Espera, ¿Sam Altman fue despedido... por malas vibraciones?

Katie Notopoulos
| Traducido por: 
Sam Altman está de vuelta, sean cuales sean las posibles malas vibraciones del consejo.
Sam Altman está de vuelta, sean cuales sean las posibles malas vibraciones del consejo.

Andrew Caballero-Reynolds/Getty Images

  • El culebrón que causó un terremoto en Silicon Valley ya tiene desenlace, pero todavía quedan muchas preguntas sin resolver.
  • Un artículo de The Wall Street Journal apunta a que el despido de Sam Altman pudo deberse, simplemente, a las malas vibraciones que sentía el consejo de administración. Altman volverá a su puesto como CEO y el consejo se renovará.

Espera, ¿Sam Altman fue despedido por... malas vibraciones?

Sam Altman ha vuelto a OpenAI como CEO, pero los detalles sobre por qué exactamente el consejo le despidió en un primer momento siguen siendo un misterio.

¿Podría haber sido tan simple como ... malas vibraciones?

En los últimos cinco días se han barajado diferentes teorías: el consejo temía que no fuera lo suficientemente cuidadoso con la posibilidad de que la IA destruyera la humanidad. O tal vez el CEO de Quora, presente en el consejo de OpenAI, estaba molesto porque las últimas actualizaciones de ChatGPT podrían competir con su propio producto de IA.

El consejero delegado de Microsoft, Satya Nadella, dijo que no le habían explicado el motivo, y el posible sustituto del consejero delegado, Emmett Shear, al parecer tampoco consiguió que el consejo le diera una explicación concreta de lo que hizo Altman.

Ahora, The Wall Street Journal ha publicado este miércoles que la razón puede haber sido aún más confusa: al consejo podría simplemente —y vagamente— haberle dado el ick.

Literalmente, esto es lo que ha publicado The Wall Street Journal:

Fuentes conocedoras del pensamiento del consejo afirman que no hubo ningún incidente que les llevara a tomar la decisión de expulsar a Altman, sino una lenta y constante erosión de la confianza a lo largo del tiempo que les hizo sentirse cada vez más incómodos. También complicó las cosas la creciente lista de empresas externas de Altman relacionadas con la IA, lo que planteó dudas al consejo sobre cómo podría utilizarse la tecnología o la propiedad intelectual de OpenAI. 

El consejo acordó discutir el asunto con sus abogados. Al cabo de unas horas, volvieron sin querer dar más detalles. Dijeron que Altman no era sincero y que a menudo se salía con la suya. Según las personas al corriente del asunto, el consejo dijo que Altman había sido tan hábil que ni siquiera podían dar un ejemplo concreto

A partir de esta descripción, parece que el consejo no pudo determinar exactamente qué es lo que fallaba, aparte de una especie de ~malas vibraciones~.

Y si ese es el caso, parece que nunca sabremos las razones específicas. (¡Y el consejo ni siquiera ha sabido nombrarlas!)

Pero en el fondo, tenían razón: al final, Altman se ha salido con la suya.

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