas

La contaminación se cierne como una amenaza sobre las embarazadas del siglo XXI: en los últimos tiempos se han encontrado microplásticos en las placentas o partículas en los biberones, mientras que la mala calidad del aire provoca la muerte prematura de medio millón de bebés al año.

Un nuevo estudio que siguió a un grupo muy diverso de mujeres embarazadas durante 12 años encontró que la exposición a los productos químicos de los plásticos y pesticidas que pueden ser perjudiciales para el desarrollo del feto es cada vez más elevada, tal y como recogeMedicalXpress.

Muchas de las sustancias químicas a las que las mujeres habían estado expuestas eran sustancias químicas de reemplazo: nuevas formas de otras sustancias prohibidas o eliminadas, pero que pueden resultar igual de dañinas. Además de químicos presentes en plásticos, se halló que muchas mujeres habían estado expuestas a los neonicotinoides, un tipo de pesticida asesino para las abejas.

Más de un tercio de las sustancias químicas estaban presentes en la mayoría de embarazadas

En el estudio, publicado en la revista Environmental Science & Technology, se empleó un nuevo método para capturar rastros químicos de decenas de sustancias con una sola muestra de orina. Se midió un total de 103 sustancias químicas, en su mayoría de pesticidas, plásticos y sustancias químicas de reemplazo para BPA y ftalatos. 

Los resultados arrojaron que la orina de una de las mujeres embarazadas albergaba más del 80% de las sustancias químicas, mientras que un tercio de los tóxicos estaban presentes en la mayoría de las participantes. En algunas sustancias, las cantidades destacaron por ser más elevadas que en estudios previos. 

El estudio incluyó a 171 mujeres de California, Georgia, Illinois, New Hampshire, Nueva York y Puerto Rico que forman parte del programa Influencias ambientales en los resultados de salud infantil de los Institutos Nacionales de Salud. Alrededor de un tercio (34%) eran blancas, el 40 % eran latinas, el 20% eran negras y el 6% restante pertenecían a otro o varios grupos étnicos.

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"Queda claro que la cantidad y el alcance de los productos químicos están aumentando durante un período de desarrollo muy vulnerable tanto para la mujer embarazada como para el feto", dice Tracey J. Woodruff, profesora y directora del Programa de Salud Reproductiva y Medio Ambiente de la Universidad de California en San Francisco (UCSF) y autora principal.

Se hallaron exposiciones más altas para las mujeres que no eran blancas, aquellas con nivel educativo más bajo o que eran solteras o habían estado expuestas al tabaco. En la población latina se detectaron niveles especialmente altos de parabenos, empleados como conservantes, así como de ftalatos y bisfenoles, presentes en los plásticos. 

Los pesticidas y los productos químicos de reemplazo estaban presentes en prácticamente toda la muestra de mujeres. 

Las sustancias químicas dañinas ingresan al organismo por diferentes vías, desde los alimentos, al aire, el agua, los plásticos y otros productos industriales y de consumo. 

A través de la comida rápida podríamos estar ingiriendo peligrosas sustancias que actúan como disruptores hormonales, incidiendo de forma negativa en la fertilidad. Así lo desvelaba recientemente una investigación que halló sustancias químicas en la comida de McDonald's, Burger King, Domino's o Taco Bell.