Sam Altman regresa a OpenAI como CEO

El drama se ha prolongado cinco días. OpenAI, la firma de inteligencia artificial responsable del punto de inflexión que supuso en la industria ChatGPT, acaba de anunciar que Sam Altman regresa a la compañía como consejero delegado.

El consejo de administración de la firma anunció el sorpresivo despido de Altman como CEO de la tecnológica el pasado viernes por la noche.

Ahora es el mismo consejo el que ha comunicado hace cuestión de minutos que Altman volverá a la compañía tras unas intensas negociaciones en las que se ha desbloqueado un "principio de acuerdo". Por ese "principio de acuerdo", OpenAI también transformará su consejo dejando únicamente el nombre de Adam D'Angelo como remanente de su anterior composición.

Altman fue despedido el viernes a última hora del día porque Altman había perdido la confianza del anterior consejo, según abundó este último en un comunicado de prensa. La salida del CEO de OpenAI supuso su reemplazo por Mira Morati, CTO, como consejera delegada interina hasta que se anunciara el nombramiento de un sucesor o sucesora.

El despido de Altman ha levantado una polvareda como pocas en la industria tecnológica. El CEO de Microsoft, Satya Nadella, se ha inmiscuido personalmente en esta polémica. La multinacional de Seattle tiene una importante participación en OpenAI. Nadella anunció el fichaje de Altman. No tendrá que llevarse a término porque Altman regresaría a casa prácticamente convertido en héroe.

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De hecho, The Verge, uno de los medios que está siguiendo este regreso, avisa que Microsoft podría disfrutar de un asiento en el nuevo consejo de OpenAI. Tanto Nadella como el propio Altman han compartido sus impresiones en X, la plataforma social anteriormente conocida como Twitter.

"Nos alientan los cambios en el consejo de OpenAI y creemos que este es un primer paso clave hacia una gobernanza más estable, informada y eficaz en la compañía. (...) Esperamos aprovechar nuestra sólida asociación y ofrecer el valor de esta nueva generación de inteligencias artificiales a nuestros clientes y socios", ha escrito el CEO y también presidente de Microsoft.

Por su parte, Altman ha dicho que cuando aceptó el domingo por la tarde unirse a Microsoft lo hizo pensando que esa decisión sería la mejor para ayudar a mantener el camino de OpenAI unido. "Me encanta OpenAI y todo lo que he hecho en los últimos días ha sido para mantener unido y centrado al equipo".

"Con el apoyo del nuevo consejo y con Satya espero volver a OpenAI y aprovechar esta sólida asociación con Microsoft", ha concluido.

El sorpresivo despido de Altman también afectó dentro de la propia compañía. El 95% de sus empleados habían firmado en las últimas horas un manifiesto en el que exigían la vuelta de Altman, lo que finalmente ha acabado produciéndose. Por su parte, los competidores de los creadores de ChatGPT o DALL-E han intentado sacarle provecho a la caótica situación.

De hecho, tras el anuncio del despido de Altman OpenAI comenzó a sufrir una sangría de talento después de que el presidente de la firma, Greg Brockman, dimitiese. Brockman también regresará a OpenAI.

La vuelta del fundador de la compañía también deja una incógnita por resolver. El anterior consejo advirtió que Altman había perdido su confianza y que no había sido "consistentemente honesto". OpenAl está creando la tecnología más potente del planeta: el mundo debe saber sobre qué mintió Sam Altman.